사랑을 위해 살인 Temporada 1 || YoonSeok

강수량; Gangsulyang

Precipitación.

La lluvia caía fuerte sobre el asfalto de la carretera y coche, parecía que no se detendría en toda la noche. YoonGi iba absorto en su tarea, totalmente concentrado en conducir para no terminar muriendo antes de lo esperado.

La cabeza estaba estallándome, me dolía como el infierno pero lo oculte lo mejor que pude ante YoonGi. O eso creí.

—HoSeok.

Una vez más. Desde la discusión en la tarde YoonGi ya no me llamaba como solía hacerlo. Eso me jodía más que el maldito dolor de cabeza y, que casi a golpes me obligó a subir al auto.

—¿Sí?

—Abre la puta guantera y saca las pastillas que deje ahí. No soporto mirarte por el rabillo del ojo apretando la mandíbula, cerrando lo ojos cada dos por tres y soltar un bufido.

Chasqueé la lengua y la mordí para reprimir una grosería. Era malo ocultando las cosas, y más ante alguien como Min.

Hice lo que me dijo. Poco a poco el dolor iba disminuyendo, hasta que a mi sistema sanguíneo se le ocurrió jugármela en contra.

—¡Joder! —chisté alzando la cabeza.

YoonGi frenó con brusquedad y casi sentí estrellarme contra el vidrio del parabrisas.

—Qué te pasa, HoSeok. ¿Por qué...

—Ah~ maldición —a tientas trate de buscar cualquier cosa que me ayudara a parar el sangrado.

—¿Q-qué debo... yo

Tierno. Pensé sin más. Pero lo ignore y abrí la guantera de nuevo, sacando un trapo que parecía estar en buenas condiciones y lo lleve hasta mi nariz.

—Estoy bien hyung —aclaré, escuchándose mi voz amortiguada por el trapo.

—No veo que estés bien, veo todo lo contrario —dijo, desabrochándose el cinturón de seguridad para girarse un poco—. D-dejame ayudarte.

Su mano izquierda tomo el trapo e hizo que bajara la cabeza. Por lo que, le mire con extrañes a lo que él arrugo su nariz y bufó para luego hablar.

—Yo... yo sólo vi por ahí que lo correcto es mantener la cabeza normal, viendo al frente. De lo contrario puedes ahogarte o alguna mierda así.

YoonGi siempre actuaba lindo, pero con su propio estilo. Nunca dejaba esa rudeza de lado.

—Aprieta tu nariz, estúpido —demandó frunciendo su entrecejo.

Después de unos minutos en silencio y ya sin la fría mano de YoonGi sobre mi nariz, hablé.

—Hyung...

—¿Desde cuando empezaron esos dolores de cabeza? Y dime la verdad Jung.

—Seguro es migraña, no es para preocuparse. Estoy bien, ¿lo ves? —traté de sonreír, consigundo sólo una estúpida mueca tan cliché.

—Te pregunte algo, idiota. Respóndeme.

Suspire. —Desde que reapareciste. Quiero decir, ya los tenia pero se hicieron más frecuentes.

—¿Por qué no me dijiste antes? —su tono era áspero, estaba molesto y quizá preocupado.

—No le vi necesidad. Seguro es una molesta migraña, hyung.

—En cuanto todo esto acabe, me aseguraré de que asistas a un médico. ¿Entiendes?

No tuve más opción que asentir.
Pasaron unos minutos en silencio hasta que YoonGi lo deshizo.

—HoSeok, para ser sincero, aún no comprendo el por qué la escena de esta tarde.

—Te escuché... —murmuré.

No quise verle más, por lo que gire mi rostro a la ventanilla y observe como el cielo seguía llorando sin parar.

—Serás hijo de... lo has arruinado todo —dijo entre dientes.

Cerré con fuerza mis párpados,  apretando la mandíbula a tal grado de que me causará dolor.

—HoSeok...

Al escuchar mi nombre, me vi obligado a abrir los ojos de nuevo,  para observar como lentamente la mano izquierda de Yoongi se dirigía a mi hombro e inmediatamente y casi por autoreflejo, evité el contacto apartando su mano de un golpe.

—¡Jung HoSeok! —exclamó fuera de quicio.

—Basta... No logro comprénderte, ¿por qué me haces esto?

—De qué mierda hablas, HoSeok.

—Tus palabras y acciones te hacen contradecirte. Me confundes y lo odio.

La cara de YoonGi se transformó a una de perplejidad total.

—¿Mis acciones?, ¿mis palabras? —preguntó con desconcierto.

—¡Sí! Me tratas con cariño y al minuto estas hablándome con rudeza, trato de comprenderte, de verdad que lo hago pero no tengo súper poderes para saber en que demonios piensas.

—Ve al grano —me ordenó.

—Dijiste que no me querías, ¿no me quieres? Maldición te escuche, no puedes negarlo.

—¿Si quiera fuiste capaz de escuchar hasta el final?, maldito entrometido.

Le mire hastiado, con algo de enfado y después con intriga.
A qué se refería con eso último.

—¿No verdad? El sordo sólo oye lo que le conviene —aseveró, apretando el volante en sus manos.

©セシア

¿Debería subir un capítulo más?
🤔

idk, say me.

22/06/17.