Creo que no te he contado por qué hay dibujos aquí también, uno para cada texto, para cada momento. Seguro lo has notado, a ti nada se te escapa; Cada dibujo tiene algo que ver con lo que escribo, y es porque ellos me ayudan a encontrar las palabras. Además da la sensación de leer un cuento, las imágenes y dibujos introducen al lector al tema, le dan pistas, una guía ilustrada sobre lo que hablará el texto.
He elegido imágenes sencillas, todas por motivos y razones diferentes, y si algún día me preguntas qué pensaba cuando escribí bajo la imagen de la pluma por ejemplo, lo recordaré perfectamente. He pensado también en colocar fotos, pero las considero un tanto impersonales y no siempre transmiten lo que yo quisiera. Siendo honesta, esto lo he descubierto hace poco, repasando en mi cabeza lo que he escrito y dibujado.
Hoy no es la excepción, claro. Pero, ¿por qué un pájaro?
¿Has oído hablar del Ave Fénix? Seguro que sí. Se trataba de un ave fabulosa, de plumas rojas, naranjas y amarillas incandescentes, del tamaño de un águila y con garras aún más fuertes, que se consumía por acción del fuego cada 500 años, para luego resurgir de sus cenizas. ¿Quién no la conoce? Es el típico pajarraco que todos usan para darse ánimos y volver a comenzar cada vez que su vida se desvía ligeramente hacia algún extremo. "Como un fénix", dicen.
¿Será que como las personas, el ave necesitaba un 'borrón y cuenta nueva' en su vida? ¿O será que huye de sus errores de la vida anterior? ¡Imagínate si pudiéramos hacer eso! Vivir, cumplir el tiempo dado y morir, para luego volver a intentarlo. Una nueva oportunidad para aprovechar cada segundo, para corregir errores y cometer otros nuevos que incluso pueden ser peores, para luego renacer y volver a corregirlos. Sería excelente; una y otra vez volver al pasado, cambiarlo millares de veces, poder ver aquellos detalles que por falta de tiempo uno no siempre ve. Vivir una vez más aquellos momentos que nos sacaron una sonrisa, crear nuevos y agregarlos a la lista de noches inolvidables, tal vez. No preocuparse por el tiempo.
Eso me gustaría. Dejar de contar segundos. Es como intentar sujetar el agua entre tus manos, ¿sabes? Puedes retener un poco, unas cuantas gotas, pero el resto se resbala inevitablemente como si no quisieran permanecer en tus manos. Así me siento a veces, tratando de evitar lo inevitable. Al menos hasta que descubro que es tan imposible como frustrante y lo dejo a un lado; para luego desear con toda mi alma poder hacerlo e intentarlo otra vez. Un círculo vicioso un tanto masoquista, debo admitir. Pero es que si no estuviera este asunto del tiempo... No lo sé. No puedo siquiera imaginar lo precioso que sería. He llegado a proyectar cosas en mi mente, mientras dormía, cosas que no puedo decirte por miedo a hacer que te den ganas de huir. Me he visto a futuro, pero cada oración de cada sueño comienza con un "Y si...", y todos sabemos que tras un "y si" se esconde un "pero" cruel listo para saltarnos encima, directo a la yugular.
Y si... pero no. Es como sentir algo que realmente deseas tan pero tan cerca hasta llegar al punto de rozarlo con la punta de tus dedos, y luego desaparezca, se vaya como agua. Y entonces me llegan las ganas de ser como el Fénix, que pasa al otro lado y regresa renovado como si nada hubiera pasado. Incluso sus plumas parecen más brillantes y sus garras aún más fuertes que antes. Imagínate si pudiera hacer eso yo también. Vaya a saber quién las cosas que haría si tuviera una segunda oportunidad. Por el momento la tengo, claro, es limitada y un poco agotadora pero no importa; la tengo.
En fin, era sólo eso. Un simple deseo.
Por mi parte puedo prometerte una cosa, por la garrita.
Prometo que haré incluso lo imposible para quedarme. Considero que me quedan más lagos helados por visitar, un montón de canciones en piano, muchos fuegos artificiales, unas cuantas estrellas que contar, y sobretodo un vestido blanco que buscar.
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No es tan fácil
Romance(¡Corregido!) Seguramente reconocerás mi letra a la primera; bien sabes que desde siempre me he esforzado en que el maldito palito de la "d" quede inclinado con una ligera curva, y la "y" cuente con un final retorcido bastante pronunciado. Sabes t...