"SIN REGLAS"

Capítulo 20. Merecido

Espe

El embarazo lo llevo muy bien, casi estoy de trece semana y mi barriga se nota un poco.

Hoy comemos todos en casa y estoy preparando el plato favorito de Lili mientras DJ arregla la casa. Cuando suena el timbre voy abrir.

- Esperanza, que guapa estás y parece que ya crece - me dice Lili abrazándome.

- Gracias Lili, si parece que ya crece - le respondo. - Por favor pasad - les indico.

- Esperanza, estás muy guapa - me dice Jack con un beso en la mejilla.

- Querida tienes una casa preciosa - me dice Lili.

- Gracias, pero la casa es de mis padres yo sólo pago la luz y agua - le respondo.

- Chicos, me gustaría que vivieras con nosotros - dice Kaly triste.

- Tranquila que iremos a menudo - le digo sonriendo.

Nos vamos al comedor y empezamos almorzar, todo lo que he preparado para seis personas. Jack, Lili y yo nos reímos porque es muy gracioso ver como se pelean DJ, Kaly y Fred sobre el sexo del bebé y los nombres. Después del almuerzo pasamos a la salita y allí hablamos sobre nuestros planes durante el embarazo y cuando nazca el bebé.

Luna se pone alerta y empieza a gruñir en dirección a la puerta y todos nos giramos para saber qué ruido la ha alertado.

- ¿Quién son ustedes? - escupe mi padre de mala gana.

- Papá - digo.

- Señor will, señora will - dice Jack enojado.

- Papá, mamá ellos son los señores Bins, Fred un amigo, Kaly la hija de los Bins y mi amiga y DJ hijo de los Bins y mi novio - presento.

- Y eso - dice mi madre con asco y señalando mi barriga.

- Esto mamá es mi bebé - le digo acariciando mi barriga y la mano de DJ en ella . - Y vosotros qué hacéis - le digo con odio.

- Hemos vendido la casa y veníamos a por nuestras cosas - dice mi madre.

- Tú te vienes con nosotros o te quedas en la calle - dice mi padre con desprecio.

- Esperanza no sé va con ustedes y tampoco se va a quedar en la calle - dice Jack con rencor.

Ya no oigo nada y me siento en el sofá y sólo lloro, luego nos vamos y me quedo dormida.

DJ

Todo está siendo perfecto y como lo hemos planeado Esperanza y yo para comer la familia completa.

Estamos en la salita hablando de nuestro futuro cuando Luna empieza a gruñir y por la puerta entran sus padres. Mantienen una conversación tensa y cuando se sienta en el sofá y empieza a llorar le hago un gesto a Kaly y ella se va con Espe.

- Fred, ayúdame a coger todo lo de Espe y lo mío - le digo.

- En qué te ayudo - me dice.

Cogemos dos cajas grandes y empezamos a guardar las cosas del baño y la habitación. Metemos nuestras cosas personales del baño, las dos mantas que compramos, las fotos, las cortinas de Espe y el resto; en las maletas grandes metemos toda nuestra ropa bien doblada, cerramos las maletas y las bajamos. la caja la bajamos entre los dos, la cerramos y cogemos la otra, en la otra metemos las cosas de la cocina, el salón y la salita; por último terminamos de guardar todas las cosas de Luna y cerramos la caja. Le pido a mi padre las llaves de su coche porque su maletero es más grande, ahí metemos las dos cajas, una maleta en el coche de Fred y la otra maleta en el mío.

- Ya tenemos todo guardado en los tres coches - digo entrando por la puerta.

- Queda algo de la puta de mi hija y de ti - me dice su padre.

- Lo primero su hija no es una puta y segundo no queda nada de nosotros - le digo serio.

- No queremos saber nada de ella ni de su bastardo - dice su madre con asco.

- Mi hijo no es ningún bastardo y no se preocupe que no quiere nada de ustedes - grito.

- Eso espero - dicen sus padres a la vez.

- Aquí tienen las llaves del coche que le regalaron y las llaves de la casa - les digo entregándoselas. - También les digo que no la busquen más y se olviden de ella - le digo con odio.

- Vamos Espe, ya no haces nada aquí y que se... - digo cogiendola. - Luna vamos pequeña - la llamo.

- Algún día se arrepentirán de lo que le han hecho - les dice mi padre.

Salimos de esa casa y no se dice nada hasta llegar a mi casa. Espe se ha quedado dormida en el camino y la cargo con cuidado hasta mi habitación y la dejo con cuidado tapándola.

Bajo al salón y entre todos descargamos los coches y poco a poco vamos colocando las cosas cada una en un sitio. Las cosas de la cocina se encargan los empleados, las cosas del baño y las maletas con la ropa me ayudan a subirlas y a guardarlas en el armario y en el baño cada cosa en su sitio. Mis padres se encargaron de colocar las fotos y cuando bajamos al salón habían hecho un buen trabajo.

- Señores, las cosas están colocadas y la cena servida - anuncia el mayordomo.

- Gracias, ya vamos - responde mi padre.

- Papá - intento decir.

- DJ, no hace falta que las des, eres mi hijo y a ella la quiero como una hija - me dice abrazándome.

- Pobre niña, su vida no habrá sido nada fácil - dice mi madre preocupada y sentada a la mesa.

- No no lo ha sido mamá - le respondo. - Sus padres la han tratado como un objeto que estorba y no pueden tirar - les digo con rabia.

- Ella ha empezado a ser feliz desde que nos conoció en el instituto - dice Kaly y Fred asiente.

- Si me disculpáis voy con ella, no la quiero dejar sola - les digo.

Entro en la habitación y sigue dormida, con cuidado le quito la ropa y le pongo su pijama, y luego me cambio yo; me meto con ella en la cama, la acerco a mí abrazándola y me quedo dormido.