Daddy Issues → Jung Ho Seok; BTS {EDITANDO}

14; party.

¡Por fin había llegado el día de la fiesta!
Me sentía emocionada, era mi primera fiesta desde que nos mudamos.
Quitando el hecho de que era en casa de Tsuki, pero eso no importaba, al fin y al cabo ella misma era la que nos había invitado.

Acabé cambiando mi disfraz de policía por uno de esqueleto, pensándolo bien eso quedaría mejor con el concepto de Halloween.

>>Yoongi
22:34

>>Yoongi
22:34

>>Yoongi!
22:35

>>Iras
22:35

>>Disfrazado
22:36

>>?
22:36

>>Mándalo todo en un maldito mensaje odio leer así. Y no, no iré disfrazado no me gusta
22:37

>>Aburrido 😫
22:35

—¡Vuestros amigos han llegado! —gritó Jin tras la puerta cerrada.

Bajé con Hyeri a ver de qué se habían disfrazado los chicos.
Cuando los vi me parecieron la cosa más adorable del mundo, Jimin llevaba un disfraz de lechuga y Jungkook un conejo. Parecían una pareja.

—¿Acaso es un disfraz de pareja? —comentó Hyeri leyendo mi pensamiento.

—¡No! —ambos se levantaron de un salto del sillón.

—Oh, te ves muy tierno así. —dije  acariciando las orejas del conejito mientras él sólo se sonrojó. Lo que le hacía ver más adorable aún.

—¿Donde es la fiesta? —Jin se sentó junto a nosotros.
Oh no, aquí viene otro sermón.

—En la casa de una compañera de clase —contestó Jimin de manera muy educada.

—Sabéis que si no controláis con el alcohol es mejor que no bebáis y no aceptéis bebidas de desconocidos, sobretodo vosotras dos —nos señaló a Hyeri y a mí —Y tú, Jinae, no quiero ir a disculparme con los padres de nadie porque hayas agredido a alguien ¿vale?

Jungkook y Jimin intentaron controlar su risa y yo me sentí avergonzada.

—Entendido.

—Y tampoco quiero que aparezcas aquí a las 10:00 de la mañana.

—¡Que si!

—¡¡Y ya sabes que te digo con los chicos!!
Gritó antes de que todos saliéramos de casa.
Miré el reloj, ya eran las 23:00.

Me sorprendí por la capacidad de convocatoria que tenía Tsuki. Allí podrían estar más de 100 personas, fácilmente. La fiesta era en su casa pero las personas estaban repartidas incluso por la acera de enfrente
¿Acaso nadie se quejaba?¿Y sus padres? Si yo intentara hacer una fiesta así Seokjin me mataría tras veces y luego me resucitaría para castigarme.

...

—¿Por qué vienes así vestida? —dijo Tsuki con un tono de molestia.

—Es una fiesta de disfraces ¿no? Pues ya está.

Chasqueó su lengua y se fue indignada seguida de sus dos amigas que siempre iban tras ella.

Vi que Yoongi efectivamente no había venido disfrazado y estaba hablando con Hyerin. Supongo que el consejo que le di la otra vez sirvió y me alegra, está bien que se abra un poco más con la gente.

Entré en una habitación al azar. En las que estaban cerradas me imagino que había parejas enrollándose dentro.

—¡No lo puedo creer!

Yo tampoco lo podía creer.

—¡Hemos venido iguales! —Hoseok me señaló sonriendo haciendo que sus amigos también me miraran.
Me alejé rápidamente de la habitación. Me maldecía por haber cambiado el disfraz, si hubiera sabido que  venía de esqueleto yo no lo habría comprado.

—¡Me quiero morir! —exclamé cuando encontré a Hyeri entre la multitud, apoyada en la pared

—¿Y ahora cuál es el problema?

—Él es el problema —señalé a Hoseok. —¿Me acompañas a mi casa a cambiarme?  —rogué juntando las palmas de mi mano.

—Jinae, sólo ignóralo y sigue con la fiesta.

—¡Pero él no me va a ignorar!

—Ven aquí —Hoseok venía con una estúpida sonrisa y me arrastró.

—¡Suéltame!

—Dime la verdad —me dio con su dedo índice en la mejilla —hiciste esto para que vayamos iguales ¿verdad?

—¿Cómo iba a saber yo que tenías el mismo disfraz que yo?

Nos sentamos en un sillón, aunque la gente no respetaba el espacio personal y por poco acabé con un borracho cayendo encima de mí.

—Sabía que la visita al refugio funcionaria—sonrió satisfecho.

—Asi que lo tenías todo planeado —reí.

Me quedé apoyada en su pecho y escucha su corazón. Latía muy rápido. Desvíe ligeramente mi mirada hacia el y el me miraba sonriendo.

No se bien cómo describir esto porque nunca alguien me había mirado asi. Sólo nos quedamos en esta posición mientras veíamos como la gente se emborrachaba lo que me recordó que no había probado nada desde que llegué.

—Hoseok ¿tú no bebes?

—No, no me gusta el alcohol. Lo he probado pero prefiero no beber.

—Pues ahí te quedas, yo tengo que beber algo.

—Espera —me hizo sentarme en sus piernas —No aceptes lo que la gente te de. Es peligroso.

Apoyó su cara en mi hombro.

—Lo que tú digas Hoseok. Ahora suéltame—dije suavemente.

—No. Me gusta estar así contigo sin que me pegues o me llames imbecil.

—Que imbecil

—¿Entonces ahora te caigo un poco mejor?

—Puede ser.

Me hizo gracia su expresión, parecía un niño pequeño haciendo una amiga nueva. Aunque ambos sabíamos que su pensamiento no era precisamente el de la amistad.

...

—¡Le toca a Kim ahora!

—Ya te he dicho que me llames por mi nombre, nada de mi apellido —me tambaleé un poco y alcancé el vaso.

Estaba muy mareada. Rodeada de gente que creo que no conocía. Bueno, los había conocido hace unas horas. Me invitaron a jugar a una especie de versión de la botella, con la diferencia de que aquí no se dan besos, se bebe. Y me pareció divertido.

En los vasos había de todo, creo. Desde bebidas ligeras hasta alcohol muy fuerte que probablemente yo no podría soportar. Y eso que ya había bebido más de la mitad de los vasos.

Escuchaba los gritos de la gente aunque no distinguía apenas lo que decían.