Capítulo 12.

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Autora: Más cerca del final de la historia.

"La aceptación causa dolor y futura fortaleza al corazón"


- Quisiera volver ahora mismo – murmuró la voz al otro lado de la línea.

- Tranquilo – respondió con voz suave – Yo me estoy haciendo cargo mientras no estás y verás que pronto esto será como una pesadilla, ni siquiera lo recordaremos.

- Espero que así sea – hizo una pausa corta – Lamento lo de tu empleo, sé lo mucho que lo amas.

- Siento más amor por otro tipo de cosas.

- Gracias – era el agradecimiento más cansado que había escuchado en mucho tiempo.

- Termina con lo que tienes que hacer y vuelve a casa. Te estaremos esperando todos con un enorme pastel.


Una pequeña risa sonó y sintió de repente que sus anteriores palabras eran completamente ciertas y que todo iba a estar bien.


- Te amo.

- Yo te amo aún más, cariño.


Esas fueron las últimas palabras que intercambió con su esposo antes de cortar la llamada que estaban teniendo a altas horas de la noche – al menos para él – por la diferencia de sus horarios.

Después de su reunión familiar por su cumpleaños, él había vuelto a Londres junto con toda su familia y la familia de su esposo para seguir con sus vidas normalmente, pero dos meses más tarde, cuando él apenas entraba a la cama después de llegar del aeropuerto – bendiciendo el hecho de que al día siguiente era su descanso - había recibido una llamada de Charlotte a su teléfono fijo, ella había sonado desesperada y después de soltar unas palabras de queja debido a que no lo había podido encontrar en su teléfono móvil, simplemente entre hipidos le dejó saber que su madre se encontraba mal y no sabía qué hacer.

Hacía un poco de frío fuera cuando él salió de corriendo de su casa a mitad de la noche en su pijama, y realmente no recordaba en qué momento del camino había perdido una de sus pantuflas – había caído en cuenta de su ausencia al encender el auto -, lo único que tenía claro de aquella noche era que cuando llegó a casa de la familia, las chicas lloraban y Dan se encontraba con Jay en su habitación debido a que ella sentía un fuerte dolor.

Verlas a todas tan destrozadas y a los gemelos sin entender un poco de lo que sucedía le hizo tomar una de las decisiones más grandes de su vida. Era como ese momento que sabía que iba a llegar pero que no estaba seguro de cuando ni el porqué.

A la mañana siguiente de esa tormentosa noche, se dirigió a su hogar con el rostro manchado de lágrimas secas, los ojos hinchados y la convicción en uno de sus bolsillos. Tomó una ducha y se vistió con rapidez antes de volver a salir en dirección al aeropuerto.

Recordaba a su jefa rogándole por quedarse, nuevamente, justo como la primera vez que había renunciado, pero en esa ocasión sentía que no iba a existir ningún punto de retorno y sabía que ella igual lo notó en sus facciones y en su determinación.

Camino a casa después de su inminente renuncia, llamó a su esposo para comunicarle todos los sucesos y lo escuchó lamentándose por no poder volver hasta el momento en que las grabaciones terminaran.

Ese día su vida dio un giro ya que había hablado con Dan y Jay acerca de quedarse con sus hijos todo el tiempo ya que sabía que ellos debían de asistir a consultas médicas y ese tipo de situaciones a las que no podían acompañarlos. Las lágrimas habían bañado el rostro de la madre de su esposo mientras le agradecía por su gran corazón.

AIRPORT 2: Volver a Volar ✈|Larry Stylinson|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora