AIRPORT 2: Volver a Volar ✈|Larry Stylinson|

Capítulo 7.

Autora: Una enorme disculpa por la tardanza en publicar, pero quiero comentarles que aparte de escribir este tipo de novelas Larry, soy coordinadora del Club de Fans de One Direction en el estado de Campeche, México y quería pedirles su ayuda ya que me contactaron para presentar Fanfics en un evento que se realizará en Mayo como escritora y como coordinadora del club, por eso quiero que me digan las mejores Fics que hayan leído para que pueda comunicarme con las autoras con motivo de pedir permiso para poder imprimir sus obras y presentarlas en este evento. Muchas gracias de ante mano y les dejo un enorme abrazo.

"Las amistades verdaderas pueden durar una eternidad a pesar de la adversidad".

Era una mañana normal, una de aquellas en las que no había despertado con Louis entre sus brazos. A decir verdad, ese día no dolía tanto ya que tenía la certeza de que el chico de ojos azules que había robado su corazón años atrás lo amaba completamente.

Tomó su móvil que se encontraba en la mesa de noche, a un lado de su cama, y después de enviar un mensaje de buenos días a su esposo – a pesar de que sabía que el día había empezado desde hacía unas horas para él –, se levantó de la cama para dirigirse al baño a tomar una ducha.

Ese que era el día de descanso tenía que ir a la agencia a ver cómo iban las cosas, verificar las cuentas, firmar pendientes y ese tipo de cosas sin emoción que no le gustaban para nada. Y después de eso se dirigiría a casa de su mejor amigo Nick, que había insistido mucho un día antes porque quería verlo y hablar como lo hacían antes.

Tomó una ducha perezosa para después dirigirse al primer piso de su casa donde se encontraba la cocina y se sintió seguro de que ya estaba ocupada puesto que cuando se encontraba caminando escaleras abajo pudo escuchar la voz de su mejor amigo quien cantaba con todas sus fuerzas una de esas extrañas canciones que solía escuchar.

- Buen día, compañero – le saludó su amigo.

El rizado movió la cabeza, afirmando que lo había escuchado, pero sin embargo no contestó. Caminó hacia la nevera y sacó el jugo de naranja para después depositarlo en un vaso vacío que Zayn ya extendía en su dirección.

- Hoy será un gran día – aseguró, a pesar de que el rizado seguía en silencio, bebiendo del jugo recién servido – La agencia está en excelentes condiciones gracias a mí. No pudiste dejar a mejor persona a cargo.

Eso por fin logró dibujar una sonrisa en el chico de ojos verdes, quien se encogió de hombros con resignación ya que conocía a su amigo demasiado buen como para saber que él decía nada más y nada menos que la verdad.

- Después de eso iré a ver a Nick – confesó.

Zayn lo miró con una sonrisa burlona pintada en el rostro y Harry sabía la razón de eso.

- A Louis no le gustará eso.

- Tampoco es como si se lo fuera a decir.

- Infidelidad – silbó – me gusta.