La Nieta De Dumbledore [Draco Malfoy y Tú]

Capítulo XXII

El día de la tercera prueba se había acercado tanto que sólo quedaban horas hasta saber quién sería el ganador o ganadora, claro.

Sólo los campeones sabían de qué se trataba la última prueba pero eso yo también lo sabía, mi abuelito Dumbledore me mencionó de qué tratará la prueba de hoy para sacarme los nervios que tenía por Harry y los demás campeones.

Sí, acabo de decirle abuelito a Dumbledore.

Aún no me acostumbro mucho a esa idea, de mi nueva familia y todo pero aún así estoy ansiosa por escuchar la verdad de parte de mi "familia". Claro está que nadie más sabe la verdad aparte de Draco, Severus, Dumbledore y yo.

Casi todas las tardes me escabullía de mis amigos para tomar té con Dumbledore en su despacho mientras hablábamos de recuerdos y me mostraba algunas fotografías que tenía de mí cuando chiquita.

Por cierto, oficialmente pasé a quinto año. Así es, aprobé todos mis exámenes, siendo la mejor en Astronomía, Historia de la Magia y Herbología. No es necesario decir que Hermione me ayudó mucho a estudiar y claramente a preparar a Harry para la última y esperada prueba. Recordemos que Hermione obtuvo los mejores puntajes en las demás asignaturas.

Con respecto a mi novio; Draco. Nuestro lugar secreto ha sido y será la sala de Astronomía y quizás esa fue la razón por la que me fue bastante bien en la prueba, habíamos estudiado una semana juntos en aquella sala para la prueba.

— ¡_____! ¿Me estás escuchando?— me gritó Hermy. Estaba muy metida en mis pensamientos como para haberla escuchado.

— Sí, tráeme más comida. — dije. Me miró con cara de "claramente no me escuchaste." Bufé. — No, ¿qué decías?

— Harry usará el hechizo aturdidor sobre ti, intenta correr y esquivarlo.— me explicó. Asentí no muy convencida, ¿cuánto dura el efecto? porque estoy segura que Harry no fallará.

Y tal como dije, después de "moverme" (solamente había dado un paso.) Harry había atacado. Mi cuerpo quedó inmóvil y caí al piso como una estatua. Lo único que podía hacer era mover mis ojos y parpadear.

Hermy, Ron y Harry chocaron los cinco.

¿¡Qué hay de mí!?

Hello?

Estoy aquí... ¡En el suelo!

\\

— Bien Harry, sólo debes hacer todo lo que practicamos, ¿sí?— le aconsejó a Harry antes de que se fuera a preparar, estábamos todos en el Gran Comedor comiendo, pero dudo que alguien pueda comer con sólo pensar en la última prueba; excepto Ron.

— Suerte Harry, haz que Gryffindor y todo Hogwarts se ponga orgulloso de ti.— le dije chocando los cinco, Ron con la boca llena de comida se limitó a abrazarlo.

Harry salió por la puerta y nadie en la mesa dijo una palabra más, todos estuvimos inmersos en nuestros sentimientos, yo, pensaba en si mi sueño tenía que ver algo con este día; el regreso de Voldemort.

Finalmente todos habíamos sido llamados para tomar asiento en las gradas de la, anteriormente, cancha de Quidditch. Tomé asiento junto a la grada de Slytherin, Draco estaba a mi lado pero tomábamos distancia, cuidando que nadie sospechara.

Los cuatro campeones ya estaban en posiciones para lograr entrar a lo que el gran laberinto les deparaba, lleno de obstáculos y objetos que debían lograr esquivar.

Cedric y Harry estaban ya preparados para entrar ya que entraban al mismo tiempo, luego iba Krum y finalmente Fleur. Podía sentir sus pulsaciones hasta acá.