Arrodíllate y besa mis pies. (One Piece. Zoro y tú)

Capítulo 17: Planes a futuro.

A la mañana siguiente Zoro despertó, observando a la joven, quien lo abrazaba, se veía tranquila, pero unas lágrimas bajaban por sus ojos, él entendió que ella seguía triste, posiblemente había sido una mala idea haber tenido relaciones, tal vez ella se arrepentirá.

(T/n) comenzó a despertar, el peliverde no se movió ni dijo nada, esperando a ver su reacción.

-Buenos días...- dijo un poco tímida, pues aunque Zoro le había visto hasta la conciencia, se sentía nerviosa por estar desnuda frente a él.

-¿Estas bien?- le preguntó un poco preocupado.

-Si... es sólo que no sé qué hacer... no quiero volver a casa, pero Cora-san se va a preocupar...- él acaricio su mejilla llamando su atención.

-Tienes razón, no puedes preocupar a quienes te aman...- sonrió levemente, tratando de reconfortarla.

-Zoro... ¿en verdad me quieres?- desvió la mirada.

-Claro que si... te adoro... sólo que es extraño, se supone que lo nuestro no debería ser, yo soy un empleado, tú la hija de mi jefe...- confesó.

-Eso no me importa... sólo quiero que me ames, que nunca me dejes... no lo soportaría...- dijo triste. –Tampoco quiero que te quedes conmigo por lastima... sólo deseo un amor verdadero...- el peliverde levantó el rostro de la joven, besándola con ternura, eso la sonrojo.

-Te amo (t/n)... y deseo estar a tu lado... pero yo poseo secretos, posiblemente me odies...- dijo preocupado.

-Entonces... dímelos...- él se sorprendió. –Dime por qué llegaste a mi casa... Law-niisan sospechaba de ti, pero al mismo tiempo te tenía confianza-

Zoro se sorprendió, por esa razón el mayor nunca le dijo a (t/n) que él le dijo lo de Dressrosa, de alguna forma el ojeroso lo había cubierto.

-Supongo que es justo...- suspiro, se sentó en la cama y (t/n) también, cubriéndose con las sabanas. –Yo en realidad trabajo para Dracule Mihawk...- los ojos (c/o) se abrieron de par en par.

-Entonces... ¿eres un espía?- puntualizó atónita, él asintió. –¿Por qué?-

-Tu padre... Doflamingo desea quedarse con acciones de Mihawk, para ampliar su venta de armas, posiblemente la mayoría de esas armas son de contrabando...- la (t/c) no salía de la sorpresa.

-No sabía que mi padre vendía armas...-

-Doflamingo vende armas de fuego, muy peligrosas y destructivas, Mihawk promueve el uso de espadas, un negocio de generaciones...- seguía hablando Zoro, sin mirar a la joven, no quería ver sus reacciones, sino hasta el final.

-¿Entonces tu jefe quiere que busques pruebas del contrabando, así mi padre iría a la carcel y sus negocios se salvarían?- dijo seriamente, el peliverde pensaba que ella estaba enojada.

-Si... por la reunión de ayer me doy cuenta que ese contrabando es verídico, desea que Kaido transporte eso, sin que la policía lo encuentre...- la joven bajo la mirada.

-Entonces... tú... querías usarme...- planteó con tristeza, Zoro se sorprendió.

-¡No! Por supuesto que no... te confieso que al principio lo pensé... pero te comencé a conocer, y deseche la idea, sólo quería encontrarlos y dejar todo atrás, nunca te hubiera hecho daño...- volvió a levantarle la vista, mirándola fijamente, mostrándole que lo que decía era cierto.

-Zoro...- apartó sus manos. –Te creo... pero no deseo que mi papá vaya a prision...- confesó. –Si el va, estoy segura que mi tío y Law-nissan, varios de la familia también irán...- ahora entendía porque la familia nunca hablaba de los negocios de su padre cuando estaba cerca, posiblemente, todos lo sabían, menos ella.