Sentía las manos de mamá quitarme los cabellos que caen en mi frente, ella venía a mi cuarto por las mañanas para verme dormir, y cuidarme de las pesadillas.
Lo hacía cada mañana. Hasta que... Bueno, ella era humana. Y nosotros demonios. Ella pasó por eso que le pasa a todos los humanos.
Me llegó un aroma que no concordaba con el momento. Empezaba a despertar, pero las caricias no paraban. Era Bonnie, recostada a mi lado, mirándome con tranquilidad mientras el sol daba sus primeros rayos.
–Buenos días, bella durmiente –Dijo, mientras sonreía con ternura.
–B-Buenos días Bonnie. No me digas que dormí aquí toda la noche...
–Yup.
–Oh, disculpa las molestias. A penas te conozco y ya dormí... Contigo... –Me sonrojé por lo que podría parecer.Alzó la mano quitándole importancia al asunto. Me arropó... Así que me levanté y tendí la gran cama rosada. Noté que ella se cambió por una pijama rota y vieja mientras yo estaba dormida.
–Bonnie, por esta noche te voy a hacer un regalo.
–Oh, Marcy, no es necesario. Ya te considero una amiga, puedes quedarte el tiempo que quieras. ¿Quieres ir a desayunar?
–Vayamos a desayunar, pero el regalo lo tendrás.Después de desayunar unos deliciosos panqués de Red Velvet, dejé a Bonnie cerca de la entrada del bosque antes de dirigirme a mi casa.
–Pronto te llevaré a mi casa, querida.
–Lo esperaré con ansias.
–Bueno... Adiós Bonnie. Gracias por todo. –Dije, sonrojándome porque no sé cómo despedirme.Llegué a mi casa y empecé a buscar las cosas de costurería que había botado por allí hace tiempo, pues tenía algunas telas que podrían servirme para el regalo.
Quiero hacerle una playera para que pueda dormir con ella. Me encantaría que fuera rosa como sus mejillas, pero sólo tengo telas negras.
_____
Después de haberme pinchado varias veces los dedos, la playera estaba lista. Encontré un estampado de un concierto al que fui y lo agregué porque me pareció que se vería bien, espero que le guste.
Salí volando de la casa sin antes encontrarme con una tercera carta esperándome en la entrada.
Buenas tardes, Marcy.
Creo que por fin sé qué es lo que siento por ti.
Me gustas. Mucho.
No puedo decirte quién soy todavía, pero, espero que cuando lo sepas, sea correspondid@.
Me encantaría ver cómo caes en el sueño lentamente mientras acaricio tu largo cabello negro, y desprertarte con pequeños besos en los párpados.
Sé que soy muy cursi.
Siempre tuy@, ________.
De verdad espero que sea Bonnie, porque esta carta me hizo sentir completas y verdaderas mariposas.
Guardé la carta dentro de una cajita que hice para las cartas de... Anónimamente Bonnie, y volví a salir con dirección al castillo.
Pero no sin antes encontrarme a Finn y Jake corriendo y gritando por el bosque.
–Hey Finn, ¿para dónde van?
–Vamos al Dulce Reino, ¿Lo conoces?
–Sí querido, yo te llevo. Pero no me puedo convertir en murciélago para llevar a los dos, sólo de noche.
–No hay problema, señorita vampiro. –Dijo Jake, que se encogió hasta caber en la bolsa de la playera de Finn.Volé hasta la entrada del Reino, me agradecieron y corrieron hasta el castillo. Supongo que Finn va a ver a Bonnie.
Volé hasta la ventana de su laboratorio.
–En un momento nos vemos. –Le dije, cuando me escondí al escuchar la voz de Finn gritando "¡Princesa!"
–Oh, hey Finn. –Dijo Bonnie, desganada.
–¿Cómo se encuentra la princesa más hermosa? –Wow, nunca había escuchando a Finn así de seductor. Bueno, el chico ya tiene 19 años.
–Muy bien, muchas gracias. Estoy tratando de hacer una cura para un mal que tienen mis dulces ciudadanos. ¿Crees que puedas traerme un ingrediente?
-Claro que sí, mi dulce bella.Uh, no puedo creer que eso me haya dado celos. Finn es como si fuera mi familia, me preocupo por él como si yo fuera su madre. Y ahora, él está tan enamorado de Bonnie que me siento celosa de que le diga cosas lindas, además de culpable porque le quitaré a su amor.
Quiero a Bonnie para mí.
–¿Marcy? –Dijo ella, asomándose a la ventana para verme flotando a 20 metros sobre el piso.
–Disculpa, divagando otra vez. Te traje algo...Saqué de mi mochila la playera, y se la entregué en las manos, a la vez que ella la olió profundamente.
–Huele a tu perfume. –Se quedó embobada un momento, lo que me hizo sonrojarme.
–¿T-Te gusta?
–¡Me encanta! –Y se la puso debajo de su linda bata blanca.Puro romance del bueno <3
Los quiere, Marcy. <3
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Find me Somebody to Love!
Fanfiction-Me encantaría encontrar a alguien que me amara, he estado sola todos estos años. -Dice Marceline hacia Finn. -Ya habrá alguien. La vida te lo está guardando para el mejor momento.