El concierto.

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P.O.V Bonnibel.

Marcy y yo nos hemos estado viendo en mi castillo, pero hoy por la noche me invitó a uno de sus conciertos en el Reino de la Muerte, ella dijo "habrán huesos, luces y mucha gente aplaudiendo".

Marcy me contó que alguien le está mandando cartas, jeje, dijo que le causan mariposas en el estómago y son de color rosa, me preguntó si alguien de mi Reino estaba interesado en ella.

–Sí Marcy, estoy perdidamente enamorada de ti. –Dije para mis adentros.

Llegó a las 7 de la tarde, cuando el sol se pone.

–El concierto empieza a las 10, así que tenemos tiempo de buscar algo que te quede bien.

Ella traía una blusa negra de mangas cortadas hasta los hombros, con un estampado de un círculo de invocación. Unas botas largas hasta la rodilla y jeans oscuros, pero no negros. Ella es ruda, pero ruda se ve bien.

–¿Quieres ir a mi casa? No creo que en este cuarto algo sea negro.
–Y crees bien. – En realidad tengo algunos abrigos negros por las muertes de mis familiares, pero quiero ir a su casa.

Se transformó en un murciélago gigante, con pelaje tan suave como su cabello. Fino de la cara y de las patas, pero unas majestuosas alas.

Fui recostada en su espalda viendo las estrellas hasta que me dijo " ya casi llegamos" y me asomé a ver qué clase de hogar era.

–Una cueva, perfecto para un murciélago. –Me dije.

Entramos a la cueva y vi una preciosa casa color rosa pastel. Al parecer, las apariencias no son todo. Yo tengo mis sacos negros y ella tiene su casa rosa.

Entró y encendió unas luces de navidad que recorrían todo el techo, y vi un hueco con una escalera en él.

–Marcy, ¿ese es tu cuarto? –Me encantaría hacerla sentir incómoda. Ya saben de qué forma.
–S-sí... ¿Subimos? Allí está mi clóset.

Me cargó para subir. Era un cuarto espacioso, tenía un baño al lado izquierdo de la entrada, la cama al derecho, el clóset, las lámparas hechas de pelotas de ping pong, un escritorio con una grabadora y muchos bajos de diferentes estilos colgados por todas partes. Oh, también tenía algunos posters de bandas que no conozco, dos mesitas de noche y maquillaje sobre ellas.

–Me gusta tu cuarto, querida.
–Gracias, Bonnie. –Hice que se pusiera roja. –¿Te gustan las mangas largas? ¿Cortas? ¿Sin mangas?
–Sin mangas.
–De acuerdo. ¿Ruda o suave?
–Suavemente ruda.

Me prestó una chaqueta de cuero suave para que me pueda mover, una playera sin mangas con un cráneo formado por estoperoles, jeans ajustados y botas de combate de cuero.

–Puedes cambiarte en el baño, preciosa. –Me dijo.
–Me cambiaré aquí. –Ella no dijo nada, pero noté sus mejillas tan rojas como sus ojos.

Me quité mi suéter rosa y mi camisa blanca de puntos negros que traía, dejándome en mi brassiere blanco.

–B-Bonnie... –Me acerqué a ella.
–¿Me ayudarías con el pantalón? –Susurré suavemente sobre sus labios.

Ella cerró sus ojos, y se acercó lentamente hasta que nuestras bocas chocaron.

P.O.V Marceline.

No pude resistirme. No puedo pensar en nada más que este momento. Su boca sabe a cereza, no a fresa, no a chicle. Sus labios son tan suaves que podría confundirlos con la ternera, su piel tan tersa y cuidada. Su lengua... Uf, la mejor parte.

–Te atrapé, mi Reina. –Dijo ella.

Seguimos jugando con nuestras lenguas, caminando lentamente hacia la cama. La recosté suavemente sobre ella sin despegarnos, acariciando sus curvas, subiendo mis manos hacia los pechos.

Ella gemía bajito dentro de mi boca, cuando me separé y le hice una seña con la cabeza diciendo "¿Puedo seguir?" y ella asintió.

Y entonces ataqué su cuello, haciendo pequeños chupetones por todas partes. Bajé hasta el medio de los dos pechos, masajeándolos con cuidado y dándoles pequeños besos. 

Hasta que empecé a jugar con su pezón, ella gemía y sonreía mientras iba bajando su pantalón.

–Bonnie... –Me separé un poco de ella.
–Dime Marcy. ¿Te sientes bien con esto?
–Es que, ni si quiera sé mucho de ti. No quiero que esto sea sólo de una noche. Quiero algo bien, empezando bien. Quiero ir a tomar café contigo, acostarnos en el pasto contándonos cosas de nosotras. Yo sé que soy algo cursi.
–Tu cursilería me encanta. –Dijo ella, sonriendo y sentándose en la cama.
–No te preocupes Marcy, dejaremos esto para cuando estés lista.

Y la abracé, alzándola de la cama.

–Te quiero Bonnie.
–Yo te quiero más. –Y le di un beso dulce y calmado.

____

P.O.V Bonnibel.

Fuimos al lugar del concierto. No sabía que Marcy tenía tantísimos fans, tuvimos que volar por encima de todos, ella me dejó hasta la fila de los que habían pagado V.I.P, así que estaba a salvo de las oleadas típicas de los conciertos.

No podía dejar de pensar en su lengua jugando con la mía. Ella había entrado a los Back Stage a afinar su bajo y vocalizar.

Y empezó el concierto. Ella salió tan hermosa como siempre, con el cabello suelto volando detrás de su espalda, con una sonrisa de victoria y sus animaciones al público tan típicas.

Ella volaba, cantaba y tocaba mientras la gente hueso trataba de tocarla, es entonces cuando me mandó un beso y la gente enloqueció, diciendo "¡Es para mí! ¡No! ¡Es para mí!" y yo, sonrojada como tomate. 

____

Terminaron la última canción y entonces dedicó unas palabras al público.

–Gente de hueso, nos alegra mucho venir a tocar aquí para ustedes. Y en frente de ustedes es que les digo algo por primera vez. –Y entonces se acerca a la orilla del escenario, dándome la mano con una sonrisa, ayudándome a subir. Uno de los guitarristas toca de emoción.
–Ella... Ella es Bonnibel. La chica más dulce, literalmente, que he conocido.
–Y la gente se ríe y grita de emoción.
–Chicos, quiero hacer una locura.

–Bonnibel, no sé nada de ti, pero, enfrente de todo el mundo, quiero saber más de ti. Quiero saber tus alegrías, tus miedos, tus emociones, quiero conocerte. Es así... –Y me toma las manos. –Es así como te pido que seas mi novia.

Y la gente enloquece a más no poder.

–¡Sí Marcy! ¡Claro que sí! –Y nos besamos apasionadamente, con la gente gritando de emoción y de alegría.

Sin duda, la primera noche de mi lista de noches favoritas con Marcy.

Fueron timados7u7

Pero pronto vendrá, no se preocupen <3

Los quiere, Marcy. <3

Find me Somebody to Love!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora