Narra Taylor
Después de pasar un buen rato ensayando con la banda, decido que ya es hora de irme. Se estaba haciendo tarde y la verdad es que ya estaba un poco cansado.
Me despido de los chicos para luego caminar hasta mi moto, acelero y arranco.
Cuando estoy a solo unos metros de llegar a mi departamento, observo como una chica comienza a moverse para tratar de escapar. ¡El chico se la quería violar!
Cuando me di cuenta que era Sofía, me entraron unas enormes ganas de matarlo, ¿pero que hacía ella a estas horas de la noche?
Llamo a la policia explicando lo que estaba sucediendo y luego llevo a Sofía a mi departamento. No la dejaría aún en su casa en estas condiciones, se como es Caroline y las cosas que podría decirle.
Apreto la mandíbula de solo pensar que hubiese pasado si no llego a tiempo o si nunca hubiese pasado por esa calle. De solo pensarlo me entraban unas ganas de ir a matar al hijo de puta, es que ¿cómo pueden existir personas así?
Estaba jodidamente enojado que había roto uno de los gabinete de la cocina por haber cerrando con fuerza. Trato de tranquilizarme ya que Sofía se encontraba solo a unos metros de donde yo estaba.
Comienzo a preparar algo para cenar, no tenía muchas cosas porque recién me había mudado pero podía inventar algo.
Pasan algunos minutos y siento como sus manos rodean mi cintura.
-gracias- dice- gracias por ser mi héroe y salvarme
Por un momento sus palabras me dejan aturdido, pero a pesar de todo siempre sería su héroe.
Siento su respiración en mi espalda, su cercanía estaba provocando que mi corazón se me acelerara. Deposito mi mano ensima de la suya y la acaricio, en la cocina solo se escuchaba nuestras respiraciones hasta que Sofia se le escapa un sollozo.
Me doy media vuelta con las manos de Sofia aún en mi cintura, parece que no me quiere soltar.
La chica que tenía al frente miraba un punto de la cocina tratando de evitar mi mirada. Pongo mi mano en su barbilla y la obligo a que sus ojos se dirijan a mi.
-yo....- una lágrima se desliza por su mejilla, con mi pulgar se la quito.
-sshh- pongo mi dedo en sus labios- no tienes que decirme nada.
-quiero hacerlo Taylor- dice.
-primero deja curarte ese labio- la tomo por la cintura, provocando que Sofia se sobresalte la dejo sentada ensima de la pequeña isla que había- espera un momento.
Me dirijo al baño a buscar el pequeño botiquín. Antes de salir me miro al espejo y observo que la herida de mi labio casi no se notaba.
Voy nuevamente a la cocina, Sofia se encontraba balanceando sus piernas debido que estas le faltaban bastante para tocar el suelo. Sonrío al sólo verla.
Dejo el botiquín al lado de ella y saco las cosas necesarias para limpiar su labio. Sofia solo me observa.
Con un algodón, limpio suavemente ya que hace un sonido con su boca indicandome que le dolía. Aprieto mi mandíbula de sólo pensar que ese maldito la golpeó.
Sofia se da cuenta por lo que deposita su mano ensima de la mia y me regala la sonrisa mas sincera que había visto durante este tiempo. Me recordó cada momento que pasamos juntos y con ello me di cuenta que no dejaría que Sofia se fuera tan fácil de mi lado, estaba locamente enamorado de la chica que se encontraba al frente mio.
La observo unos segundos notando como sus mejillas se tornaban un color rojizo lo que me hizo sonreír. Sabía que mi antigua Sofia aún seguía ahí.
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Siempre fuiste tú
Romance-¿te conosco?- pregunto -emm creo que no- responde la chica de ojos azules -¿cual es tu nombre? -me llam...- no alcanza a responerme, ya que la creo que es su amiga,la toma del brazo y sale corriendo con la chica desconocida. Sus ojos me recordaban...