❤ Veinticuatro ❤

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- ¿C-Cómo? - le pregunté sobresaltado al oír tan repentina afirmación.

- ¿Oh acaso me vas a mentir? Los veo juntos siempre, desde esa vez que salieron de aquella cena y cuando ella se acercó a ti a llorar en tu hombro.

<<Y la verdad es que hacen muy buena pareja.

La pequeña pelinegra decía esto mientras se limpiaba las lágrimas que caían por su rostro, entonces yo la tomé de las muñecas impidiendo que lo hiciera y acto seguido, pasé a limpiarlas con un cálido beso. Ella se puso roja de nuevo.

- Yo no siento nada por Nami, Kaede. Si eso te pareció, entonces discúlpame, no era mi intención. Como tampoco lo era el que no haya querido ceder ante tus intentos, simplemente no me di cuenta.

Luego vi que sus facciones comenzaron a aliviarse y yo me sentí mejor y mucho menos culpable. Luego ella me miró directamente a los ojos y esbozó una gran sonrisa divertida dedicada para mí. Como si mi cara estuviera pintada como la de un payaso de circo. Yo también sonreí por contagio.

- Vaya que sí eres idiota... - me dijo aún en broma y luego se volteó dándome la espalda. Yo tuve curiosidad por ver lo que hacía hasta que una almohada me golpeó en pleno rostro.

- ¡Ríndete ante el gobierno mundial Mugiwara no Luffy! - gritó desafiante mientras se paraba sobre la cama y saltaba sobre ésta - ¡Soy la súperrr comandante de la marina y nunca me vencerás!

Y ¡Zas! volvió a ser la misma. Volvió a ser mi enérgica y divertida hermana menor. A quien había cuidado por tanto tiempo... Hasta pasado los dos años y recién entendí que debía cuidarse sola. Aunque fuese muy precavida, no le tomaban fácilmente el pelo y... qué decir. Era la más corajuda y valiente de la tripulación a diferencia de Robin y Nami que atacaban a distancia.

Pero me daba nostalgia ver que mi bella hermanita ahora pasaba a convertirse en una mujer. Sin embargo, Torao estaba a su lado y eso me daba más confianza. Dejó de invadirme aquella molestia de verlos juntos antes y me sentí muy feliz por ella.

Así que decidido a seguirle el juego, agarré una almohada y se la tiré en la cabeza. Luego ella agarró ambas y yo fui apaleado por almohadas, hasta que cogí una y así estuvimos toda la noche.

Riéndonos como si fuésemos un par de niños. Me alegré de que Kaede no haya cambiado en éstos dos años, pues era la más contemporánea a mí que el resto de la tripulación.

Luego nos tumbamos en la cama muy cansados.

- Te deseo suerte en tu relación con Torao - le dije formando ampliamente una sonrisa en mis hoyuelos. Ella me dedicó el mismo gesto.

- Gracias... Ahora me siento feliz de ya no verte como un hombre. Si no como...

- ¿Tu hermano mayor? - le interrumpí con aquella pregunta y ella arqueó una ceja. Luego desvió su mirada de mí y la depositó en aquel mar de estrellas en donde brillaba la luna. Yo también hice lo mismo, asombrado.

- No me digas que porque soy menor, me has considerado tu "Hermanita" - dijo mientras hacía la comillas con sus dedos. Luego se sentó con las piernas cruzadas y estuvo mirándolas un rato mientras se sonrojaba. Yo le agarré el mentón para forzarla a que me mirara a los ojos, mientras aún me encontraba tumbado en la cama.

- Mi intención es protegerte - le dije esta vez con seriedad y ella pareció comprenderlo - Sé que puedes cuidarte por tu cuenta, pero no me perdonaría si algo te pasara. Sé que he estado un poco distante últimamente, pero desde ahora pasaremos más tiempo juntos ¿Está bien?

Luego ella se tumbó al lado mío y suspiró muy dichosa. Cerró los ojos, pero aún no quería que durmiera, así que la moví para que no lo hiciera. Ella obviamente no estaba dormida y me dio unas palmadas suaves en la mejilla.

- Me siento feliz Luffy, por fin me siento en paz y ya no tengo que llorar todas las noches.

Me entristecí al escuchar eso.

- Realmente lo siento Kaede - le dije muy arrepentido.

- Tranquilo, no pasa nada. Eso ya está en el pasado. - Luego me dio un tierno beso en la mejilla lo que me había aliviado - Pero ahora sí tenemos que dormir, mañana vendrá Law a visitarme.

Entonces se acurrucó contra mí como señal que tenía frío y yo la abracé con mucha fuerza. Prometiéndome a mí mismo en no dejar que nada le sucediera, que la protegería.

Así fue como dormimos como dos hermanitos en aquella noche.

❤¡Love and dance! ❤ [One piece fanfic]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora