---Nowaki---
En todo el transcurso del viaje Hiro-san se la paso mirando por la ventana, tenía un semblante de preocupación, por más que le preguntaba solo me respondía con evasivas o simplemente no decía nada.
No me gusta verlo así, me preocupa que algo malo este pasando y se lo guarde para él, Hiro-san es mi vida entera junto con nuestro bebé que lleva en su vientre.
Con solo mirarlo quedo más enamorado de él, sus mejillas sonrojadas cuando le digo lo mucho que lo amo, su sonrisa cuando tiene algún recuerdo, su enojo cuando sus alumnos lo molestan, su manera de decirme que me ama.
-Eres mi vida entera. –sonreí.
-Y tú la mía.
-¿Hiro-san?
-Nowaki yo...
-¿Sí?
-Quiero que hablemos con mis padres.
-¡HIRO-SAN! –lo abracé.
-B-Baka, ¿Qué haces?
-No sabes cuánto te amo, en verdad lo hago.
-Yo también te amo Nowaki.
-¿Cómo son tus padres?
-Pues, mi madre es cariñosa y comprensiva, mientras que mi padre es muy serio y rígido.
-¿A quién te pareces más?
-Pues físicamente me parezco a mi madre y de personalidad a mi padre.
-Vaya, por eso eres tan perfecto.
-C-Cállate baka. –se sonrojo.
-Te amo, -bese sus manos- eres mi vida entera, prometo protegerte siempre.
-LO sé.
-Así que quédate por siempre a mi lado.
-Siempre estaré a tu lado Nowaki, eso jamás cambiara, además estamos esperando la llegaba de nuestro bebé.
-Es verdad.
-Gracias Nowaki, -sonrió ampliamente- por darme el mejor regalo del mundo, aunque son regalos, tu amor y este hermoso bebé.
Esa sonrisa es de las pocas que Hiro-san me regala, me hace sentir feliz, lo abrace a mi pecho mientras acariciaba su espalda.
-¿Estás llorando? –se sorprendió.
No me había dado cuenta que mis lágrimas comenzaban a caer manchando su camisa.
-Lo siento, es que yo realmente soy feliz.
-Eres un baka, -recargo su cabeza en la mía- pero así te amo.
-Hiro-san, te amo.
Nos quedamos dormidos en el resto del camino mientras él se recargaba en mi hombro, yo tomaba su mano.
No sé qué habrá pasado por su mente hace rato, pero me alegro tanto que esté calmado y que quiera hablar con sus padres, así podré pedirlo adecuadamente, soy el hombre más feliz de la vida, quiero que me ame eternamente.
Después de unas horas llegamos hasta Japón, el avión comenzó a descender y moví un poco a mi Hiro-san.
-C-Cinco minutos más. –bostezo.
-Siempre eres así, -susurre en su oído- ¿Cómo debería despertarte?
Mordí su oreja y empecé a hacerle cosquillas.
Él empezó a reírse mientras trataba de apartarme. Abrió los ojos y lo mire, tome su mentón y lo besé, pensé por un momento que me apartaría pero se aferró más a mis hombros.
Desde que está embarazado se ha vuelto más cariñoso y amoroso conmigo, me gusta que se porte de esa manera, es tan lindo.
Después de unos minutos bajamos del avión y nos dirigimos a la salida para tomar un taxi.
Nos subimos y tardamos un poco llegar puesto que había un poco de tráfico.
-Debimos avisarle a Tsumori-senpai de que nos íbamos a regresar. –comente al abrir la puerta.
-¿Para qué querías avisarle a ese idiota?
-¿Nani?
-¿Acaso te importa mucho?
-Mi amor.
-Nada de amor, -cruzo sus brazos- si tanto te importa Tsumori ve a buscarlo.
Camine hacia él y lo estreche en mis brazos.
-Parece que por el embarazo tus hormonas estás descontroladas.
-¿Tienes un problema conmigo? –me miro.
-Solo era una pregunta lo de Tsumori, tú eres al único que amo.
-Eso dices y cuando esté hecho una pelota me vas a dejar.
-Hiro-san.
Tome su mentón y lo besé tiernamente.
-Te amo, eres mi vida entera y nadie cambiará eso, así que no pienses eso, -tome sus manos y las besé- estaré contigo hasta el final, además que serás mi esposo, quiero que nos casemos antes que nazca nuestro bebé.
-N-Nowaki.
-¿Te parece en un mes?
-Sí, -me abrazo- gracias por aguantarme.
-No tienes nada que agradecer, yo te amo seas como seas.
---Shiro---
Abrí los ojos y pude ver que ya no estábamos en el avión, lo último que recuerdo es que William me obligo a tomar algo que me dio mucho sueño.
Ahora estoy en una habitación, mire a mi alrededor y vi una gran ventana con vidrio grueso y una especie de tablones afuera que la cubrían, había un librero enfrente, una mesita de centro, un sofá y a mi izquierda una puerta, creo que es el baño porque hay otra puerta casi llegando al librero.
Me senté y sentí algo raro en mi cuello.
Era un listo con un cascabel.
-Debe estar bromeando. –murmure.
Me pare de mi asiento y camine hacía la puerta del baño y algo me detuvo, tenía algo atado a mi tobillo, era como un grillete y una cadena atorada a la pata de la cama.
Intenté quitarla pero no podía, tome lo primero que veía para intentar romper las cadenas, pero no podía hacerlo, por más que intentaba no podía hacerlo...
-Ald, -solloce- perdóname mi amor.
Me recargue en la pared y abracé mis rodillas, no sé cómo salir de aquí, quiero ser feliz, quiero ser libre, ¿Por qué me pasa esto a mí?
Escuche unas pisadas aproximarse, pero ya no podía moverme, ya no quería hacerlo, solo apreté aún más mis rodillas.
La puerta de abrió con un rechinido.
-Te traje algo para que comas. –comento.
No conteste, no lo haré, no tengo ganas.
-Sé que no la estás pasando nada bien, -cerró la puerta y escuche como el metal chocaba con el vidrio- pero debes hacer un esfuerzo.
-T-Tú eres su cómplice. –murmure.
-LO sé, pero lo hago porque quiero tener a mi lado a lo que más amo en la vida.
-¿Cómo? –lo mire.
-Me enamore de Hiroki desde antes que Nowaki, no es justo que él se lo quiera quedar, llevo enamorado de Hiroki desde que él tiene 15 años.
-P-Pero, ¿Por qué no le dijiste nada?
-Porque pensé que le gustaban las mujeres, nunca lo vi con un chico en algo comprometedor, y cuando creí obtener la oportunidad llega el idiota de Nowaki y me lo quita.
-T-Tsumori, n-no crees que lo mejor es dejar que sea feliz con otro-
-NO, -gruñó- él es mío, yo lo amo.
-Solo era una opinión. –murmure.
-Te voy a quitar los grilletes, William quiere que te sientas libre en esta habitación.
Me sentó en la cama y tomo mi pierna, lentamente me quito el grillete de mi tobillo.
-Está un poco lastimado.
Agg. –jadee cuando me movió mi pie.
-Pobrecito, -me miro- te pondré una pomada y una venda, por lo mientras come un poco.
Me cargó y me llevo hasta el sofá.
-¿D-Dónde está William? –pregunte temeroso.
-Él está haciendo unos negocios con un hombre pelirrojo, tal vez cuando termine te acompañara.
Me estremecí ante esas palabras y empecé a abrazarme.
-No quieres verlo, ¿verdad?
Negué con la cabeza.
-Shiro, -se incoo y tomo mi mano- trata de obedecer a William, tal vez pronto puedan dar una vuelta fuera, donde puedas pedir ayuda.
-¿P-Por qué me ayudas? –solloce.
-No creo que te merezcas todo esto, William solo quiere vengarse de su hermano, -me limpió las lágrimas- te recomiendo que te portes bien.
-T-Trataré.
-Bueno iré por las cosas.
Salió de la habitación y comencé a comer un poco de la comida que me había traído.
Parece ser una buena persona pero, está obsesionado con Kamijou-san, espero que no le pasé nada a él.
Tsumori llego de nuevo y tomo mi pierna, me aplico una pomada y luego me lo vendó.
-Sí no estuviera enamorado de mi castaño, -beso mi tobillo- tal vez me hubiera enamorado de ti, eres muy lindo.
-P-Pero que dices... -desvié mi mirada.
-Solo digo la verdad, -sonrió- seguramente tienes muchos pretendientes.
-No es para tanto.
-Shiro, solo haz lo que te digo.
Tal vez tiene razón, tengo más probabilidades de salir si me porto bien con él.
---Raven---
Han pasado cuatro días, en los cuales no sabemos nada de Shiro, Ald está desesperado, ha estado buscando en los países más cercanos, ha tenido algunas pistas y las mayores se centran en Japón.
Hiroki me ha dicho que Derek no ha hecho nada fuera de lo común, en verdad quisiera ir pero no puedo dejar a Harumi es muy pequeña y no podría viajar con ella, aunque tampoco quiero que Damon viaje, yo quiero estar presente.
Afortunadamente Iason se va recuperando poco a poco.
Le he contado todo lo que me dijo Hiroki, acerca de Derek, él también quiere ir a ese lugar, pero le he dicho que no se preocupe, que primero debe recuperarse.
Damon se ha portado muy lindo con nosotros, es la persona la cual yo amo, me alegro que todo entre nosotros se haya aclarado, aunque aún sigue celoso de Iason y no se el por qué.
-Iason, cuantas veces te he dicho que te comas todas las verduras.
-Raven, no me regañes.
-Pareces niño chiquito. –suspire.
-Mejor pásame a la hermosa Harumi.
-Mmmm.
Camine hacia la cuna y cargue a mi niña, me senté a lado de Iason y se la coloque en sus brazos.
-Es perfecta, en verdad muy hermosa.
-Lo sé. –sonreí.
-Ya me imagino cuando esté en la adolescencia ese Damon se la pasará celándola a cada rato.
-Lo conoces perfectamente. –reí.
-Debería ir a Japón y...
-No puedes.
-¿Eh?
-Apenas recibí una carta de Ald y me dijo que quiere que te encargues del reino.
-Y ¿luego? –sonrió- No me creo eso, seguramente lo dijo por ti y Damon.
-Sí, pero le dije que eres un perfecto candidato.
-Tramposo, -suspiro- aceptaré siempre y cuando tú me dirijas.
-Está bien.
-Pero en cuanto esté mejor, iré a Japón.
-Y yo te acompañaré.
-Eres muy complicado.
-Digamos que ser padre te cambia.
-En tu caso es ser madre.
-¿Acaso quieres perder los dientes? –lo mire.
-¿A besos?
-Idiota. –me sonroje.
-Eres tan lindo cuando te enojas.
-Te golpeare si sigues así.
-Valdrá la pena...
![](https://img.wattpad.com/cover/95486078-288-k646154.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Por Siempre a Tu Lado... (Nowaki x Hiroki)
FanfictionPromesas, juramentos, teniendo que superar obstáculos, enfrentando los celos, ¿Su amor lo podrá vencer todo?