Believe

Capítulo 15

N/A: Cuando vean ** ya saben que pueden poner la canción que les dejo en multimedia, si no pueden ponerla ahí les dejo el nombre de la canción, yo recomiendo que si la escuchen ya que me inspiré con esta canción de nuestro hermoso Elvis Presley, la canción es Can't help falling in love. Disfruten el cap.

Finn POV

No sabía qué horas eran, mi reloj estaba destrozado en varios pedazos en alguna parte de la habitación, mi celular se encontraba sin carga desde no sé cuándo, no me había molestado en cargarlo. Las cortinas de la habitación estaban cerradas y aunque estuvieran abiertas no podía verlas ya que tenía la cobija hasta mi cabeza en modo de protección, no tenía ganas de nada, me sentía muy cansado debido a que si mucho había dormido un par de horas; me estaba dando insomnio una vez más.

-Finn, cariño, ya debes levantarte- alzó la voz mamá desde afuera de mi habitación.- ¿Finn?- la perilla giró en un intento de abrirse pero fue en vano ya que estaba con seguro.- ¡¡John!!- grita mamá a papá, estaba entrando en pánico e inmediatamente me sentí mal por ella.

-Sigo con vida, mamá- respondo lo suficientemente alto como para que me escuche. Un suspiro audible sale de los labios de mi madre.- Lamentablemente sigo con vida- susurro para mí.

-El almuerzo ya está listo- mamá quiere animarme pero mi cansancio puede más.

-No tengo hambre, quiero dormir- escucho cuando meten la llave a la perilla y al segundo siguiente unos pasos entran velozmente a la habitación.

-Cielo, debes almorzar, ayer no cenaste- mi cama se hunde cuando mi madre se sienta a un lado y coloca su mano sobre mí.- ¡¡Pero mira que hermoso está el día hoy!! ¿No quieres salir a dar un paseo? Estoy segura que encontrarás cosas maravillosas que capturar con esa cámara, necesito ver una nueva galería de tus fotos.

-No tengo ánimos, prefiero dormir un poco más, en la noche no pude hacerlo- saco la cabeza de la cobija y miro a mis padres que casi están sobre mí, los ojos de mamá se abren con asombro pero inmediatamente cambia su cara, de seguro he parecer un cadáver o un mapache debido a las ojeras.

-Tu primo Billy llamó ayer, quiere venir a verte.

Un golpe en mi hígado parece atacar por novena vez en lo que llevo despierto.

-No es necesario...

-Dijo que en una hora llegaría a más tardar- interrumpe papá haciendo una mueca, sé que esto les duele también a ellos pero hoy es uno de esos días en los que no quiero salir de mi cama.

En este último mes todos los días han sido así.

-Por favor, Finn, debes intentar levantarte, a todos nos está doliendo esto, pero debes pensar que él aún sigue en prisión. Nos está consumiendo a tu madre y a mí el verte así.

Los ojos cristalizados de mamá es lo que me remuerden la conciencia y a pesar de que no quiero salir termino asintiendo por ella. Sus ojos se iluminan al igual que los de papá, mamá me deposita un beso en mi frente y se levanta.

-Entonces a levantarte y arreglarse, tu cuarto parece ya una cueva y tú no hueles a rosas precisamente- se burla mamá e inevitablemente me saca una sonrisa.

Ellos salen de mi habitación más contentos de como entraron y reúno todas mis fuerzas para levantarme de la cama. Mis músculos se quejan notablemente, creo que me hace falta caminar un poco más o levantarme al menos para comer, sólo me levanto para ir al baño y eso que me aguanto mucho.

Cojo un poco de ropa y me dirijo al baño, abro la llave y me desvisto por completo, no puedo evitar las muecas que hago al moverme, me duele como los mil infiernos. Mi figura la veo en el espejo y parece ser otra irreconocible, sabía que estaba enflacando ya que la ropa me iba quedando cada vez más grande pero verme en el espejo y ponerme atención es otra cosa muy diferente, casi podría jurar que se comienzan a notar mis huesos.