PLEASE SAVE ME TONIGHT

CAPÍTULO 39

– Jungkook debo salir un momento, volveré tarde. - Me asombré al escuchar la voz de Jimin, levanté la mirada observando atentamente sus movimientos. Guié mis brazos a mi cuerpo abrazándome. Me sentía extraño, no quería que se fuera, un nudo se formó en mi garganta. Moví mi cabeza en forma de negativa, tratando de quitar aquello que me tenía angustiado.

– Está bien...- Dije bajo sin darme cuenta de que mi ceño se frunció levemente. Una pequeña sonrisa se formó en mi rostro al sentir sus labios.

– Todo estará bien, volveré.- Abulté mis labios recibiendo aquellos besos que calentaban mi pecho. Lentamente mi cuerpo se fue relajando, algo me molestó al sentir que se separaba, traté de sonreírle y sólo vi como se iba, quise detenerlo, pero mi cuerpo no se movía.

– Jimin...- Me asombré al escuchar mi voz. No sé por qué lo hice sólo salió su nombre de mis labios sin que lo pudiera detener.

Miré su cuerpo, sonreí levemente y cuando por fin pude moverme caminé hacia él. Dirigí mis manos a su rostro acariciándolo suevamente para luego inclinarme y besar lentamente sus labios. Al separarme, le susurré.

–Te amo. - Volví a sonreírle mientras juntaba nuestros labios suavemente.

– Yo también. - Sonreí al escuchar su voz, mi rostro se sintió cálido gracias a ese beso, lentamente se fue separando de mí para luego desaparecer del departamento dejándome con un extraño malestar en mi pecho.

Negué con mi cabeza mientras trataba de sonreí sacando aquella incomodidad que me afligía. Me dirigí a la cocina terminando de limpiar, necesitaba distraer mi mente, los recuerdos aún seguían en mi cabeza.

No podía dejar de pensar en lo que me dijo Tae, mi pecho se apretaba fuertemente al recordar sus palabras. Mi propio padre lo entregó, dejó que atraparan a mi amigo, lo entregó como si no importase nada al igual que lo hizo conmigo.

Me vendió a un maldito viejo, siempre pensé que quizás podría cambiar y perdonarme, pero no, su repudio hacia mí no cambiará, debes aceptarlo Jungkook, debes aprender a vivir con el odio de una de las personas que te dio la vida. Mordí mi labio con fuerza al sentir como mis lágrimas querían escapar, inspiré profundo mientras me dirigía a la habitación.

Me recosté en la cama sacando mi cuaderno de dibujo, sonreí al ver todos aquellos bocetos, quizás en algún tiempo todos ellos fueron producto de vivencias malas y dolorosas para mí, pero ahora nada importa, no me siento solo, no me siento perdido, me siento acompañado y nuevamente amado, con las yemas de mis dedos acaricié el boceto de esos hermosos labios gruesos junto a esos pequeños ojos en ese hermosos rostro que me salvó.

– Nunca fuiste malo, no importa cómo los demás lo vean. La única verdad es que tú me salvaste...- Susurré mientras seguía mirando el retrato incompleto de Jimin.

– Debo decírtelo, mereces saber todo lo que hiciste en mí...- Saqué mi lápiz para tratar de terminarlo. Cerré mis ojos recordando cada uno de los detalles de su rostro.

Una pequeña risa salió de mis labios al recordar cuanto luché con él para poder tener un dibujo completo. Mis manos comenzaron a moverse solas dejándome envolver por aquella aura de paz, que, aunque Jimin esté lejos cada vez que pienso en él logra calmar todos mis miedos...

✝✝✝

– Mh...- Mis ojos se abrieron lentamente. Me asombré al encontrar mi block en el suelo, en mi mano sólo tenía el lápiz ¿en qué momento me quedé dormido? Aquella pregunta vino a mi cabeza.

Mi ceño se frunció al sentir como golpeaban la puerta, miré la hora y ya era tarde. Sonreí sintiendo otro golpe de seguro Jimin olvido llevar sus llaves. Me levanté sintiendo mi cuerpo temblar, hacía frío.