PLEASE SAVE ME TONIGHT

CAPÍTULO 17

– Se acabó, si tanto te molesta todo esto se acabó. No volveré a tocarte nunca más Jungkook, las cosas volverán a ser como antes, llamaré a Yoongi para que te busque un lugar lejos de todo esto. Serás libre...- Mis ojos se abrieron de golpe al recordar las palabras de Jimin junto a aquel estruendo ensordecedor que hizo al cerrar la puerta y al desaparecer.

¿Por qué me siento así? ¿Por qué duele tanto? Mi cuerpo se encontraba agitado, mi respiración era cortante, tuve que sentarme en la cama para recién poder calmarme. Cerré mis ojos guiando mis manos a mis brazos, abrazándome de una manera desesperada...

¿Cuántas veces había tenido el mismo sueño? Ya ni recordaba cuantas veces habían sido, solo recuerdo que desde día que Jimin dijo aquello, las cosas cambiaron. Jimin volvió a ser el mismo de antes, o creo que peor, ahora definitivamente se aburrió de mí...

¿Cuántas semanas habían pasado? una, tal vez dos, no lo sé, perdí la cuenta. Después de todo ningún día era distinto, ningún día marcaba la diferencia, Jimin no me hablaba, no decía nada, solo me traía algo para comer y se iba, lo único que recibía de su parte eran aquellos ojos negros, que antes pensé que eran intensos, antes llegué a perderme en la profundidad de esos ojos, pero ahora solo recibo frialdad, aquellos ojos que antes eran intensos ahora solo logran congelar mi cuerpo.

¿Por qué no estás feliz, no era esto lo que querías? Aquella pregunta me la hago todos los días, por qué no soy feliz me sigue atormentando, nunca me había dado cuenta de lo solo que estaba, nunca hasta que lo conocí a él, por qué tuviste que enseñarme aquella soledad a la que siempre le tuve miedo.

No sé qué es lo que siento, no sé porque cada vez que pienso en Jimin siento que cometí un error, lo extraño, extraño que hable conmigo, que se preocupe por mis pesadillas, que se preocupe por si comí, ahora como me desechó no le importa nada. Ni siquiera se ha dado cuenta que cada plato de comida que trae lo tiro dentro de una bolsa, la cual después de una semana es tirada, el mismo tira aquella bolsa y no se da cuenta, o si ya lo sabe no le importa, me duele pensar que la última posibilidad sea verdad.

Siento que te estoy fallando mami, te prometí que siempre sonreiría, pero ahora no puedo, lo siento. Hace dos semanas que mis sonrisas se perdieron, y no es solo por el hecho de Jimin, aquellas pesadillas que tanto me atormentan no me dejan en paz, muchas veces he querido romper en llanto, pero me he contenido. No sé cuánto tiempo pueda soportar, pero no creo que sea mucho, nunca me había importado tan poco mi vida, creo que el peor error fue que yo siguiera vivo, el peor error que cometiste mami fue el no llevarme contigo...

¿Por qué tuviste que dejarme con mi padre? ¿Por qué tuviste que abandonarme? ¿Creíste que sería feliz? ¿Creíste que estando con mi padre podría seguir siendo aquel niño inocente y feliz? ¿Creíste que podría seguir siendo tu pequeño conejito?

¡Te equivocaste! Ningún día, ninguno solo día volví a ser feliz, todos me repudiaban, nadie me quería realmente, mira lo que hizo mi padre, te das cuenta de lo que obligué a hacerme a mi propio padre, me vendió, me aposto, me entrego como si no fuese nada...

¿Esa era la felicidad que querías para mí?

– L-lo s-siento, p-perdóname mami, y-yo no quería. N-no es tu culpa, y-yo lo hice mal. - Llevé mis manos a mi cabeza, inspiré profundamente, no debo ceder, debo calmarme.

Llevé mis manos a mi cuello comenzando a acariciarlo tratando de calmarme, Jimin siempre conseguía calmarme acariciando aquel lugar, ¿por qué no es lo mismo?

Mi cuerpo se sobresaltó al sentir lo congeladas que estaban mis manos, me levanté de la cama, saqué un pijama junto con ropa interior para luego dirigirme a la ducha, di el agua caliente y mi cuerpo se relajó, ya no podía estar cálido, mi cuerpo siempre pasaba congelado, la única forma de entrar en calor era duchándome con agua muy caliente.