No hay Tiempo

El baile

El haber despertado le destrozó a Evan, incluso antes de abrir los ojos, le había dicho a su amigo que le despertara solo si algo realmente grave hubiese ocurrido, algo importante, esto quería decir que…

-Ho, no por favor, que Violeta no haya tenido otro accidente o peor que Caleb no la haya encontrado

Se dio cuenta que el dolor no era físico sino que le dolía algo por dentro al pensar en todas estas posibilidades, más que nada atroces sobre el futuro de Violeta.

Se sentó inmediatamente en el ataúd de golpe y agarró a Criss por la ropa

-Que le ha pasado a Violeta –Le dijo furioso y apenado

-La…La verdad Evan es que….

-Dímelo de una maldita vez no hay tiempo que perder –Le exigía casi a gritos-.

-No le ha pasado nada a Violeta, ella está bien, sana y salva

Una sensación de alivio recorrió su cuerpo y relajó su mano, se quedó en la nada por unos segundos simplemente contemplando un peso que se le quito de repente, incluso el dolor que sentía ya había desaparecido, hasta que cayó en la cuenta.

-CRISS!!!! –Profirió un grito-.

Criss ya había aprovechado los momentos de Evan en blanco para cruzar la habitación y dirigirse al otro cuarto donde tenía todo lo relacionado con Violeta

-Cálmate Evan, tengo una razón para despertarte

-Más te vale que esa razón valga la pena.

Evan se levantó de la cama a toda prisa y en un segundo cruzó la habitación y se dirigió al lugar de donde prevenía la voz de Criss, era un lugar un tanto apartado de la casa que antes no había sido ocupado, así que en parte le intrigaba lo que Criss pudiese estar haciendo allí, aunque lo más probable, pensaba, es que se estuviese escondiendo, algo ridículo si lo intentaba de esa forma.

-Que mierda es esto…

Entro en un cuarto oscuro donde se veía papel por todas partes y solo tenía una bombilla roja y de frente tenía a Criss que parecía estar contemplando algo.

-Ven a mi lado Evan, desde allí no podrás ver lo que yo veo

Rápidamente se puso al lado de Criss y se dio cuenta de lo que estaba viendo, eran fotos, muchas quizás cientos de ellas, y aparecía una niña, en una segunda mirada pudo apreciar que era una niña familiar para él, era Violeta SU Violeta, pero ya mucho más grande

-Que… Qué edad tiene ahora –Dijo con un hilo de voz sin despegar la mirada de las fotografías, todas eran preciosas y perfectas-.

-Hoy cumple los 10 años es preciosa Evan, simplemente maravillosa