C a p i t u l o 46:
__: Hey –te paraste en la puerta al verlo, sonreíste sin querer, el verlo era una de tus razones para sonreír
Harry: Hey –hizo esa curva en su sonrisa viéndote
Harry condujo y tu solo te limitabas a verlo, si a ver sus manos como tocaban el volante, a ver su nariz respingada, su perfil, sus imperfecciones, sus ojos brillosos en el día, sus rulos alborotados. Lo estabas viendo con detenimiento. Podría ser la última vez que lo miraras quien sabe, ¿peor para que arriesgarse? Tu sonreías inconscientemente mientras el manejaba, su rostro de atento. Un rostro tan hermoso ¿Cómo se los explico? Es que no hay manera de explicarlo, realmente no la hay, es tan perfecto que parece mentira. Su perfume inundando todo el auto. Ese perfume que movía tus sentidos. Tan suculento aroma.
Harry: ¿tengo algo en la cara? –dijo al manejar el volante con la mano derecha y con la otra tocarse el rostro
__: no, no tienes nada –sonreíste
Harry: ¿entonces? –volteo unos mini segundos
__: ¿Cómo te fue en la fiesta? –miraste aquellas esmeraldas que tiene como ojos
Harry: se cayó unos segundos para tratar un nudo que se había formado –bien… todo normal –callo de nuevo
__: ¿seguro? –lo miraste raro
Harry: que si –dijo exaltado
Tú lo miraste confundida, y guardaste silencio. Al parecer estaba molesto, lo cual te hizo sentir mal, no sé, ese tono jamás lo había usado contigo y te dio un poco de tristeza y mejor te limitaste a solo ver por la ventana. No es que “wow me voy a cortar las venas” pero te entiendo estas estúpidamente enamorada y cualquier cosa “mal o grosera” te causa un dolor realmente tonto.
Mientras Elisa:
Elisa: si, creo que lo amo mucho no se –se encogió de hombros –el amor juvenil –soltó una risa que daban ganas de vomitar
Entrevistadora que hermosos –puso cara de estúpida –y dime ¿Cuándo tiempo llevan saliendo?
Elisa: pues bueno… eh… acabamos de comenzar a salir pero hace tiempo ya nos conocíamos
Elisa: ya veo –dijo anotando unas cosas en unas hojas que traía en la mano
Mientras tú y Harry:
Habían llegado a la playa, el sol estaba que te quemaba la cabeza pero él se quito los zapatos y camino por la húmeda orilla mientras tú te quedaste ahí parada como si no existieras. Lo miraste alejarse unos metros más y soltaste un suspiro, la verdad, no sabias si seguirlo, rogarle o mejor irte a tu casa. Peor obvio como toda estúpida enamorada hiciste lo mismo que él y corriste. Cuando estabas a centímetros de él viste tu cabeza agachada y con su mano izquierda los tenis. Tomaste tus zapatillas con la derecha, soltaste un respiro, y lo tomaste de la mano entrelazando tus dedos con los de él. Tu lo tomaste con fuerza mientras que el solo volteo a verte y viste que sonrió, tu agachaste la mirada y sentiste como hizo fuerza con sus dedos y sus manos estaban juntas, entrelazadas… como si fuesen novios o algo así.
Harry: ¿tú perdonarías un error? –subió su mirada a las olas que azotaban con fuerza la orilla
__: depende de que error –volteaste a mirarlo
Harry: si alguien te fallara –te miro –pero que no fuese su decisión, simplemente las cosas pasaron sin que se dieran cuenta
__: los errores pasan porque uno quiere Harry –levantaste tu mirada viendo aquel horizonte haciendo tus ojos pequeños tras los rayos de sol –ningún error sucede porque si