Juvia no esperaba conocer a Gray en las vacaciones de verano ni enamorarse, el amigo de Natsu y de Lucy.
Gray no esperaba conocer a quien sería su mariposa azul, poniendo su mundo patas arriba. No, no lo esperaba, sólo quería conocer a esa chica que...
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Gray suspiró agotado y estresado observando la pantalla de su móvil, es la sexta vez en el día que recibe llamadas de Mary. Le ha cortado e ignorado, ni con la golpiza de Juvia le sirvió para rendirse desde hace una semana. Leyó sus mensajes, contestándole que lo dejara tranquilo, pero no entendía. Mary insistía, lo hostigaba e incluso subió el nivel enviándole fotos en ropa interior.
Esto era un grave problema. Si por accidente Juvia viera esas fotos en su teléfono, sería castrado.
Gracias al cielo Juvia confía en él.
¡Pero teniendo a Mary sumergida en su teléfono es peligroso!
Así que pensó y actuó en reunirse con Natsu y Erza. Primero pensó que con Natsu sería suficiente, sin embargo la opinión de una mujer para entender a otra mujer era valiosa si quería seguir con Juvia. Bueno, también estaba Lucy, mas no deseaba otra bofetada.
Con Erza no hay mucha diferencia. En fin...
Los tres estaban reunidos en casa de Scarlet, ésta revisaba el celular de Gray con sumo cuidado mientras las mejillas de Natsu ardían pudorosamente. Una ceja de Gray se alzó, él no reaccionó de esa manera, ni le interesa el cuerpo de Mary. Juvia era mucho mejor, y a pesar de ser muy extraño, siendo pareja no han tenido relaciones a comparación de las vacaciones de verano que ni lo eran y lo hicieron. Sí, es raro.
Volviendo al asunto donde quizás pondría su relación con Juvia en peligro, pidió la opinión de Erza. ¿Qué podía hacer?, ¿contarle a Juvia?, ¿esperar?, ¿comprar un celular nuevo?
―Contarle a Juvia sería lo peor ―dijo Erza, regresándole el teléfono mientas Natsu reclamó con ver un poco más―. Ya sabes cómo se pone ante una rival de amor que te acosa.
―Ese es el punto, me da miedo su reacción.
― ¿Y si subes sus fotos a internet? ―comentó Natsu acomodándose en el sillón de la sala de estar, compartiendo con la anfitriona― La amenazas con que si no deja de acosarte, será conocida públicamente. Entonces, comienza el bullying masivo, baby.
―Puede servir ―adquirió Erza―, pero hablamos de una chica, y yo siendo una, no es lo mejor. Además, Mary es menor de edad y a Gray le falta poco para cumplir la mayoría. ¿Quién se iría a la cárcel?
―Como siempre tus ideas son malas, ojos bizcos. ―bufó Gray. No sabía qué hacer con Mary, lo único que le falta es que vuelva a molestar a Juvia. Juvia cree ciegamente que ella dejó de acosarlo.
―No le digas nada a Juvia ―continuó cruzándose de brazos―, sé que la sinceridad es primordial en una relación, pero por el momento no le digas. Hazlo cuando lo soluciones.
― ¿Y si no lo soluciono?
― ¿Y si Juvia sospecha? ―interrumpió Natsu, bueno, debía dar suposiciones. Los dos lo miraron― Vamos chicos, sabemos que Juvia tiene un sexto sentido súper desarrollado. Ayer en clases de matemáticas salió corriendo gritando que a este idiota le sucedió algo malo. ¿Y qué fue lo que pasó ayer? ―le preguntó al indicado.
