Si el amor lo dice...

173 28 23
                                    

Hola. Les dejo otro capitulo...pero antes dos cosas. 

Primero: El de arriba es Haro, como el Lobo rojo.

Segundo. Mis disculpas a quienes leen, En el principio. Borre el capitulo que había hecho porque no me convencía y empece de cero, así que tardara otro poco,no se si es porque ya se termina y eso me pone ansiosa, o porque, pero me esta costando. 

Sin mas, un beso grande y espero este capitulo les agrade. Gracias.




-Mylo, sabes que no te pediría algo como esto si no supiera que es de suma importancia-.

Laris miró a los ojos a su capitán. Rogaba que este pudiera ver en ellos la magnitud de la amenaza que acechaba los reinos, que viera que si le pedía ser desleal a su rey, era porque no encontraba otra salida.

-¡Que me condenen las diosas!-exclamó este-Pero te creo Laris...Lo haré. Se que voy a arrepentirme ni bien crucen el portal pero...estoy dispuesto a arriesgarme por ti, como tú lo has hecho por mi tantas veces-.

Laris se acercó y mientras asentía, le apretó el hombro a su amigo en señal de agradecimiento.

Una piedra mas había sido removida en su camino. Pero aún faltaban muchas otras.La mayor se encontraba en los jardines, solía tener la costumbre de visitarlos todos los dias en una horario similar(muy temprano en la mañana).

 Nogwyn había sido maestro del rey mismo antes de serlo de su hijo. Era un hombre reservado y prudente, sabio y entendido, y con un peculiar don nacido de su Sataylay, él podía abrir entradas dimensionales, y esa, sobre sus muchas cualidades, era por la que abogaría Laris, pues el tiempo los apremiaba, en solo doce horas Ahren debería presentarse con el eremita.

-Maestro-lo saludó respetuosamente el general, sumando a su salutación una pequeña reverencia-.

El elfo inclinó levemente la cabeza. En su expresion podía verse la extrañeza que le producía haber sido abordado por Laris. General y Maestro rara vez cruzaban palabras.

-¿En que puedo serle útil ,General?-le preguntó el venerable anciano, con una calmada curiosidad-.

Laris se acercó unos pasos más. Dejó brotar un suspiro antes de darle forma a su pedido.

-Seré breve- comenzó- Necesito de su habilidad mágica...Debo corroborar cierta información que llego hasta mi confidencialmente. Es sobre cierto peligro que pondrá, si es acertada, en riesgo muchas vidas, a muchos inocentes. Pero como le dije, aún no le he confirmado, y por eso es mi petición, y mi deseo, requerir de su aptitud para llegar allí a través de una entrada,e inquirir en si hay certeza en esta advertencia. Iría solo, y agradecería mucho que la entrada fuera igualmente abierta para mi retorno,él que seria en unas veinticuatro horas-.

Nogwyn frunció el ceño. No era atípico el pedido. Anteriormente había sido solicitado su poder para fines exploratorios, y hasta bélicos,pero en cada una de ellos, era su rey, el poderoso Ishtar, quien le solicitaba tal acto.Que fuera uno de sus generales y no él directamente, le parecia sumamente extraño.

- Mi poder, como el de cada de uno de los elfos de este reino,no me pertenece, vive en mi para el servicio de mi rey y de mi pueblo,pero...-agregó mostrando cierto recelo en su mirada- No se sienta ofendido mi joven general, encuentro irregular el hecho de que sea usted quien me lo solicite...Solo inquiriré en algo...¿Esta al tanto su majestad de esta misión de reconocimiento?-.

Laris quiso tragar saliva como un gesto ansioso de auto reflejo,pero no se lo permitió a si mismo. Una negativa no era una opción en ese momento, debería mostrarse tranquilo.

Tú Donde viven las historias. Descúbrelo ahora