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POV ÁNGELES

Luego de prestarle una camisa negra  a Taylor y esperar a Maite, bajamos al estacionamiento a buscar el coche, porque no podíamos usar la moto, mientras bajábamos le escribí un mensaje a André para que vigilara a Maite y pasándole la dirección de la chica, las puertas del ascensor se abrieron.

Noté que Taylor estaba un poco emocionada, sus ojos estaban un poco achicados, supongo que ese era un pequeño gesto que hacia cuando estaba a punto de sonreír, sabía que estaba haciendo mal al llevarla, porque podía pasar cualquier cosa, aunque ella, si hubiese sido otra se hubiese negado y me hubiese pedido que la llevara a casa.

Puf. Utilicé mucho la palabra hubiese.

Camine hasta el audi negro. Taylor subió de copiloto mientras mi hermana iba algo emocionada en la parte trasera, irían narcos y aunque estaba arriesgando a Taylor, desde que acabase de correr la enviaría a casa, por eso enviaba a Maite donde sus amigas y André junto con sus 2 amigos vigilaban la casa a donde ella iría.

Cuando llegué a la casa de la amiga de Maite, en donde habría una pijamada-que Maite me había comentado, pero se lo había negado-la acompañé hasta la puerta, observé todos los lados y me fijé en que André había llegado, y vi una camioneta negra a unos metros, pero eran sus amigos Carlo y Luis.

-Recuerda, no importa la hora, si escuchas ruidos raros llámame, aunque sea una falsa alarma Maite.-miré sus ojos café, iguales a los de nuestra madre.- Sin importar qué.

-Vale, por favor cuídate y cuida a Taylor.-Asentí y me di la vuelta.

No me fui hasta que la vi entrar a la casa, cuando pase junto a la camioneta, vi otra detrás a unos metros y por la cámara que tenía mi coche detrás, vi la matrícula, y definitivamente no eran ningunos de mis guardaespaldas. Golpeé fuertemente el volante provocando que la castaña saltara en su asiento.

Diablos no, no puede ser verdad lo que habían dicho en ese mensaje.

-Oye...estás b-bien?.-Mierda la había olvidado completamente.

-Sí.-contesté dura.

-No parece.-Ya entendí. Escuché un suspiro de su parte.- Tus nudillos están blancos de apretar el volante y estás aumentando la velocidad..-al fin ,ya no tartamudea.

"¿Qué esperas idiota? Pones a la niña re nerviosa, cálmate"

Tomé mi móvil y lo lancé al regazo de Taylor quien me observó curiosa.

-Entra a mis contactos y busca el número de Maite.-Asintió y encendió el móvil.-La contraseña es Diamond, pero esta en español. Es casi igual so...-Y antes de acabar me interrumpió el sonido del móvil sonando.

La miré por un breve momento, ella se encogió de hombros y dijo: Soy latina, aún me impresiona que no me hayas preguntado de dónde venía mi acento. Todos los que me han escuchado hablar lo primero que hacen es preguntarme.

Alcé las cejas sorprendida, lo había notado, pero no había pensado en preguntar. Antes de contestar la voz de Maite se escuchó en todo el coche.

-Holaaaaaaaa.-contestó, se escuchaban unos sollozos.-estamos viendo Titanic.-Eso explica.

-Mira por la ventana y dime qué ves.-Directa.

-Umm, hay dos camionetas, de una al parecer hay tres chicos y en la otra hay dos, hay un chico en la casa de en frente que mira hacia acá. Qué gracioso porque se parece bastante a él...,¡es él! Es André. Ese loco es un idiota, no sabe esconderse- Suspiré, la escuché reír.- Y nada más, ¿Por qué?.

NO. (Lesbian)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora