Helinav Vasíliev es una de las muchas más adolescentes desaparecidas.Pero su caso es algo peculiar...
Todas las adolescentes hemos pasado ese momento de desear huir de nuestras casas, de nuestras familias...
Ella lo hizo pero acabó en el lugar meno...
[Renunciar a cosas para obtener otras, asi va la vida]
Me sentía aturdida y los párpados me pesaban.
Estaba en una especie de habitación con las paredes dd piedra y una puerta de metal con adornos de plata.
No había ninguna ventana.
Estaba acostada sobre un camastro bastante incómodo.
Me intenté levantar pero un grillete atado a mi muñeca apenas me dejaba dar un paso fuera del camastro.
Intenté romperlo pero este, estaba hecho a conciencia para que fuera indestructible, incluso para un vampiro.
La puerta se abrió y entró Justak con dos vampiros guardaespaladas.
-Vaya, la neófita ya se ha despertado-Sonrió Justak de lado-.
-¿Que hago aquí?¿Dónde estoy?- pregunté aun sentada en el camastro y llevándome una mano a la cabeza intentando aclarar mis ideas-.
-Como hagas alguna tontería me convertiré en tu peor pesadilla- sonerió de un lado- anoser - me cogió de la barbilla y me obligó a mirarle a los ojos-.
-Anoser ¿Qué?- pregunté con la voz dura y fría-.
-A no ser que seas mi compañera y que hagas lo que te diga, mientras tanto, tú serás una simple prisionera- se puso serio- Si te portal mal me encargaré personal mente de tus catigos- Susurró en mi oído produciendome un escalofrío-.
-¿Que te haga caso?¿En qué?- pregunté-.
-Salid- ordenó el vampiro a sus guardaespaldas-.
Se sentó a mi lado y comenzó a acariciarme el pelo con perversividad evidente...
-Ser tu amo- me dió repulsión su nivel de machismo provocandome una arcada bien disimulada- Cuidaré de tí, no te volverán a traicionar- rió- Helinav, en este aquelarre decimos la verdad a la cara aunque no guste, se que te sientes traicionada y yo puedo darte lo que nunca has tenido en el aquelarre Vorisov-.
-¿Que es lo que nuna he tenido con los Vorisov?- dije retándole-.
Sonrió aún mas con aire de superioridad e insuficiencia.
-Una familia, la verdad,la felicidad y ante todo, el amor- contestó-.
Se levantó y me quitó el grillete.
-No hagas tonterías, ya te he avisado...-.
Asentí.
-Mañana vendré y me diras si prefieres vivir eternamente en un calabozo o con migo- sentenció Justak-.
Se levantó y se dirigió hacia la puerta de la mazmorra dandome la espalda.
-Justak- le llamé- ¿Por qué todo el mundo dicer que eres malo?-.
Se rió.
-Helinav, cada uno tiene los motivos para actuar como actuan guiándole para tomar ciertas decisiones, todo el mundo tiene secretos oscurisimos como la nocha misma, desde Mishko Vorisov hasta tú misma- dió una pequeña pausa aún de espaldas a mí- no te diré que soy malvado pero tampoco qie soy bueno, eso lo has de descubrir tu-.
Se giró para hablar mirandome a los ojos.
- Es muy delgada la línea que diferencia al villano del héroe- sonrió - pero casi siemore se quiebra- salió cerrando la puerta con llave-.
Me sentía agobiada y triste, conocí a Justak por mi paso por Italia, en su momento fuimos buenos amigos...
Recordé la carta de Ruslam y la saqué del bolsillo de mis jeans.
La leí y la releí una y otra vez mientras rios rojos surcaban como relámpagos de mis ojos para desatar su furia en mi alma mientras colapsaban cada poro de mis mejillas.
Guardé la carta en el bolsillo de mi Jean y me sumí en un profundi sueño.
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Me despertó el ruido de la puerta de mi mazmorra abrirse.
Entró un vampiro con una bandeja que llevava un baso rebosante de sangre y un bocata pues era neófita y la sangre solo como alimento no podia tomar, tenía que complementarlo con comida humana.
-Hola-dijo el vampiro dejando la bandeja en la orilla del camastro- Soy Shurik-.
-Helinav- me presenté- no tengo hambre, gracias- dije casi entre dientes-.
-¿Puedo?-preguntó el vampiro señalando el camastro-.
-Sólo si lugo no te molesta oler a moho-.
Sonrió y se sentó a mi lado mantenienendo la distancia.
-Se lo de la propuesta que te ha hecho Justak-dijo Shurik muy serio - Seguro que te es eificil escojer pero no te arrepientas después de tu eleccion, es lo peor que puedes hacer-.
-No se que escojer- sus grises ojos me inspiraban una confianza casi mágica-.
Se levantó del camastro dándome la espalda y se quitó la camiseta.
Su trabajada espalda tenía el paso de muchas cicatrces que en armonia hacían una X en su espalda alta.
Me levanté y con cuidado lleve las yemas de mis dedos por sus cicatrices.
Se estremeció a mi tacto y volví al camastro mientras él se ponía la camiseta.
-Alomejor estas mejor aquí que con el, esto no es nada cuando Justak desata su furia-sentenció Shurik-.
-El castigo minimo son 30 latigazos- continuó hablando- Si infrinjes alguna norma nadie te librara de tu castigo-.
-Adios-Sentenció el vampiro guiñandome el ojo de forma amistosa-.
Le hice un gesto con la mano y cerro la puertacal salir.
Apenas comí un poco del bocata y de la sangre.
Tenía un nudo en la garganta enorme.
Horas después alguien abrió la puerta.
-Bueno Helinav, que has decidido- sentenció Justak.
Siento no haber podido subir ayer el kapitel pero tenía que estudiar para un examen.😴
