Mi Belieber Favorita Terminada

Capítulo 30

Los días pasaban y yo me sentía cada vez más enferma. Era como si una parte de mí me faltara.

En varias ocasiones el Señor Bieber me había llamado, pero yo no le contestaba. Dos veces había venido a mitad de noche, borracho, pero yo no lo había atendido.

Lily se daba cuenta de mi estado de ánimo pero no pronunciaba palabra sobre eso.

Yo no entendía qué pasaba conmigo, si hasta ahora llevaba una vida normal. Llevaba dos semanas y media trabajando con Travis e iba todo a la perfección. Slade se había notado muy triste al saber que no había posibilidad para que yo volviera a la empresa así que desde entonces nos veíamos más seguido. A veces íbamos a almorzar, o a cenar o simplemente hacíamos noches de películas en mi casa. Él y mi trabajo eran lo único que me mantenía ocupada y mi cabeza dejaba de pensar en tonterías.

Mi vida se había vuelto monótona, aunque Slade trataba de que fuera todo lo contrario, yo me sentía así.

Lily vendría esta noche después de la cena que tenía con sus padres a pasar un rato conmigo. Esperaba que no tocara el tema y siguiera todo normal.

—¿Y cómo te fue?—le pregunté cuando nos encontrábamos ya en la sala.

—Fue bien.. un poco aburrida, ya sabes, las preguntas incómodas, pero nada fuera de lo común. Ah, lo olvidaba. Ellos quieren verte, te echan de menos.—Dijo con una sonrisa en su cara.

—Entonces algún día no muy lejano iremos las dos.—Le respondí.

—Eso suena bien. Mamá está obsesionada con hacer cupcakes. ¡Hizo uno con mi cara! Estoy segura de que si vas te engordará en menos de tres horas y no te dejará ir sin antes darte una caja llena de ellos.—Dijo riéndose. Estaba segura de que ella ya había vivido algo parecido.

—Por mí no hay problema. Yo amo los cupcakes.—Dije. La madre de Lily había sido como mi madre también. Con Lily habíamos sido amigas desde muy pequeñas, así que me vio crecer y madurar con padres ausentes lo que hizo que ella estuviera ahí para mí siempre.

—Umh, ____. Hay algo que quería hablar contigo.—Por favor, por favor que no fuera lo que estaba pensando.

—Lárgalo.

—Estás.. extraña últimamente. No conmigo, si no tu, no eres tu misma. Te he preguntado reiteradas veces si te encuentras bien, pero dudo que tus respuestas sean las más sinceras. Yo te quiero y lo sabes, y me preocupo por ti. Pero creo que hay algo que no me has dicho..

—No pasa nada, Lily.

—Creo que lo que pasa tiene que ver con el Señor Bieber. No estás bien desde que lo dejaste de ver.

—¿Por qué tendría que estar mal por eso?—Era insólito para mi.

—Yo no lo sé, dímelo tú.

—Lily, no pasa nada. Déjalo ya.

—Si tratas de esquivarlo siempre será peor. Sabes que puedes confiar en mí, soy tu mejor amiga, soy como tu hermana, pero no quieres confiarme tus cosas.—Sus palabras de verdad me estaban doliendo. No había sido mi intención que Lily sintiera que no confiaba en ella, pero la verdad era que ni yo sabía lo que estaba pasándome.

—Bien.. es que la verdad no sé qué pasa. Por eso no te he contado, porque no sé qué está pasando.

—Oh.—Dijo Lily acercándose y tomando mi mano. —Creo saber que pasa. Sé de todo el alboroto que es tu vida. Es evidente que él te está buscando y también es evidente cómo lo ignoras. Creo que lo que pasa es que a ti te gusta.