Mi Belieber Favorita Terminada

Capítulo 35

Volvimos al hotel ya que estábamos un poco cansados. Eran alrededor de las cinco y media de la tarde.

—Eh.. ____.—Justin llamó mi atención.

—¿Sí?

—¿Quieres ir a cenar esta noche conmigo?—preguntó tímido.

—¡Claro!—Salté sobre él mientras me rodeó con los brazos. Noté como soltaba un gran suspiro.

—Gracias.. Ahora, vamos al dormitorio, teng--

—Me gustaría hablar sobre eso.—Le interrumpí y al escuchar mis palabras me miró confundido.

—Claro..

—Bueno.. quisiera saber cuál va a ser mi habitación.

—Pues.. la del cubre negro, junto conmigo.—dijo extrañado.

—Amh, sí.. es que yo preferiría dormir en habitaciones separadas.—aclaré.

—Oh.—Fue lo único que salió de su boca y pensé que la había cagado. —No te preocupes, lo entiendo.—Dijo levantándome el rostro desde mi barbilla.

Tomó de mi mano y me condujo a su habitación. Encima había una caja blanca grande con una cinta negra y una pequeña caja negra con una cinta blanca.

—Son para ti. Ábrelos.—Dijo con una sonrisa. —La grande primero..—Me incitó.

Tomé la gran caja blanca y le quité su cinta. Abrí de a poco la tapa y la dejé a un lado. Adentro había papel blanco y encima, justo en el centro se encontraba un hermoso vestido azul marino.

Miré al Señor Bieber y lo abracé eufóricamente. No tenía por qué molestarse.

—Pero sácalo. Ni siquiera lo has visto.

Lo hice como él dijo y vi que el vestido era el doble de hermoso de lo que se veía.

Era hasta un poco más arriba de la rodilla. En la parte de adelante era muy simple a excepción de un pequeño cierre dorado que venía desde el hombro, cruzaba por la parte superior del busto y terminaba al otro extremo, casi llegando a la cadera. Era un detalle realmente hermoso.

El Señor Bieber me tomó las manos y giró el vestido. Entendí rápidamente su punto.

Por la parte de atrás, el vestido tenía exactamente el mismo cierre dorado, pero con la diferencia de que éste estaba abierto, dejando al descubierto un poco de espalda.

El vestido era realmente perfecto completo. Era asombroso..

De pronto sentí una tos falsa y tuve que dejar de admirar el vestido, para prestar mi atención al Señor Bieber quien me entregaba la otra caja, la más pequeña.

Le sonreí y la tomé. Hice el mismo procedimiento para abrirla que la anterior.

La pequeña caja traía unos hermosos pendientes. Era una perla pequeña, entre color blanco y dorado más un collar sencillo y delicado, que traía la misma perla, pero un poco más grande. Ésta tenía un mensaje adentro y decía 'pronto' No entendí muy bien eso, pero lo dejé pasar.

Extraje la última cosa de la caja y ésta era una pequeña pulsera del mismo color que las perlas con distintos diseños. Logré reconocer uno, el cuál era un pequeño búho. Estaba segura de que lo había visto antes.. y recordé que el Señor Bieber lo tenía tatuado en su brazo. Sólo había visto una vez sus tatuajes y fue cuando entré por accidente al baño pero yo ya sabía qué tatuajes traía en su cuerpo, ya que yo era.. su fan, antes.

Me giré para agradecerle, pero él ya no se encontraba allí.

**

—¿Estás lista?—Tocó la puerta del dormitorio y yo al abrirla asentí con la cabeza.