Mi Belieber Favorita Terminada

Capítulo 50

Luego del trabajo, llegue a casa y ya estaba Aidan comiendo yogurth con cereal.

—Hola pequeño—le dije.

—Hola señorita ____—dijo aún tímido.

—Sólo ____—dije acercándome a él y haciéndole leves cariños en la cabeza.

Tenía un pelo muy suave, cabe decirlo.

—¿Hace mucho estás solo?—cuestioné.

—No.. Ryan se acaba de ir..—dijo bajito. Yo sólo asentí.

—¿Qué tal tu día?—pregunté.

—Umh.. bien, gracias—Él a penas cedía.

—Bien, ¿tienes tarea?

—Ya la hice..

—Oh. Que bueno, ¿Quieres hacer algo especial esta tarde?

—No. Tu debes venir cansada..

—Oh, nada de eso.—Dije sonriendo. —¿Qué te gusta? Me refiero a.. el arte, la música, la agricultura, la arqueología..—Dije sentándome en un sillón al frente de él.

—Yo.. umh..

—Puedes elegir más de una.. digo, es sólo decirme—lo alenté.

—La arqueología.. música y me gusta leer—dijo bajito.

—¿Qué? No te escuché—obviamente era mentira, pero lo estaba haciendo para que cediera un poco. Él se rio y yo lo hice junto con él. —Ve por tu chaqueta.. iremos a LaBrea Tar Pits.

—¿En serio?—sus pequeños ojitos azules brillaron de una manera impresionante.

Me gustaba hacerlo feliz..

Asentí con mi cabeza y él corrió por la casa en busca de su chaqueta.

Yo mientras preparé el auto y en menos de cinco minutos él ya estaba sentado conmigo camino al más grande lugar de descubrimiento de fósiles de la edad de hielo en el mundo.

Gracias a Dios era Martes..

Nos demoramos diez minutos en llegar.

Aidan era un niño muy tierno.

Bajamos luego de estacionarme y vi como Aidan buscaba algo en el asiento trasero.

—¿Qué buscas Aidan?—pregunté sosteniendo la puerta.

Él salió apresuradamente con un montón de cosas en las manos.

—Una cámara—me la mostró y se la colgó al cuello. —Y pilas.

Asentí y nos pusimos a caminar hacia el gran edificio.

Al entrar, nos asignaron un guía junto a un grupo de personas.

La verdad es que estábamos muy aburridos con él, así que sugerí a Aidan que fuéramos por nuestra propia cuenta lo cual aceptó encantado.

Vimos fósiles de todo tipo de animales, pero el que más me sorprendió fueron los fósiles de partes de dinosaurios.

Estos los encontramos al final de nuestro recorrido, ya cansados.

Estaban al final del edificio. Al llegar, yo me había reído porque había un cartel que decía "¡Felicidades! Si has llegado hasta aquí eres muy amante de la arqueología o tienes la energía de una persona de menos de veinticinco años."

Empezamos viendo unas supuestas piedras donde habían pisado los dinosaurios, luego un diente de estos y por último una gran cola de dinosaurio.

No había más.