Polvo De Azúcar [Daisuga]

Cap18

- Bienvenidos a vuestro nuevo hogar~

El hombre los dejó encerrados en aquel cuarto, con tan solo unas cuantas velas y unas pequeñas mantas.
En cuanto el hombre cerró la puerta Suga corrió hacia Tsukishima para socorrerlo y tratar de despertarlo con mucho cuidado.

- Hey... Kei, despierta pequeño... Estoy contigo -acarició cariñosamente la cabeza del rubio y la colocó en su hombro- despierta por favor.... -inmediatamente se sacó la chaqueta y tapó al chico que seguía inconsciente.

Daichi se dirigió hacia el pequeño Yamaguchi quien seguía tumbado en la única cama de la estancia. Lo agarró para cubrirlo con la manta y consiguió que el pequeño reaccionase.

- Q-quien... -tenía los ojos semicerrados y los labios muy agrietados- D-daichi-senpai.... -unos sollozos salieron de la boca del chico, quien intentó agarrarse al cuello del moreno. Desgraciadamente no fue capaz y antes de caer, el capitán lo sujetó para estrecharlo contra su pecho.

- Tranquilo pequeño... Ya estoy contigo... -le dedicó una tierna sonrisa y mientras le acariciaba trataba de tranquilizarlo- descansa... Necesitas ahorrar fuerzas para cuando nos vayamos hehe... -le besó la frente provocando en el chico una inmensa tranquilidad.

- Daichi, me ayudas a coger a Tsukki por favor?

- Si, ahora voy -dejó a Tadashi recostado en la cama.
Se agachó para coger a Tsukishima y llevarlo a la cama.

- Tenemos que sacarlos de aquí.... No puedo seguir viéndolos de esta manera... -se arrodilló frente a la cara del pequeño Tadashi, quien esbozaba una pequeña sonrisa- mis pequeños...

El albino empezó a llorar y Daichi se acercó para consolarlo- hey, te dije que los íbamos a sacar y eso es lo que haremos, a la mínima oportunidad volveremos a casa, así que tranquilo -besó tiernamente a su novio y le secó las lágrimas.

Poco a poco el cansancio pudo con ellos y se quedaron dormidos en el suelo.

Tsukishima se despertó en mitad de la noche y miró a su alrededor aturdido. A causa del golpe había perdido sus gafas y la falta de luz no ayudaba al chico a situarse. Decidió levantarse e ir donde estaban las velas pero piso sin querer, una de las piernas de Suga. El armador se despertó sobresaltado por el contacto pero al ver al pobre chico tan desorientado se levanto y le tomó la mano.

- Kei, estas bien? A donde ibas?

- S-sugawara...-senpai -el chico sonrió para después empezar a sollozar- menos mal que vinieron, Yamaguchi está muy mal, lleva mucho tiempo sin comer y hace un día que no bebe..... Por favor.... Sáquelo de aquí...

- Hey, pequeño, vamos a sacaros de aquí lo antes posible -hizo que el rubio se sentase a los pies de Tadashi- vamos a salir todos juntos, ya lo verás -besó tiernamente la frente de su cuervito y lo acostó de nuevo- duermete, ahorra fuerzas para que tengamos que huir -lo arropó y esperó con él hasta que se durmiera.

Luego de eso el se quedó dormido agarrando la mano del de lentes

A la mañana siguiente...

El ruido de unas pisadas acercándose puso en alerta a Daichi haciendo que se despertara. Movió con suavidad al armador y este le miró muy adormilado.

- Suga, creo que ya viene -le susurró al oído

- Huh? Quien vie- -en ese momento lo recordó todo y su cuerpo se tensó- no vamos a dejar que los toque

Los dos chicos se levantaron y en ese instante la puerta se abrió dejando que la luz poderosa del sol los cegara.

- Vaya~ los mayores tenéis hambre ya eh? JAJAJA! Bueno, quien va a desayunar primero?