Reencuentro con el pasado II

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Presente

1 Septiembre, 2016

-¡¡Escondidoos, solos por amoorr, la oscura habitaciónnn, tu cuerpo el mío, el tiempo de un relooj!!! ¡¡Escondidoss, solos tu y yoo!!!
-¡¡BASTA YA!! -Grité saliendo del baño. Gis y Busta habían coincidido en Madrid y a primera hora de la mañana se habían puesto de acuerdo en venir a molestar a casa. Normalmente es un gustazo volver a ver a alguno de mis amigos y sobre todo a mis hermanos de OT, pero que llevaran desde las 8 de la mañana cantándome «Escondidos» pues no ayudaba mucho la verdad.
-¿Qué pasa Laurita? Solo estamos calentando la voz para cuando llegue el reencuentro. ¿No te parece Gis?
-¡Claro! -Dijeron mirándose mientras se sonreían y se seguían la broma uno al otro.
-Bueno ya ¿no?. Ustedes también estuvieron juntos en la academia y ¿acaso os canto yo todo el día el «vivo por ella»? -Pregunté harta.
-Vaya vaya como se nota que aún no te has tomado tu café de la mañana ¿ehh?. Anda Gis bonita ¿Por qué no bajas a por tres cafecitos bien cargados preciosa? -La engatuzó poniendo voz y mirada seductora.
-No me mires así que ese truquito me lo conozco Bustamante jajaja. Que sepas que si bajo es para no seguir soportando el mal humor de Laura.
-¿Sigo aquí sabéis? -Dije con sarcasmo.
Ambos rieron. Busta le las llaves de mi departamento a gis que las cogió al vuelo y bajó dando un sonoro golpe al cerrar la puerta.
-¿Que le parecerá a Paula que intentes ligar tan descaradamente con Gisela? -Pregunté, tratando de evitar lo inevitable.
-En primer lugar sabes que Gis es como mi hermana y en segundo lugar deja de evitarme.
-¿Evitarte el que? -La verdad no me apetecía nada tener esta conversación.
-Laura...
-Está bien -Cedí al fin ante su insistencia. Si algo aprendí viviendo con David Bustamante es que cuando algo se le mete entre ceja y ceja lo consigue, y la verdad en eso eramos muy parecidos.
-¿Y bien?
-David no hay de que preocuparse, de verdad.
-Laura no me mientas que ya son muchos años. Fui yo el que durante meses estuvo subiendo a tu casa a escondidas de la prensa para consolarte cuando ustedes terminaron, fui yo el que tuvo que hablar con nuestras respectivas discográficas para que consiguieran que nuestras giras coincidieran por miedo a dejarte sola de lo mal que estabas y fui yo también el que tuvo que ver como su hermana sufría día a día por alguien que ya estaba con otra persona. Y lo peor de todo no es eso, lo peor de todo es ver que después de tanto tiempo, de tantos años más bien, aún sigues sin superar ese dolor.
Para cuando Busta terminó yo ya estaba sentada en el sofá a su lado y mirándole con comprensión, y es que Bustamante tenía razón en todo lo que dijo. Después de la gran pelea que terminó con la relación Bisbal~Chenoa, lo primero que hice fue llamar a Busta. El estaba conmigo al momento de ver aquella entrevista por la que mi mundo se desmoronó, la entrevista en la que David anunciaba oficialmente el fin de nuestra relación. Me vio derrumbarme entonces y siguió viéndome debilitada cada vez que alguien lo nombraba o salia por televisión. Busta siempre estuvo conmigo sin que nadie se enterara pues si la prensa se enteraba no me iban a dejar de perseguir en la vida. Nunca se separó de mí, incluso cuando me pegaba hasta las 4 de la mañana llorando sola en mi habitación él llegaba y se acostaba a mi lado en la cama abrazándome hasta que me quedaba dormida abrazada a él, y es que cuando yo digo ante las cámaras que Busta y yo somos como hermanos es por algo.
-A ver Busta te voy a decir una cosa y quiero que me escuches atentamente. Vale que lo pasé fatal con lo de David y vale también que cuando lo veo aún me pongo nerviosa -Busta me miró de medio lado -Está bien, me pongo MUY nerviosa, pero eso está ya más que superado ¿me oyes?, porque que yo no quiero volver a verme igual de mal que estuve hace 11 años, y lo que es más importante, no quiero volver a verte a ti igual de mal que te ponías cada vez que te llamaba a las 3 de la mañana llorando y te pedía por favor que vinieras a casa.
-Y sabes que yo iba porque para mí eres mi hermana.
-Lo sé, y por eso sé que lo pasastes mal por mí porque yo hubiese hecho lo mismo en tu lugar. Así que por mí y por todas aquellas personas que sufrieron al verme tan mal no quiero volver a eso. Me tomaré el reencuentro con la mayor naturalidad posible y luego todo volverá a su lugar y de seguro no nos volveremos a cruzar más entre nosotros.
-Bueno... -Dijo al fin, aunque no muy convencido -Yo no tengo ningún problema con Bisbal, de hecho para mí es como otro hermano, pero si en algún momento te sientes incomoda y te quieres ir solo tienes que avisarme y yo me iré contigo para no levantar sospechas. -Sonreí a esto último que dijo.
-No te preocupes de verdad, en lo único en que hay que pensar en ese reencuentro es en pasárnoslo como nunca y aprovechar que por una vez vamos a estar los 16 al completo ¿vale?
-¡¡Claro que sí coño!!¡¡Que al fin volveremos a estar los 16 juntos!! -Gritó emocionado mientras hacía un pequeño y extraño bailecito que se acababa de inventar haciéndome reír a carcajadas, parecía un niño pequeño la noche antes de reyes.
-Oye Busta -Le dije mientras me recuperaba de mi ataque de risa anterior. -¿Porqué no vas a buscar a Gis que ya se está tardando demasiado? A esta hora no suele haber mucha gente en la cafetería así que no te preocupes porque te reconozcan.
-Claro, voy por ella antes de que intente subir ella sola con los tres cafés y se los tire encima la muy torpe. ¡Oye Laurita!
-Dime
-Te quiero mucho hermanita no lo olvides nunca ¿vale?
-Yo si que te quiero cántabro mío.
Y comenzamos a reír mientras Busta desaparecía por la puerta y con el mi risa también se esfumó pues sabía que aunque todo lo que le había dicho a Busta era, en parte, cierto, también sabía que por muchas ganas que tuviera de ese reencuentro no podría actuar normal teniéndolo a él al lado, y es que nada era igual cuando lo tenía a él junto a mí, y ese era el problema. Busta tenía razón, aún no había superado el dolor por mucho que intentara aparentar lo contrario. Si era cierto que ya no lloraba por las noches recordándolo, que ahora ya podía verlo por la tele sin necesidad de apagarla y que me había acostumbrado a que le sacaran novias hasta de debajo de las piedras, pero de ahí a olvidarlo había un camino muy largo, un camino que en 11 años aún no había terminado de cruzar. Pero en estos meses de reencuentro muchas cosas que me habían perseguido durante años iban a ser resueltas y al fin yo podría comenzar a vivir liberada de él, liberada del amor que aún sentía por David Bisbal...

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Buenoo ya se que me he tardado bastante en subir capítulos pero como ya sabéis he estado muy liada. Esta capítulo es un poquillo largo pero sentía que tenía que recompensaros de alguna manera y la verdad es que al escribirlo con poquillo tiempo no he quedado muy satisfecha con el resultado, espero que no se me aburrais demasiado pero es que antes de que venga lo bueno tengo que desarrollar un poco la historia para que se haga algo más interesante😜😜. Muchas graciass a los que siguen esta historia y me comentan y votan para que siga adelante💖💕 ¿Os está gustando la historia?💘💘

CrumblingDonde viven las historias. Descúbrelo ahora