Dulce o Pesadilla

El final (parte 1/4)

... 

Sus pasos eran torpes, pero de alguna manera se demostraba segura de sí. Está casi en frente y repentinamente se detiene, comienza a reír pero a cada carcajada le acompañaban lágrimas que desbordaban sus ojos. - Estás más loca de lo que creí - Le menciono con un tono de frialdad que le hace dejar de reír casi al instante. Mantiene su sonrisa pero queda cabizbaja y sin emitir algún tipo de sonido, solo veo como el viento desordena su cabello y seca esas lágrimas que no comprendo el porque se han manifestado. Repentinamente se sienta en el suelo sujetando sus piernas y sollozaba una vez más mientras sonreía. 

(Si gustan pueden escuchar lo del link adjunto... si gustan, si no lo dejan pasar y ya -3-)

Me intriga el saber que le ocurre, o más que intriga misma es preocupación, pero no puedo dejarle ver esto, no seré yo el primero que muestre debilidad de alguna manera. 

- Todo lo bueno se termina pronto.. - Repetía entre su llanto algo silencioso, y en tan solo cuestión de segundos y sin habérmelo esperado, se abalanza contra mi dando un corte profundo en mi costado, ella queda a mis espaldas, y aunque instintivamente me giré clavandole el cuchillo en su brazo, pareció no importarle, más bien pareció agradarle. Comienza a ensanchar su sonrisa y su mirada se veía perdida, toma mi mano, que aún sujetaba el cuchillo de su brazo, y lo comienza a retirar sin hacer ni el más mínimo gesto de dolor. 

Tn:- Que ocurre Jeff... no te atreves a pelear si ves que el "cuchillito" no da dolor a la victima? - *Menciona en voz baja, temblorosa, como si retuviese unas inmensas ganas de llorar.*

Jeff:- No seas ridícula, 'mocosa'... solo... no quiero lastimarte... *menciona sonriendo y evade la mirada.

Tn:- No me jodas sintiendo lástima *molesta* No la necesito... y ya te lo eh dicho, eres peor que una chica, no sabes como dar dolor, eres un mediocre asesino... TÚ das lastima!... 

Acompañando a sus palabras, que no cesaban, comienza a reír nuevamente en histeria, eran risas que demostraban una inmensa desesperación que tenía consigo misma, o al menos eso me daba a comprender. Un corte tras otro deja en mi cuerpo, y pese a que evadía muchos de ellos, otros simplemente no podía, e inconscientemente los devolvía. No quería lastimarle pero el dolor me hace perder por minutos mi "auto-control" y cansándome de este 'jueguito' le tomo su brazo, torciendole un poco brusco, lo suficiente para dejarla en el suelo y decirle que se detenga, que esto definitivamente no terminará bien. Ella solo gritaba y se movía fuertemente para que le soltase. 

Jeff:- *Torciendo cada vez más fuerte* Ya... deja... de... moverte... ¡¡Maldición!! *Se levanta y con su pie le gira* *se toma la cabeza con molestia mientras le mira* No quiero hacer esto... Deja de jugar... 

Tn:- *Riendo en el suelo* Que ocurre Jeff... *respiración agitada* ¿¡Eres un asesino y aun así no te atreves a matarme!?... Ja-Já! *le lanza el cuchillo* ¡¡Vamos tómalo... Coge el puto cuchillo!! *Risas de burla*

Me molestó, no sé exactamente que, pero me molestó... Tal vez fueron sus risas, sus palabras, su provocación, o era el hecho de que no podía dañarle... Mis sentimientos estaban confundidos, unos me dictaban que la matara ya sin vacilar, me libraría de una gran molestia, la molestia de haber conocido un maldito sentimiento que jamás debí conocer, pero otros me retenían, no quería matarla, solo... no quería hacerlo... al menos no así... yo no podía... - Si no lo haces... el que morirá será otro...~ Menciona con gracia pero a la vez débil, sin embargo me hizo reaccionar mal, y la pérdida de control ya no era solo de ella. 

Jeff:- ¿Y como lo harás? *Le pisa la mano quebrada hasta hacerle gritar* ¿Me vas a matar con tus gritos? *le continúa pisoteando* ¿O con tus encantadoras palabras de provocación? *Le deja y se acerca* me encantaría ver que es lo que tienes... *toma el cuchillo del suelo* Porque no recordamos viejos tiempos (tn)... aún puedo dañarte sin que mueras ¿verdad querida? *sarcasmo* 

Me acerco dejando el cuchillo amenazante en su cuello, pero ella toma uno que ocultaba en mi sudadera y hace lo mismo mientras sonríe. - Aun me queda una mano... Idiota... - Dice con voz dulce, y con la que definitivamente me recordó a los inicios de todo...