Cairnholm, Gales
Bucle de Miss Peregrine: 3 de septiembre de 1943Olive picó las verduras. Los guantes eran un poco imprácticos al momento de cortar. Tuvo que reacomodar varias veces las verduras para no cortar la tela de los guantes. Llevaba un año viviendo en la casa de Miss Peregrine. Todo era mejor que cuando estaba en el circo. Se divertía más. Era libre. Los demás niños no la veían como un monstruo. Se hizo amiga de Enoch... bueno, o eso al menos pensaba de él. A veces le ayudaba con sus creaciones dándole las herramientas. Otras, le preparaba té. Ella era la que le hacía conversación mientras trabajaba, parecía ponerle atención. Olive era una especie de asistente para Enoch, aunque a Olive no le importaba; quería pagarle lo que hizo por ella en el circo.
-¿Ya están las verduras Olive?-Preguntó Miss Peregrine desde la puerta de la cocina. Olive cortó lo que le faltaba de la zanahoria. Terminó y dejó el cuchillo a un lado.
-Ya.-Respondió Olive. Miss Peregrine le sonrió.
-¿Ha visto a míster O’Connor?-Preguntó. Olive negó con la cabeza. Ese día, no lo había visto desde la comida. Estuvo muy ocupada con sus tareas tanto que no pudo ir a verlo a su habitación para ayudarlo.
-No. He estado tan ocupada que no pude ir a verlo.
-¿Podría ir a buscarlo? Necesito que vaya por correo a la oficina postal en Gales.-Olive asintió y salió de la cocina. Enoch a veces podía ser raro. Tenía un carácter que a simple vista te hacía preguntarte ¿donde quedaron sus modales? Era malhumorado, sarcástico y ególatra. Olive no lo veía así. Lo veía como un chico noble que veía a las personas desde un punto de vista distinto. En el pasillo, vio a Claire salir de la habitación de Enoch llorando. Olive frunció el ceño. Enoch casi nunca hacía llorar a Claire. El, aunque dijera mil veces que no quería a alguien, a Claire la cuidaba como un hermano mayor. Olive se detuvo frente a Claire.
-¿Qué sucede Claire? ¿Por qué lloras?-Claire se abrazó a las piernas de Olive.
-Enoch... esta raro...-Dijo entre hipidos. Olive la miró confundida.
-¿Cómo de que raro?
-Entre y estaba hablando en... no se que idioma. Me dio miedo. Tenía una botella en la mano. No se que le pasa...-Dijo.-Voy a llamar a Miss Peregrine...
Olive tenía una leve sospecha sobre lo que le pasaba a Enoch.
-No. No es necesario. Yo me encargo. Ve a jugar con Bronwyn en el jardín. No le digas nada a Miss Peregrine.-Claire asintió y se fue corriendo. Olive jaló aire y reanudó su camino por el pasillo. La puerta de Enoch estaba entreabierta. Olive la empujó. Se encontró con un Enoch sentado en la silla. Tenía el cabello hecho un desastre y una botella de cerveza en la mano. Tomaba de ella.
-Oh ¡Olive! ¡Hasta que vienes!-Exclamó. Olive retrocedió un paso. Estaba ebrio. Olive cerró la puerta tras de si. El olor a alcohol inundaba la habitación. Olive tragó saliva.
-¿Qué estás haciendo Enoch?-Preguntó Olive mirándolo con el ceño fruncido. Enoch soltó una risa.
-¿Qué crees que hago? Tomar.-Se levantó de la silla con paso tambaleante. Dejó la botella en la mesa. Se acercó a ella. La acorraló contra la pared.
-Enoch no deberías estar tomando... Miss Peregrine te va a regañar... Dios Enoch te estas cayendo...-Dijo Olive agarrándolo del brazo para evitar que se cayera. El soltó una risa.
-Miss Peregrine sabe que ya no soy un niño...-Olive le quitó la botella de la mano. Lo hizo a un lado para ponerla en la mesa.
-Si. Sabe que ya no eres un niño pero aun así no debes hacer esto.-Respondió Olive con enojo. La ropa de Enoch olía a alcohol. Enoch seguía de pie en precario equilibrio. Olive lo agarró del brazo y lo ayudó a sentarse en la silla.-Es frustrante verte así Enoch...