-Robin, necesitamos hablar-Dijo Cyborg mientras entraba a la Baticueva. Robin llevaba horas encerrado buscando cualquier cosa que le diera la ubicación exacta del Guasón: cámaras de vigilancia de toda la ciudad, reportes de crímenes recientes...
-¿Todo está bien?-Preguntó Robin confundido, y sin mirarlo. No despegó los ojos de la Baticomputadora.
-No. No todo. Se trata de Star-Dijo Cyborg. Robin se puso de pie de inmediato y lo miró.
-¿Le pasó algo? ¿Dónde está ella?
-Lo que pasa es que ella...
-¡Ella está perfectamente bien!-Interrumpió Barbara entrando a la cueva. Cyborg soltó un suspiro de desesperación. Se paró junto a Robin-Acabo de ir a verla y está bastante bien. Pero la razón por la que vengo a buscarte es porque parece ser que vieron payasos en la calle Green Book. ¿Nos acompañas a mí, a Bruce y a Tim a investigar?-Preguntó Barbara sonriendo. En menos de dos segundos, Robin había desaparecido por la puerta, sin cerciorarse de que Starfire estuviera realmente bien. Él creía en Barbara.
Cyborg soltó un bufido y se sentó en la silla en la que Robin había estado sentado minutos atrás. Hablar con Robin sería más difícil de lo que imaginó. Miró la Baticomputadora, y la emoción lo venció: comenzó a teclear como loco con una amplia sonrisa en la cara.
Esa noche, Raven se quedó levitando en el centro del laberinto, leyendo un libro. Había dejado a Starfire durmiendo en su habitación, y no se había ido hasta hacer un círculo protector que Zatanna no pudiera cruzar. Tenía un muy mal presentimiento respecto a su amiga, y estaba segura de saber por dónde vendría, por lo que pondría todo de su parte por protegerla mientras Robin no lo hacía.
Mientras leía, alcanzó a notar que una ardilla se acercaba a ella. No le dio importancia, hasta que de repente...
-¡RAVEEEEEN!-Exclamó la ardilla verde mientras se transformaba en humano de nuevo.
-¡AHHH!-Exclamó ella aterrada mientras caía al suelo con un golpe.
-Chico Bestia, espero que tengas una explicación para esto-Dijo ella enojada sacudiéndose la tierra de encima.
-Starfire está durmiendo, Cyborg está en la Baticueva, y Robin está patrullando por ahí con la Batifamilia. Así que me aburrí y vine contigo-Dijo sonriente.
-¿Mi meditación no era un motivo para dejarme tranquila?-Gruñó ella.
-No realmente. ¿Sabes? Creo que nunca te vi más molesta que cuando le plantaste cara a Zatanna-Dijo Chico Bestia riendo.
-¿Estabas ahí?
-Claro. Siempre soy una mosca en tu pared-Dijo él transformándose en una mosca que revoloteó alrededor de la cara de Raven.
Raven se quedó callada unos momentos, y se le quedó viendo a su amigo mientras volvía a ser humano.
-¿Por qué siempre estás rondándome, Chico Bestia? No es que me moleste, sólo es...curiosidad-Preguntó.
-Pues...¡no sé! Me gusta saber que estás bien.
-¿Por qué el interés en mí?
-Porque...porque te quiero mucho-Dijo Chico Bestia bajando la mirada.
-¿Como Robin a Starfire?-Preguntó Raven asombrada.
-¿No puedo quererte como Chico Bestia a Raven y ya?-Preguntó Chico Bestia bajando las puntas de sus orejas.
Se quedaron en silencio un minuto, pensando qué decir, hasta que Raven habló.
-¿Sabes, Chico Bestia? Yo también te quiero, y mucho. Pero nunca te lo dije.
Se quedaron en silencio unos segundos más, y esta vez fue el Chico Bestia quien habló.
-¿Y si somos...?
-¿...novios?-Completó Raven con una sonrisa tímida.
-Sí, exacto. ¿Quieres ser mi novia, Raven?-Preguntó Chico Bestia. Raven abrió los ojos como platos.
-Sí-Dijo ella sonriendo.
Sus manos se tocaron y entrelazaron los meñiques. Se acercaron más el uno al otro, hasta que se besaron. Todas las luces que los rodeaban estallaron al momento, dejándolos prácticamente a oscuras.
-¿Qué fue eso?-Preguntó Chico Bestia divertido.
-Mis emociones haciendo de las suyas. Ya me acostumbraré, supongo-Dijo ella sonriendo de una manera que jamás lo había hecho antes.
Se tomaron de la mano y entrelazaron los dedos, provocando que otra lámpara estallara. Ambos chicos se rieron a carcajadas.
-En serio nena, me encantó la manera en que pusiste en su lugar a Zatanna. Fue súper.
-Oye, Starfire es mi mejor amiga. Mientras Robin no esté, alguien tiene ser su niñera-Dijo Raven, y se rió.
-Robin siempre está encerrado, pero lo hace por proteger a su chica-Dijo Chico Bestia frunciendo el ceño.
-Me temo que más bien el enemigo está en casa. Tuve que hacer un círculo protector para que Zatanna no se le acercara-Dijo Raven negando con la cabeza.
-Esa mujer es mala de verdad.
-No mala, pero sí enamorada. Digamos que cuando una mujer está enamorada es capaz de muchas cosas. Creéme que ella no es mala, sólo que ve a Starfire como una rival por completo, y quiere eliminar a la competencia-Dijo Raven.
-Para mí eso es ser mala.
Raven soltó una risita, y después de unos segundos de pensarlo, apoyó su cabeza en el hombro de su ahora novio. Él lo pensó unos segundos, pero le devolvió el gesto.
-¿Raven?
-¿Chico Bestia?
-Nunca te lo dije, pero de todas las chicas que conocí en mi vida, tú siempre has sido la más bonita-Dijo él. No lo notó, pero Raven estaba sonrojada, y sonriendo de una manera que ella nunca imaginó que sería capaz.
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Los Jóvenes Titanes: The Biggest Fight
FanficTras el viaje a Tokio, Robin y Starfire son pareja oficialmente, y durante los primeros días todo parece ir bien, sin embargo, la llegada de un criminal, viejo enemigo de Robin, lo lleva a ser obsesivo de nuevo y negligente con su relación, lo que t...