23. Estamos cerca...

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(Nota aclaratoria: esto pasa mientras Robin y todos los demás van en busca de Slade)

-...y entonces Dick anotó la canasta, y nuestro equipo ganó-Dijo Tim a Starfire. Llevaba horas intercambiando historias con Starfire de sus infancias en un desesperado intento por mantenerla despierta, porque las nuevas heridas y golpes propinados por la Hermandad del Mal la habían dejado prácticamente agonizante.

Después de que el Guasón la encontró llamando a Robin, sus castigos fueron increíblemente más brutales. Todos los hombres de la Hermandad se dedicaron a atacar y destrozar a la chica de todas las maneras posibles, mientras las mujeres reían y filmaban todo, forzándolo a mirar en un rincón. No dudaba que esas grabaciones hubieran sido enviadas a Bruce y Dick. Luego, destrozada, herida y adolorida como estaba, la volvieron a encerrar en el almacén. Tim se preguntaba cómo demonios podía caber tanta maldad en una persona, y qué había hecho Dick para que le quisieran hacer tanto daño.

-Cuando yo era niña, mi hermana mayor Blackfire llenó mi cama de sorcabayas y entonces mi ropa para dormir y mi piel se llenaron de manchas violetas y yo parecía un blarkofer gigantesco...-Starfire comenzó a bostezar.

-¿Qué pasa, Starfire?

-Tim, tengo mucho sueño-Dijo Starfire mirando al niño con ojos apagados.

-No. No lo tienes Star. Recuerda que no puedes dormir. ¡Uy! Recuerdo un Halloween en el que Dick y yo salimos a patrullar hace años, y nos llevamos un montón de dulces para repartirlos entre los niños que encontráramos y alguien nos dio dulces porque pensaban que nuestros uniformes eran disfraces y...¿Star? ¿Starfire?

Los ojos de Starfire finalmente estaban empezando a cerrarse.

-¿Tim? Cuando Robin venga, dile que yo lo amo-Dijo Starfire, y finalmente cerró los ojos.

-¡No! ¡Despierta por favor! ¡Star! ¡Starfire! ¡No me dejes solo! ¡Starfire!

¡Starfire!

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-Despierta, querida hija-Dijo una voz suave.

¿Qué? Por X'hall, esto es imposible. Ellos no son reales. Los juegos de la mente se burlan de mí.

Starfire abrió los ojos, y se vio en su habitación del palacio de Tamaran. Aún confundida y sorprendida, se miró los brazos y miró sus piernas, esperando verlas llenas de golpes, heridas y sangre, pero las vio sanas y lisas, sin huella alguna de los abusos que había sufrido en toda su vida. Finalmente se decidió a mirar frente a ella, donde veía la sombra de dos personas.

-¿Madre? ¿Padre?

La reina Luand'r y el rey Myand'r se acercaron a la chica y le acariciaron el cabello. Starfire sintió un remolino de emociones, llevaba años deseando volver a ver a sus padres.

-Hola mi preciosa nena-Dijo su madre. Starfire los abrazó fuertemente, pero repentinamente los soltó

-No, no. Esto no es real-Starfire se metió bajo sus mantas y se cubrió hasta la cabeza-Esto sólo pasa en las películas terrestres que Raven odia y dice que son ridículas. Estoy soñando todo esto por culpa de los traumatismos causados por los golpes. Esto es lo que Raven llama "cursi".

-Estás soñando, sí querida, pero te hemos visitado en sus sueños. Nos necesitabas, Koriand'r. Necesitamos que sepas que vas a salir de aquí-Dijo el rey desde afuera de su manta.

Los Jóvenes Titanes: The Biggest FightDonde viven las historias. Descúbrelo ahora