La Rareza Del Amor

Capítulo 7

-Tu, !jejeje!

Sabes, esa sonrisa tuya es muy hermosa, ¡ven aquí!.

-¡Jullian!.

Quiero que sientas los latidos de mi corazón, quiero que escuches lo que quieren decir.

-Siento calma, me siento feliz, es como si tu corazón se hubiera llevado toda la tristeza de mi.

Ahora dime, ¿estas mejor?.

-Si, mucho mejor, gracias Jullian.

Vale, no necesitas agradecer, haré lo que se necesité para verte feliz, es raro y nuevo para mí que yo haga todo esto, es la primera vez.

Será raro aceptarlo, pero creo que me estoy enamorando de ti.

-¡Que triste!.

¿Pasa algo?.

-Es sólo que, ya llegamos a mi casa hubiera querido que el camino hubiese sido más largo.

No te preocupes, mañana nos volveremos a ver, a demás si lo quieres, ¿podremos hablar por chat?.

-Si, ¡me gustaría mucho!.

Dale mira, entonces te escribiré mi número en este papelillo, cuando quieras puedes llamarme o escribirme y yo te responderé, Cuidaté y nos veremos mañana.

Ha, casi lo olvido, ven.

Acercaré a mi, acerca tu rostro al mio, mira a mis ojos y escucha esto, quiero que sepas que tu eres la luz que da brillo a mis ojos, tu me haces sentir más que mariposas, me robas el aliento y vuelves loco a mí corazón y pase lo que pase, eres y has sido la primera que me ha hecho sentir este tipo de emoción.

Te quiero mucho niña que robo mi corazón.

Hasta pronto.

-Jullian, me haces dar pena, pero me haces sentir muy feliz.

-¡Cuidaté!.

(Vaya, esa chica, esa chica me hace sentir bien, hace mucho tiempo que me sentía tan feliz).

-Oye, ¡oye tu!.

Am, qué, ¿quien es?.

-¿Que haces con mi chica?.

Tu chica, ¿de quien hablas?.

¡Ha!

Tu has de ser Esteban, ¿o me equivoco?.

-Así es, ¡yo soy el novio de Jeidy!.

Ha, ya veo, no me habían contado que sufrías de delirios, deberías visitar a un doctor, podrías terminar idiota.

¡Adiós chico!.

-Alejaré de ella si no quieres terminar mal, te lo advierto.

Si, ¡si como digas chico malo!.

(Porque presiento que va a suceder algo malo).

-Hola hijo, llegas tarde, pasó algo, ¿no es normal en ti?.

Ha, hola mamá, bueno verás, estaba con Jeidy, quería conversar con ella.

-De verdad hijo, que emoción, mi hijo tiene novia, mi hijo se enamoró, que felicidad.

No somos novios, sólo estábamos hablando, no te emociones, ni siquiera somos nada.

-Hijo eres muy cruel, matarle a tu madre la ilusión de verte feliz.

Mamá, no es para tanto, no vayas a exagerar, pero si te hace feliz, ella me dio un beso y si me hizo muy feliz, sólo te diré eso, ha y un idiota se interpone, la trata como si fuera un objetó.

¡Es un maldito idiota!.

-¡Hijo!.

Lo siento mamá, me dejé llevar un poco por la ira, pero es que, detestó que traten a una persona así.

-Tranquilo, pensar que no eras así hasta que pasó lo que tú padre.

¡No menciones a ese desgraciado, sabés que lo odió!.

-Perdón hijo, lo dije sin pensar.

Ya no importa, me iré a dormir, buenas noches.

-¿No piensas cenar?.

Perdí el apetito, ¡hablamos en la mañana!.

¡Descansa mamá!.