Capítulo 5
Martes.
El tatuaje.
Cuando Hermione llegó a la morgue la mañana siguiente, se sorprendió al encontrar a alguien en su sala de autopsias. Había llegado tan temprano que el guardia nocturno había tenido que abrirle la puerta, así que no sé esperaba encontrar a Jack Rice preparando los instrumentos de operación. Frunció el ceño. El chico trabajaba para Nott, no para ella.
—¿Qué haces?
El muchacho dio un salto, llevándose una mano al pecho.
—Dios santo, Hermione. Vas a darme un infarto un día de estos— se esforzó en recuperar el aliento. — tienes que hacer un poco de ruido al caminar, mujer. Matarás de un susto a alguien, te lo digo en serio. Pareces un gato.
La forense sonrió. Le caía bien Jack, al fin y al cabo, seguía siendo un crío. Después de Luka, Jack era el único con permiso para hablarle de ese modo.
Al acercarse un poco, notó que iba descalzo y con los pantalones arremangados. Alzó las cejas al ver que no estaba ordenando el material de trabajo, sino que se estaba peleando con un pequeño paquete
—Lo siento, no quería asustarte... ¿Qué haces?
—Ya verás, ya verás— cuando al fin pudo abrir la caja con ayuda de un bisturí, Hermione vio como sacaba una máscara de zombi extremadamente fea.
—¿Y eso?
Jack se limitó a agitar la máscara en el aire, mientras que con la mano libre señalaba la sábana de plástico que había doblada sobre la mesa de acero inoxidable.
Hermione soltó una risotada, al comprender las intenciones del asistente. Negando con la cabeza, le deseó suerte antes de encaminarse a su despacho sin dejar de reír por lo bajo.
Aquella mañana se sentía bastante bien. Tal vez fuera porque no había recibido ninguna llamada tempranera de parte de su madre, que le amargara la existencia.
También podía atribuirle su buen humor a la velada pasada con sus amigos, comiendo comida grasosa y planeando novedosas y muy dolorosas formas de deshacerse de la ex de Harry. Lo cierto era que se lo había pasado mejor de lo que se hubiera imaginado. Ginny siempre parecía tener un comentario divertido en la punta de la lengua, y nunca había visto a Harry hacer tantas bromas y sonreír tanto.
Se sentó frente a su ordenador, lista para comenzar con otro día de trabajo. Tenía montones de correos que mandar y muchos informes que revisar.
Mientras le mandaba un resumen de autopsia a uno de sus colegas, no podía dejar de pensar en la noche anterior.
Aunque Fred no había hablado con ella casi nada en el bar, su mirada había estado clavada en su dirección todo el tiempo. Y eso había logrado ponerla un poco nerviosa.
Harry y Ginny charlaban como si no lo notaran, pero Hermione estaba segura que lo habían visto y habían decidido permanecer al margen, sin hacer ningún comentario.
Lo que más le sorprendía era la actitud de Harry. Éste siempre había sido un pelín sobreprotector con ella, puesto que la consideraba como una hermana pequeña (si bien ella era mayor que él) por esa razón, que el detective no le dijera nada a su cuñado, era de lo más raro. En ocasiones similares, hubiera puesto mala cara y soltado algún comentario poco amable.
Dejó escapar un largo suspiro mientras sus dedos volaban sobre el techado. Solo había sido una reunión de amigos como cualquier otra, y se lo había pasado bien por primera vez en meses...
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Sueños II: El Cazador [Fremione]
FanfictionSegunda entrega: Un asesino en serie atormenta Londres. La forense Hermione Granger comenzara a flaquear cuando una de las victimas sea un amigo muy cercano. Devastada por la perdida, empezará a poner en duda su juicio cuando conozca a su nuevo asis...