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Maratón 4/5

Algunos días habían pasado desde que la relación de Carolina y Lionel había comenzado. Ambos eran felices, o al menos eso le decían a todos. Era miércoles por la tarde y Carolina se encontraba en el restaurante atendiendo algunas mesas.

Gastón estaba dormido en su carrito, el que Lio le había comprado días atrás. Todos se encontraban haciendo sus trabajos. La campanilla de la entrada sonó avisando que un nuevo cliente había llegado.

El descanso de Carolina había comenzado. Se dirigió hasta la caja para avisarle a Valentina que saldría a comer algo y después regresaría.

— Valu, ya regreso. Me llevaré a Gastón — le dijo Carolina mientras dejaba sus cosas.

— Está bien, yo me encargaré de ese bombón que acaba de entrar — la rubia no esperó tiempo y salió de la caja para ir atender al chico que había llegado.

Carolina continuó con lo que estaba haciendo. Recogió las cosas de Gastón y las acomodó en el cuarto de servicio, para después solo cargar con la pañalera del pequeño. Tomó a Gastón y entró hasta la cocina, donde Lio se encontraba.

Por otro lado Valentina había tomado ya la orden del chico. Ambos habían estado coqueteando unos segundos, pero el chico no quería distraerse de su objetivo por el que su prima lo había enviado.

— Ya te traigo tu orden — le dijo Valentina antes de dirigirse hasta la cocina para pasar la orden.

Mike se quedó observando el restaurante. Sacó su teléfono y vio el mensaje que Karol le había enviado minutos antes.

“¿Alguna pista?”

Dudó en si contarle o no el hecho de que ayer había visto a una chica parecida a Carolina, pero no quería causar falsas ilusiones en los demás.

“Nada aún”

Envió el mensaje y guardó su teléfono nuevamente.

A diferencia de otras veces, ahora Lio la acompañaba a comer, desde que habían comenzando su relación ambos estaban más juntos. Lionel traía a Gastón en sus brazos y sujetaba la mano de Carolina, ambos iban riendo del entusiasmo de Valentina por el chico que había aparecido.

— Te apuesto que consiguiera el teléfono de ese chico — le comentó Carolina a Lio.

— No lo dudo — ambos siguieron su camino.

Lo siguiente pasó como cámara lenta para Carolina y Michael. Ambos se miraron, era como si trataban de descifrar si realmente eran ellos. Cuando Carolina cayó en cuenta de que realmente era Michael se quedó paralizada. Justo a unos metros de la mesa en la que él estaba.

— ¿Sucede algo? — le preguntó preocupado Lio. Carolina seguía observando a Michael. Hasta que el chico desvió su mirada al bebé que Lio tenía en sus brazos. Carolina vio a su hijo.

— Vámonos — Carolina no esperó a que Michael se acercara para sujetar la mano de Lio y salir casi corriendo de ahí.

Michael necesitaba explicarle lo que estaba pasando, aunque él tenía más dudas que ella. Salió detrás de ella y logró alcanzarla, la sujetó de la mano libre y la hizo voltear.

— Carolina, espera — la chica parecía incómoda con la presencia de Michael, y Lio lo notó.

— No la toques — le ordenó Lio a Mike. Creyendo que el chico era un peligro para Caro. Tomó a Carolina y con un gesto sobreprotector la colocó detrás de él.

— Caro hablemos — Carolina no sabía qué hacer. Temía que Michael pudiera decirle a Karol donde estaba, no quería que nadie la encontrara, y menos ahora que ella había comenzado con una nueva vida.

Buscando a Papá (BAM#2) | AguslinaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora