XIX

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Eleuteromanía:
Visualizo al final un carretera a mis ojos infinita, sonrío involuntariamente, como me gustaría saber que hay más allá de esas montañas.
Voy camino a uno de los pocos lugares en los realmente me siento libre
Mi madre hace contacto con mi mirada, y la ira sube por mi espalda.
¿Ella tiene que controlarlo todo en mi vida?
Tiene que saber lo que veo, que hago, con quien, se que es normal pero, ella es una maniática del control.
No puedo cantar en casa, no puedo cantar en la ducha ni en el coche, mi música no puede escucharse.
Yo no puedo comportarme como una niña, es decir, nada de programas tontos como bob esponja o algo así.
Debo ser correcta.
Pero solo me faltan un par de años, un par de años para irme, un par de años para escapar, un par de años para no tener que estar sujeta a su control.

Pero no puedo esperar un par de años, dejó escapar ahora.

Mi último veranoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora