TÚ ∞1D

Capítulo 8: Matemáticas

Cuando por fin dejé de toser, me concentré en la persona que acababa de entrar y como suponía era Cristine, me miraba como siempre, como si quisiera matarme, yo ni siquiera me molesté en mirarla, en cambio lo hice con la persona que venía detrás de ella, Niall, el tipo me miraba de la misma manera que Cristine y yo ni siquiera lo conozco ¿Qué se cree? Me limite a mirarlo de la misma manera, los tipos ni siquiera nos dijeron nada y subieron las escaleras, que urgidos.., cuando desaparecieron Liam y yo volvimos a la televisión, ya ni me acordaba de que estaba ahí

-Creo que no te llevas muy bien con el güerito ese- dijo Liam mirándome

-La verdad, ni siquiera lo conozco- dije sin mirarlo, viendo hacia la televisión

-¿Ella es Cristine?-

-Aha- me limité a contestar

-¿Y el tipo que, es su novio?-

-Aha, se llama Niall-dije asintiendo

-¿Viene todos los días?-

-Si- dije asintiendo de nuevo, Liam no dijo nada más y seguimos viendo la televisión, si decir nada, hasta que volvieron a bajar Niall y Cristine,unos minutos después, Niall estaba igual, pero Cristine se había cambiado, ahora tenía puesto un vestido, se acercaron hacia nosotros y Cristine me miró

-Oye tu, ya me voy- 

-Ok- le dije sin mirarla 

-¡Oye! ¡Te estoy hablando! ¡Mirame cuando te hablo!- giré mi cabeza para mirarla, con cara de pocos amigos- Si viene mamá, dile que fuí a comer con Niall-

-Mamá esta en Italia ¿No te dijo?, creí que al menos tenía la decencia de decirle a su hija preferida- al decir eso moví mi vista de Cristine y miré al televisor de nuevo

-¡Cállate!, no hables así de mamá-

-Ok- volví a contestarle

-¿Y éste qué?, ¿Es otro de tus amiguitos?-la miré de nuevo y le dije

-Es la persona que viene de intercambio-

-Ah- dijo Cristine, le callé la boca, toma eso- hola- dijo ella secamente- soy Cristine- dijo de la misma manera

-Liam- dijo Liam mirándola

-Bueno, ya me voy- no le contesté nada y se fueron, Liam me miró y me dijo

-Valla, nunca creí que alguien que se viera tan bien podía ser tan irritante- ok, su comentario me sacó de onda, pero lo dejé pasar

-Es Cristine- dije como si nada y de repente recordé todo lo que tenía que hacer: la tarea de matemáticas, alguien vendría por la maleta de mamá y no se cuantas cosas más, me levanté de mi lugar y le dije a Liam- Tengo que irme- el asintió y yo subí las escaleras, fuí a mi habitación y me senté en el escritorio a hacer tarea, abrí el cuaderno y me quedé en blanco, siempre me va bien en todas las materias excepto matemáticas, aunque nunca pongo atención en clase (por culpa de Harry), siempre tomo apuntes, hago todos los trabajos y proyectos y al final sólo estudio para el examen y me va muy bien, pero matemáticas, era una cosa totalmente diferente, traté de concentrarme y pensar en una manera obvia en la que se podría resolver una ecuación, nada, ¡Vamos!, eso nos lo enseñaron en secundaria, recuerdo ese año, ha sido el único en el que los cuatro (Harry, Eleanor, Louis y yo) hemos estado en el mismo salón, ya se imaginarán, desastre total, la verdad no se como es que logramos pasar ese año, ok ya, tengo que concentrarme en ecuaciones, ni las más fáciles entiendo, eran 20 ecuaciones e iban subiendo de dificultad, la primera era la más fácil y la veinteava la más difícil, se me ocurrió una idea, buscar en el bendito internet el procedimiento para resolver una ecuación, salieron millones de resultados y no le entendí a NINGUNO, ni a yahoo respuestas, me di cabezazos contra la mesa, pero al parecer, no ayudó en nada, soy un desastre, ¿Qué voy a hacer?, un momento, tengo otra idea, llamaré a Eleanor, ella es un genio de las matemáticas, era la única y siempre le copiábamos en los exámenes, oh claro, por eso es que aprobamos, bueno, marqué su número, no contestó, volví a marcar, no contestaba, marqué otra vez, tampoco contesto, marque un total de diez veces y ninguna la conetstó, esto empezaba a estresarme y yo estresada, era muy peligrosa, traté de calmarme, pero era imposible, inhala, exhala, no funciona, traté de concentrarme de nuevo en el cuaderno, pero cada vez estaba peor, estuve así otros quince minutos más, hasta que ya no podía más con el estrés y la frustración, tomé mi cuaderno y lo lancé lo más fuerte que pude hacia el otro lado de mi cuarto, sonó bastante fuerte como para que fuera un simple cuaderno, después lancé un grito de frustración y me dejé caer al suelo, en menos de cinco segundos alguien abrió mi puerta fuertemente, si tocar, era Liam, creo que estaba preocupado