TÚ ∞1D

Capítulo 12: Desayuno

Recuerdo la primera vez que vi la nieve, aquí en Londres era bastante común ya que todos los inviernos las calles y tejados de las casas y edificios estaban adornados con ella, sin embargo, no fue hasta los tres años de edad que me di cuenta de lo mucho que me gustaba y sé que esa no fue la primera vez que la vi, pero si fue la primera vez que la miré de verdad, que la aprecié y que me divertí tanto jugando con ella, ese día fue el que conocí a Harry y supongo que por eso, más que nada, jamás olvidaré ese día. Hoy la nieve había desaparecido casi por completo de Londres, ya estábamos en marzo y la primavera estaba bastante cerca, siempre me gustó más el invierno, pero jamás odie el verano, mucho menos la primavera o el otoño, hice mi ritual de siempre al levantarme y bajé a la cocina, sabía que Liam estaría ahí y no me equivocaba

-¡Buenos días!- dijo Liam en cuanto entré, esperé ver el desayuno ya servido o verlo preparándolo, pero en vez de eso estaba sentado en la mesa y sobre esta había huevos (aún en su casacarón), jamón, tocino, sal, pimienta, mantequilla derretida, pan (sin tostar), aceite, leche y naranjas al lado de un vaso completamente vacío

-Buenos días...- dije sin mucha emoción mirando las cosas que estaban en la mesa

-¿Lista?- preguntó Liam un poco ansioso

-¿Para qué exactamente?- dije un poco asustada

-Para aprender a cocinar un buen desayuno, toma- me tendió un delantal color azul con flores con la mano y el también tenía uno puesto sobre el uniforme, pero el de él era simplemente negro, me lo puse, Liam se levantó de la mesa y se dirigió a la estufa- primero pones la sartén en la estufa- en serio esto me parecía más que ridículo, pero bueno, supongo que esto es importante para Liam, así que lo dejé pasar y asentí- la enciendes y lo pones a fuego medio- volví a asentir - ahora tu hazlo- me tendió otra sartén y lo imité, la puse sobre la estufa, la encendí y la puse a fuego medio- bien- dijo Liam asintiendo- después pones la aceite, pero ten cuidado por que salta y en serio quema- asentí de nuevo, Liam me pasó el aceite, se supone que tenía que hacer lo mismo que él, pero me daba muchísimo miedo, es lo que más me asusta de cocinar de hecho y prácticamente me estoy muriendo, pero aún así  agarré el aceite

-Y... ¿Cuánto le tengo que poner?- dije preguntando para hacer más tiempo, estaba aterrada

-Sólo deja vaciar la botella por unos dos segundos- contestó Liam normal

-Ok- dije asintiendo nerviosa, vamos, sólo es aceite ¿Qué es lo peor que puede pasar?, me imaginé echando el aceite y quemándome, con el ardor en la piel y tener que ir al hospital, odio los hospitales, sé que estoy exagerando, pero estoy aterrada, sólo hazlo, sólo hazlo, y lo hice, cerré los ojos, me aperte un poco y vertí el aceite

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abrí los ojos y nada me había pasado, de hecho nada fuera de lo común sucedió, no me quemé, no tuve que ir al hospital, todo esta bien, cálmate, no pasó nada, Liam asintió y siguió 

-Ahora ponemos el jamón en el sartén- lo hizo y algunas chispas saltaron, ok, esto me estaba dando más miedo, tranquila, no pasará nada, lo imité y como ya había dicho antes, no sucedió nada fuera de  lo común,-Ahora- dijo tomando un plato hondo- batiremos los huevos- rompió un casacarón y después otro, lo hizo como si fuera lo más normal del mundo, pero sé lo difícil que era, lo había intentado un par de veces antes y no salió nada bien, antes de que Liam lo dijera, tomé otro plato hondo y un huevo, lo choqué ligeramente con la esquina del plato y se hizo una pequeña grieta los rompí lo más profesionalmente que pude y tiré el contenido en el plato, me manché las manos y pudo haber salido mucho mejor pero definitivamente pudo haber salido peor, sinceramente me sentía orgullosa de mí misma, hice lo mismo con el siguiente huevo y esta vez salió un poco mejor, después Liam vació la mantequilla derretida en el plato y yo hice lo mismo, le agregó un poco de sal y pimienta y yo también, tomó un tenedor y empezó  batirlo todo, traté de imitarlo pero no me salía bien, yo los estaba revolviendo y necesitaba batirlos Liam se rió de mí- Tienes que inclinar un poco más el plato y batir con más fuerza- asentí y me salió mal, pero estaba mejor que antes Liam echó la mezcla en el sartén que tenía el jamón y saltaron pocas chispas, esta vez ya no me dió miedo e hice lo mismo que Liam, con el tenedor estaba mezclando un poco y yo hice lo mismo, después de unos segundos con la espátula empezó a mezclar todo, sin ninguna direcctión en particular, tomé otra espátula y lo imité, menos de un minuto después apago la estufa y yo hice lo mismo y en ese instante me di cuenta del delicioso aroma a desayuno que cubría la cocina entera, me encanta- y listo-