Capítulo 3: Y ¿Tu qué?

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Era Cristine, en ese momento juro que haría cualquier cosa, en serio ¡Cualquiera!, con tal de que la persona que abriera la puerta no fuera ella, pero no podía hacer nada, ¡Maldita sea! 

-Hola Harry- dijo ella mirando a Harry primero que a mi, haciendo notaren ambos ese brillo en sus ojos cada vez que se miran, se odian... 

-Hola Cristina- estuve a punto de hecharme a reír, la última vez que alguien la llamó así, el tipo pasó una semana completa en el hospital

-Soy Cristine, imbécil- y detrás de ella apareció un chico, que... ¡Dios! ¡Es tan guapo! que simplemente no podía dejar de mirarlo, el mundo se disolvió, como si sólo estuviéramos él y yo, luego pensé, si lo trajo Cristine, es igual que ella y eso definitivamente le quitó todo el encanto, Harry miró al tipo y luego a Cristine, después se giró hacia mí 

-Nos vemos luego- y me dió un beso en la mejilla, la última vez que hizo eso, fué hace cómo diez años y por que su mamá lo había obligado, después Harry paso justo por en medio de Cristine y el tipo y se fué, cuando lo perdí de vista, miré a Cristine y luego al tipo y le dije

-Y ¿Tu qué?- era de la misma estatura de Cristine, pero ella traía tacones como siempre, el tipo era rubio, ojos azules y muy, muy guapo

-¡No le hables así, maleducada!- y Cristine me miró cómo si acabara de asesinar a alguien 

-Yo me largo- dije dándome la vuelta, en camino a la sala para recoger mis cosas e ir a mi habitación, Cristine también fué a la sala y me dijo

-¡Enserio eres maleducada! ¿No vas a saludar siquiera?-

-Emm.. No- dije tomando mis cosas y subiendo las escaleras hacia mi habitación 

-Y dejaste toda tirada la sala y la cocina ¡Tu vas a limpiar todo!-

-¡Hay personas que se encargan de eso!- le grité desde el segundo piso, cerrando la puerta de mi cuarto y terminando la discución, dejé mis cosas en el escritorio y fuí al baño a bañarme, eran como las siete de la tarde/noche, así que estaba perfecto, salí en menos de 15 minutos, calientita y con mi pijama de "Hello Kitty", me sequé el cabello, me senté en el escritorio y empezé a hacer la tarea como Dios manda, pero no era mucha así que terminé todo como a las 8:30, tenía hambre y quería cenar algo, pero Cristonta y el tipo seguían abajo, así es Cristonta, estaba pensando un apodo feo mientras me bañaba y ese le quedaba perfecto, pero jamás me atrevería a llamarla así o pasarí dos, si no es que más, semanas en el hospital, tenía que pensar un plan pero.. ¿Qué podría hacer?, un momento, ¡Ya sé!, voy a hacer lo que e hecho toda mi vida, ignorar a todo el mundo, ¡El plan perfecto! , bajé como si nada las escaleras volteé hacia la sala y los tipos veían la tele muy normal, lo mejor es que ni siquiera me vieron, fuí a la cocina y me serví un tazón de "Corn Flakes" le puse la leche, tomé una cuchara y me senté en el pequeño comedor, el volumen de la televisión estaba un poco alto y se alcanzaba a escuchar todo, estaban viendo "Los Simpsons" era de mis programas favoritos, pero mamá lo prohibió sólo por que a Perrie, mi hermana mayor, que es menor que Cristine, no le gustaba, pero aún recuerdo ese capítulo, en el que Lisa se vuelve la presidenta de la clase e iba en la parte en la que Lisa abre la puerta de la sala de maestros y el jardinero esta imitando a Milhouse, por que se faja la camisa debajo de los calzoncillos y luego ponen a Milhouse y si es cierto, con el simple hecho de escucharlo me hecho a reír y escupo el cereal que estaba comiendo (lo se, siempre escupo lo que estoy comiendo cuando me río, lo mas divertido es cuando hay alguien enfrente y le cae todo) en la sala también se escucharon risas, era una hermosa risa que obviamente era de el tipo, Cristonta jamás se reiría de algo así

-Eres un estúpido Niall ¿Cómo eso puede darte risa?- y alguien cambió el canal, así que el tipo se llamaba Niall, acabé el cereal lo más rápido que pude, antes de que alguien notara mi presencia, aunque la cocina terminó hecha un desastre por el agua y el cereal, me fuí lo más rápido que pude, subí a mi habitación, me lavé los dientes y me fuí a dormir, pensando el la hermosa risa de Niall, quizá era tan estúpido como decía Cristonta, pero no podía dejar de pensar en el, cuando menos me dí cuenta, ya estaba dormida.

TÚ ∞1DDonde viven las historias. Descúbrelo ahora