Capítulo 30

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Nadie a hablado o hecho algún ruido durante aproximadamente una hora.
Al parecer socializar con los Leagan era difícil. Y el único que podía conversar con ellos de una manera formal y bien era Albert, el cual se había dormido. Para salir de Chicago eran como un par de horas, después de salir de ahí empezarían las verdaderas vacaciones.

-Miren, que lindo se ve esa colina. Dijo Annie.
-Tiene un parecido a la colina de pony. Dijo Candy.
-Si, pero siempre será mas bonita la colina de pony que cualquier otra. Dijo Annie.

Ambas chicas rieron.

-Ami me parece una colina normal. Dijo Archie.
-Claro para ti todas son iguales Archie. Dijo Candy.
-Para mi es una colina. Dijo Eliza.

Era la primera frase que decía Eliza en todo el camino, era mas que claro que no quería quedarse callada en todo el camino, tenia que hablar. Neill estaba en su quinto sueño igual que Albert.

-Claro que no Eliza. Contesto Annie.
-¿Porque?. preguntó Eliza, cruzándose de brazos.
-Tal ves por que no conoces la colina de pony, dices que es una simple colina. Dijo Candy.
-Bueno tal ves algún día valla. Dijo Eliza.
-¿Encerio Eliza?. Pregunto Archie sorprendido.
-No se algún día dije. Contestó Eliza.-Yo podría ir cuando quiera y conocer esa dichosa Colina de pony.
-Cuando quieras ir Eliza, te podemos llevar de visita. Dijo Annie.
-Lo tendré en cuenta. Dijo Eliza.

Los chicos siguieron hablando, era un poco raro ya que Eliza por fin podía hablar sin necesidad de hacer sentir mal a Candy o Annie.

Así transcurrieron las horas y por fin salieron completamente de Chicago. Lo que era calles paso a ser pastizales verdes, lo que eran edificios pasaron a ser arboles gigantes. Solo se escuchaba el ruido del motor del auto y el zumbido de las abejas.

*
Candy, Candy, no se porque no te puedo sacar de mi cabeza, te odio por eso y te amo por mas razones. No se que hiciste pero no puedo parar de pensar en ti, todo me recuerda a ti.

-Mira que hermoso es. Dijo Jackson, sacando a Terry de sus pensamientos.
-Si lo es. Dijo Terry, mirando a la nada por la ventana.
-Por lo menos lo estas viendo, yo decía el otro lado de la ventana.
-Ah, pero también este lado es hermoso.
-No lo es tanto como este.
-Ambos son hermosos Jackson.
-¿Terry que tanto piensas? Te e visto en todo el camino y lo único que haces es mirar a través de esa ventana.
-Solo estoy distraído, es eso.
-Terry te conozco poco pero ya me estoy adaptando a tus cambios de humor.
-Jajajaja mis cambios de humor. Terry por fin volteo a ver  a Jackson y se seco una lágrima.
-Ya vez a eso me refiero, una lágrima.
-Lo siento, es que extraño mucho a una persona.
-¿A tu madre? Ser hijo de Eleanor Becker, no es fácil.
-Calla, te pueden escuchar, confíe en ti para decírtelo no quiero que lo sepan.
-Perdón, pero por lo visto la persona que extrañas no es tu madre.
-Jackson es una chica.
-Una chica. Jackson abrió los ojos como platos. -¡Una chica! ¿Cual es su nombre?.
-Su nombre es Candy. Terry bajo la mirada para que no se notará el rubor que causa con sólo pronunciar su nombre.
-Un dulce nombre para una chica.
-Me encanta todo de ella, pero se llevó la peor decepción de mi.
-Por el honor de mi familia, me tuve que casar con Susana Marlow supongo que has escuchado sobre ella, pero ella no era la persona con la que quería estar toda mi vida, su madre me dejo libre convenció a Susana que firmara el divorcio, Candy se entero que yo me case, ya ultima vez que vi a Candy fue en Chicago antes que me fuera a Escocia, le robe un beso.- terry se puso mas colorado- Ella se fue y sus últimas palabras fueron que yo estaba casado, bueno en ese entonces todavía era un hombre casado, pero ella nunca entendió que la prefería a ella mil veces que a cualquier otra, ahora supongo que vive con Albert un amigo mio en un pequeño pueblo en Michigan, y la única razón que tuve para regresar de Escocia fue ella y solamente ella.
-Oh Amigo, si que estas enamorado.
-Después que termine mi carrera en Juilliard, la buscare, así ella sabrá lo mucho que e cambiado por ella.
-Y no te has puesto a pensar que ella se puede enamorar de otro.

La cara de Terry cambio de Feliz a preocupado.

-Realmente no me había puesto a pensar en eso, pero tendré la fe que ella aún me ama.

*

Me acuerdo que pase a Florida antes de verme con Terry hace un tiempo. La hija del doctor participó con el en Romeo y Julieta. Y recuerdo haberme ido bajo la nieve de ese invierno.

-Candy, Candy, ya llegamos al motel. Dijo Annie. -¿Que tanto pensabas? Te hable varias veces.
-Jajaja perdón Annie, me distraje. Dijo Candy haciendo una mueca y sacando su lengua.

Annie y Archie rieron por su acto y bajaron del auto.
Albert ya estaba dentro del motel y Eliza y Neill bajaban algunas cosas de sus maletas.

Los chicos entraron a la recepción, una campanita se escucho después que entraron.

-Amo el sonido de esa campanita. Dijo Annie.
-Es absurdo. Dijo Neill.
-Es de un buen uso. Dijo Candy.
-Si con esa campanita la señora sabría cuando entran o cuando salen. Dijo Archie.
-Tranquilos chicos, ¿no van a pelear por una simple campana o si?. Dijo Albert.
-No. Respondieron los cinco.
-Por fin están de acuerdo en algo. Dijo Albert. -Tomen sus llaves y vámonos a dormir.

Todos asintieron y salieron de la recepción directo a sus habitaciones.

~El Fin~ Candy Candy/COMPLETADonde viven las historias. Descúbrelo ahora