Capitulo 48

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–¡Me encanta!– grito Candy con alegría.

– Lo se, lo hicieron a tu gusto.– dijo Albert. Mirando el nuevo cuarto de Candy.

Después del incendio algunas lugares necesitaron remodelaciones, la mayoría de la mansión. De la muerte de Rachel ya hacía dos meses, que rápido a pasado el tiempo. Los padres de Rachel quisieron culpar a Albert de lo sucedido con su hija, pero no tenían por el cual discutir si su hija había destruido su hogar, no tuvieron otro remedio que regresar a su vida en Londres. En tanto a los chicos todo marchaba bien. Albert se disculpo con todos por estar cegado por Rachel. Y entendieron que él nunca tuvo la culpa, no es malo pensar que estás enamorado, y eso fue exactamente lo que le pasó, estaba tan cegado por el amor de Rachel que no miro que lo único que quería era su fortuna. Albert renuncio al amor, y decidió que el único amor que tendría sería para su hija adoptiva y sus sobrinos.

–¡Candy! ¡Candy!– salió corriendo Annie con un periódico en la mano.

–¿Que pasa Annie?– pregunto Candy.

–Mira esto.– le mostró el periódico.

A Candy se le abrieron los ojos, eran estudiantes de Juilliard, los nuevos artistas. Graduados finalmente.

Ahí está el, se graduó. Ya es un actor, siempre lo fue. Siempre pudo y ahora que lo termino. Me alegro mucho por él. Ya tiene mucho tiempo que no se nada de él y está noticia me alegra porque se que está mejor que nunca.

–Hace mucho que no sabes de él. Por eso lo e traído.– dijo Annie.

–Si. Gracias Annie.– se seco una lágrima.

– Mira Candy. El primer copo del invierno.– señalo el cielo.

Los árboles tiraron sus hojas, los pastos de secaron, los animales se protegen. El invierno está muy cerca, y un copo de nieve lo dice todo.

ARCHIE CORNWELL

Necesito entrar por esa puerta. Sentarme y hacer lo que tengo planeado. Pero no puedo. ¿Desde cuando soy tan cobarde? Yo no soy ningún cobarde.

Archie empujo la puerta del comedor con ambas manos, así atrayendo las miradas de todos. Todos estaban sentados mirando a Archie con confusión.

Los padres de Annie se encontraban de visita, los Britter también quedaron asombrados. Ya que la única razón de que estaban ahí era porque el mismo Archie se los pidió.

Soy un cobarde.

Después de eso hubo un silencio. Hasta que Archie intento sentarse pero en su plan fallido se cayó de la silla.

–¿Estas bien?– pregunto Annie ayudándolo a levantarse del suelo.

– Si, si, no paso nada. Estoy bien.– se limpio los pantalones y tomó su asiento nuevamente.

Estoy demasiado nervioso. No sé si pueda con esto.

Siguieron comiendo y platicando de cosas distintas. Aunque a Archie nunca se le escucho hablar ni una sola palabra. Solo pellizcaba sus chícharos con su cubierto.
Candy noto que Archie estaba completamente perdido. Estaba muy pensativo.

¿Que le pasará a Archie?

Candy decidió no preguntar ya que todos se enfocarían en él. Y se imagino que sería lo último que quisiera él.

Lo Britter se levantaron de la mesa para retirarse. Pero fueron interrumpidos.

–Esperen.– dijo Archie levantándose. Nuevamente todas las miradas se fijaron en él.

Aquí vamos. Solo es una pregunta.

Yo puedo. Yo puedo.

Archie empezó a hablar.

–Señores Britter. Necesito hablar con ustedes un par de minutos en privado.

–Esta bien Archiebald.– dijo el Señor Britter.

Archie y los Britter se encontraban en un pequeño salón junto al comedor.

– La razón por la cual les e pedido que nos den una visita Señores, es por– suspiro– Realmente amo a su hija. Y nada me haría más feliz que  convertirla en mi esposa. Pero primero necesito pedirles a ustedes su tengo su autorización.

Que alivio. Sentí que tenía un montón de piedras en la garganta.

Los padres de Annie se quedaron mudos con la noticia de Archie.

–¿Entonces?– continuo Archie, ya que los Britter no decían nada.

–Mi hija te ama. Y lo sabemos por todas las cartas que nos envía. Pareces un buen hombre y sabemos que puedes hacer feliz a Annie. Así que si Archiebald.– dijo la señora Britter.

Esa misma noche Archie cito a todos en la sala.

Todos están esperando por mi en la sala. Tengo que enfrentarlos y listo.

Nuevamente Archie entro con su entrada de sorpresa.

–¿Que ocurre Archie, para que nos has citado?– pregunto Albert.

–Saben, hay personas que nos aman y personas que amamos cosas muy diferentes ya que lo hacemos a nuestra manera. Pero hay algo en común y es el sentimiento. El mismo sentimiento de amor el cual siento por mi querida Annie. Si los e citado aquí está noche a todos es solo por una razón. La razón por la cual e estado más que distraído, pensativo estos días, no hallaba la forma de decir esto y aún no la encuentro pero de alguna manera lo haré.

Archie se acercó a Annie, quien estaba sentada muy atenta escuchando las palabra que decía Archie. Tomó su mano y le dió un cálido beso, se puso de rodillas y la miro directamente a los ojos.

El brillo en los ojos de Annie no se podían ocultar, estaba más que emocionada.

– Annie, querida Annie, aún tengo tus lindas cartas las que recibía en el Colegio San Pablo. Aún recuerdo cuando dijiste que me querías desde ese momento jure no separarme de ti. Y mírame no he roto mi promesa. Eres la persona más dulce, amable, tierna, gentil, buena con todos sobre todo conmigo, eres hermosa a tu manera, y no quisiera cambiar nada de ti. Simplemente eres la mujer de la cual estoy perdidamente enamorado y con la que quiero pasar el resto de mi vida. Lo he pensado mucho y después  de pedirle permiso a tus padres no me queda más que hacer la pregunta que he querido preguntar todo el día. Annie Britter, ¿Te casarías conmigo?

Annie tenía los ojos llenos de lágrimas. Era hermoso lo que dijo Archie, ella lo amaba y el a ella. Solo quería pasar el resto de su vida con él y hacer una familia juntos.

–Si.– dijo en lagrimas.– Claro que sí.– Annie abrazo a Archie. Mientras lloraba de felicidad.

Candy y Albert se quedaron impresionados por las palabras de Archie. Estos dos felicitaron a la feliz pareja al igual que los Britter lo hicieron.

Pronto habría una boda.

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Hola, hola. Si lo sé tienen derecho a matarme. Y nos los culpo, yo misma se que tarde mucho en actualizar y me disculpo.

Pero mejor tarde que NUNCA.

También lamento decirles que nuestra querida Candy ya tendrá su final. No estoy segura si el Capítulo que venga es el final o le falten dos.

Y le doy las gracias por sus vistas, por sus votos y por sus comentarios que siempre que los leo me sacan una sonrisa. Ya son 8000 vistas. Y de pensar que empecé con solo las mías. Me da una alegría ver cómo progresamos la verdad Gracias.

Bueno mucha platica.

Nos leemos pronto.

Chaito.

-Liz

~El Fin~ Candy Candy/COMPLETADonde viven las historias. Descúbrelo ahora