Nos han pedido que nos acomodáramos ya que traerían un foto de mi abuelo y la pondrían en una mesa, pidieron que trajieramos algo de mucho aprecio que nos había regalado él, yo he elegido traer la muñeca que me regaló a los 6 años. Rubia, delgada, con un vestido viejo verde y unas coletas, siempre con su sonrisa y sus zapatos altos tacón.
-Pedimos atención por favor-Ha dicho la voz de mi tía sacándome de mis pensamientos.
-Evangeline, pasa- Ha dicho una voz desde atrás, que me indicaba que tenia que caminar por en medio del salón con mi muñeca.
Nerviosamente he hecho el recorrido, he visto como todos me miraban y murmuraban con mi aspecto, mis tías sonreían sin parar, y mis primos no paraban de reír al ver mi cara de desagrado por la foto que han elegido de mi abuelo, cada vez al acercarme mas, sentía como mis lágrimas acumuladas en todo el recorrido querían salir, pero he mejorado mi postura y me he enderezado, mi barbilla demostraba seguridad, y así he llegado a el altar, un recorrido de 4 minutos se ha convertido en una película de drama de 4 horas.
-Acércate Evangeline- Ha dicho mi tía con una sonrisa forzada.
He caminado hasta ella y ella me ha dado el micrófono, he tragado saliva nerviosamente y comenzado ha hablar:
¨Hoy, es un día de respeto y honor hacia Carlos Montesco, por lo cual pido atención. Mi familia ha organizado una actividad hermosa, para que grandes y pequeños disfruten y así recordar el cumpleaños de mi abuelo como se debe, con alegría y sonrisas. Mi abuelo era un gran hombre, con características serviciales y amorosas, para todos nosotros. Sus sonrisas se contagiaban y así crear un mundo lleno de felicidad¨
(...)
Ha terminado la actividad y he decidido ir casa de mi madre. Últimamente mi madre y yo no tenemos contacto, y sus días los pasa sola desde que tengo mi casa.
Eran las 6:00 p.m, e iba caminando sola por la ciudad, tratando de buscar un taxi, pero creo que mi querido universo se ha puesto en contra mía y así prohibirme encontrar un taxi. Cuando por fin me he encontrado un taxi he decido dirigirme rumbo a la casa de mi madre.
Cuando he llegado he abierto la puerta y me he encontrado con una sorpresa que me provocaba agarrar un cuchillo y asesinar a mi madre.
-Hola!-Ha dicho mi madre amablemente.
Pero he hecho un gesto para que mi mamá fuera a la cocina, sin quitar mi mirada de odio hacia él.
-¿Que hace este tipo aquí-he dicho después de cerrar la puerta de la cocina.
-¡¡¡¡¡Sorpresa!!!!-ha dicho mi mamá con una sonrisa en su cara.
-¿¡Qué hace este hombre en mi maldita casa!?-He dicho acercándome a la zona donde se ubicaban los cuchillos.
-Esta no es tu casa Evangeline- Ha dicho mi mamá firmemente.
-Este idiota me violó y me hizo abortar a un bebé, y aparte de todo poner un cuchillo en mi cuello y amenazarme con que te mataría- He dicho mirándola a sus ojos muy enojada.
-Ha cambiado- Ha dicho mi madre saliendo de la cocina.
Con ganas de matarla he decidido salir, mi cara enojada le daba a entender al hombre que su presencia me molestaba. Pero era una molestia nivel:
"Prefiero tener a Donald Trump a mi lado que a ti"Mamá ha decidido cocinar unos frijoles y yo he preferido quedarme en la sala, concentrando mi vista al celular. No obstante, una discusión entre mi madre y Gabriel ha comenzado y así ha provocado que aparte mi vista del celular y mire la cocina.
-Limpia esos platos- Ha dicho Gabriel enojado.
-De acuerdo-Ha dicho mi madre con un hilo de voz.
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Mi Muñeca Rota
Teen FictionEvangeline es una de las muchas jóvenes que no son escuchadas por el mundo, y necesitan ayuda, cada capitulo de su vida se llena de suspenso y temor. Esta es una historia de identificación y ayuda, con partes de novela y comedia, es una combinación...