Un mes AkaFuri (yaoi)

11. Experimentos científicos

"En otras noticias, se supo del incendio de una de las instalaciones científicas clandestinas del grupo OKA DELTA. Aún no se tienen detalles de lo acontecido, pero hasta ahora el número de muertes llega a los 100 entre científicos y experimentos..."

Furihata apagó la televisión en ese momento, no le gustaba ver ese tipo de noticias, porque todos esos laboratorios clandestinos eran, en su mayoría, de animales que sufrían demasiado y eso hacia que su corazón doliera. 

Después de desayunar tomo sus cosas y se encamino a la universidad para poder encontrarse con sus amigos. Todos estaban en carreras distintas, pero los unía el amor por el basquet  y no es que fuera el mejor en dicho deporte, sus amigos parecían ser mucho mejores en ese ámbito. Pero le gustaba jugar con ellos, de vez en cuando, cuando el tiempo se los permitía. 

Al llegar a la universidad los pudo ver, los saludo con una alegre sonrisa y así todos comenzaron a hablar, ponerse al día, al menos hasta que sus propias clases comenzaran. 

— Escuche que ese laboratorio estaba experimentando con personas - comentó Takao, uno de sus amigos - No puedo imaginar que lastimen a las personas - hizo una mueca, siendo su profesión elegida la de enfermería, encontraba sentido que no quisiera dañar a las personas 

— Yo solo sé que estudiaban ciertas características de los animales - explicó Sakurai con pena 

— Todo eso me suena a película de ciencia ficción, mejor ignoremos eso - comento Kasamatsu, el mayor de todos 

— Eso, no podemos dejarnos llevar por rumores - asintió Kagami mientras comía un sandwich 

— Si, en dado caso, comienza el apocalipsis zombie, ya saben donde nos juntamos - bromeó Himuro, el segundo mayor 

— El departamento de Kagami - asintieron todos bromeando como siempre 

— ¡Hey! - reclamó el mencionado 

Continuaron bromeando por un buen rato, hasta que se despidieron para que cada uno pudiera ir a sus clases y se despidieron por ese día, lamentablemente ese día sus horarios no concordaban del todo, debido a eso no podrían regresar juntos. 

...

Ya era bastante tarde cuando Kouki decidió regresar a su departamento. Se le había pasado el tiempo después de haber encontrado un libro interesante en la biblioteca, ahora debía regresar a su propio departamento solo y con un poco de miedo debido a la oscuridad. 

Ya casi llegando a su departamento, en un callejón escuchó ruidos, no sabía de que se trataba pero prefería apresurarse antes de encontrarse con alguien peligroso. Estuvo a punto de irse hasta que escuchó el gruñido adolorido de un hombre y el inconfundible olor de la sangre. 

No quería acercarse, podría simplemente irse y llamar a la policía, dejárselo a ellos y ya. Pero no podría con la culpa si algo le pasara a esa persona, tal vez estaba herida de gravedad y si no se hacia presión, podía morir en cualquier momento. 

Aun con temor, se acercó al callejón, iluminando con la linterna de su celular y encontró un rastro de sangre. Al acercarse cada vez más, observo a un hombre con cabello rojo, un tono de rojo más claro que el de Kagami, un hombre bastante guapo a decir verdad. 

Lo observo bien, sus tobillos y muñecas estaban lastimados, demasiado lastimados. Se notaba que algo los había presionado demasiado, o que algo había rozado hasta hacerle esas terribles heridas.