Flower Boy

Amistades

Una semana más pasó y se prestó la plática sobre su ausencia, Sajani explicó que ella había salido de viaje familiar y que se había llevado a Angelique con ella, cosa que no era cierta puesto que me dijo habían regresado el domingo y yo a la pelirroja la había tenido en mi casa el viernes, dos días antes de su supuesto regreso; toda esa historia llena de mentiras me hacía dudar un poco sobre la relación entre las dos muchachas ¿Eran realmente tan amigas? Es más ¿Eran amigas? Angelique había llegado ebria o bajo el efecto de alguna droga a mi casa y por eso no recordaba nada, según ella Sajani era la que le había preparado la bebida previa a su pérdida de conocimiento ¿Pero qué tan cierto era eso? Aún me faltaba saber la versión de la morena, y preguntarle no era una opción puesto que la más alta me había pedido no decirle nada a Sajani sobre nuestro encuentro el fin de semana.

Al término de las clases las dos jovencitas pasaron por mí en el ya conocido auto descapotable color amatista mate de Angelique. Sajani me venía explicando que iríamos a la fiesta que el quarterback del equipo de la escuela organizaba cada año para celebrar la finalización del periodo de exámenes.

- Pero el primer período ni siquiera ha empezado, es dentro de dos semanas.

- ¿Primer periodo?

Las dos se preguntaron al mismo tiempo, y tuve que explicar que por llevar un promedio de diez y haber metido materias de más y talleres pasando la hora de salida general mis exámenes se dividían en dos periodos: el primero que abarcaba la primera parte del curso, y el segundo, que era prácticamente el resto de los temas.

- ¿Qué? Eso es completamente injusto, que te dividan el curso en dos partes ¿No es más sencillo que hacer un examen único que abarque todo el curso?

- Supongo... pero así me califican a mí.

- ¿Y hay más como tú?

- Otros dos, una chica y un chico, hacemos los exámenes del primer periodo en un horario extracurricular.

- ¡Qué injusticia! — Gritó Sajani a garganta pelada — Yo también quiero.

- Si te calificaran así no reprobarías una vez, sino dos veces — La morena hizo un mohín y Angelique se echó a reír.

- De todas formas — interrumpí —, su periodo de exámenes ni siquiera ha empezado ¿Y festejan que ya acabó? ¿Eso no es ilógico?

- Robert va a ser transferido a una universidad estadounidense con beca deportiva por su desempeño en el football.

- San Francisco, va a jugar para los 49ers, por eso va a adelantar la fiesta.

- Bien pudo haber dicho que era fiesta de despedida.

- Kenma, no seas aburrido.

Las chicas comenzaron a discutir un poco luego de un comentario de la morena, Angelique solo le había dicho una broma y la otra muchacha se puso a la defensiva, al parecer no estaba de un buen humor ese día. Preferí no confrontar la situación y posé mi brazo sobre el borde el auto para luego recostar mi cabeza, el aire era fresco, perfecto para el sol abrumador que estaba haciendo. Antes de salir del vecindario Sajani se quejó de que Angelique había dejado el capote en su casa — ¡Está haciendo un calor de los mil infiernos! ¿Qué te pasa por la cabeza? —, la otra chica solo le contestó con un revoloteo de manos. Con esas palabras Sajani dejó de entablar conversación, y todo lo que restaba de camino la tensión en el carro era palpable, no me gustaba porque me hacía sentir incómodo, no es como que yo fuera una persona muy platicadora pero ellas siempre tenían un tema para desmenuzar, así fueran las porristas de la escuela o los cerebros de chorlito que tenían por novios, también solían burlarse mucho de los jóvenes jugando a las pandillas; entonces que estuvieran tan calladas me inquietaba.