Differents Worlds © (Pausada)

Capítulo 11

CAP 11

Sola.

Me encontraba sola, siempre lo estoy.

Llevaba aproximadamente una hora sentada, llorando. Que patético. Según mis cálculos no deben ser más de las dos de la mañana.

El escenario no es lindo que digamos; De noche, la carretera está vacía, árboles frondosos por todos lados, la música de la fiesta se escuchaba lejos.

Levanté mi mirada y me puse de pie. Mire a mi alrededor buscando con esperanza alguna parada de autobús. Nada, no hay nada. Me di por vencida y caminé.

Un relámpago ilumina todo el camino haciéndome sobresaltar. Mire hacia el cielo y gotas de agua comenzaron a caer en mi cara. No me podía ir peor.

Ignoré la lluvia y seguí caminado, la lluvia me empapaba, mientras el
frío se hacía más presente en mi cuerpo. Suspiré. Por qué esto que pasarme a mi.

Seguí mi camino, con la mirada gacha. Por alguna u otra razón levanté la vista, alertada, mire a los lados fijando mi vista hacia los árboles del otro lado del la carretera. Habían dos personas, dos hombres. Estos me miraban fijamente, examinándome. De un momento a otro desaparecieron haciéndose paso entre los árboles. Y ahí fue cuando entre en pánico.

Empecé a correr mirando a todos lados, la lluvia y el viento no ayudaban. Mi piernas dolían de tanto caminar, estaban demasiado débil para correr más, pero hice lo que pude hasta que me tropecé con alguna piedra y caí de rodillas apoyando mi manos al suelo.

Me levanté para volver a correr a donde sea que me lleven mis pies. Pero al momento de volver a correr choque con algo.. o más bien alguien.

Tuve que levantar mi miraba para ver quién era, es muy alto, horriblemente alto. Su mirada se cruzó con la mía y el miedo corrió por mis venas. Su mirada era de una persona mala y con intenciones no muy buenas para mi que digamos. Detrás de este apareció otro hombre aún más espeluznante que el que tengo en frente y me di cuenta. Eran los dos hombres que me miraban a lo lejos.

Mierda!

Traté de volver dándome la vuelta y echándome a correr, pero de inmediato sentí unos brazos que me tomaban por la cintura fuerte y con la otra me tapaba la boca.
Pataleo, grito, hago todo lo posible para zafarme. Las lágrimas salen de los ojos descontrolada mente, no sé qué hacer, Dios ayúdame.

Mientras el primer hombre me sujeta el otro abre la puerta de camioneta negra. Mi ojos se abren de sorpresa y comienzo a forcejear más. Logró zafarme dándole un codazo en el estómago y trato de huir pero de nuevo me atrapa, pero está vez me da un puñetazo en el rostro. Maldito.

Mi cuerpo cae sobre la acera fría, raspándome las manos y parte de la cara. Sentí el sabor a metal en mi boca.

- Tenías que ser una Stacey- dijo el primer hombre mientras se acercaba a mi con intención de golpearme más.

Las luces de un auto ya conocido para mi nos cegaron. Cerré mis ojos, mi cuerpo dolía y tenía frío. Me desmayare.

Lo siguiente paso rápido, vi como un persona se bajaba del auto y caminaba hacia los agresores. Solo se escuchaban golpes y yo no podía levantarme.

La camioneta de los malditos se puso en marcha y se fue.

El sonido de la lluvia fuerte se hizo más presente, mis ojos se fijaron en la persona que vino a defenderme, estaba apoyando en sus rodillas, respirando con dificultad, su cara, no tenía ni rasguño. Su mirada se fijó en mi y se puso alerta y ahí me di cuenta de quién era. Ares.