El tiempo pasa y las personas crecen en todos los sentidos, Adrien y Marinette entrarán a la universidad y se reencontraran, pero lo que no saben es que tendrán que compartir una habitación para ellos dos solos.
¿Qué pasará entre ellos dos?...
¡Desc...
Era una mañana nueva. Después de cuatro años, nuestra querida Marinette entraba a la universidad, pero no hay que olvidar a Adrien, el chico "perfecto".
— Marinette, Marinette— intentaba despertarla una pequeña criatura color carmín. Dió un suspiro pesado— ¡MARINETTE, ADRIEN ESTA AQUÍ PIDIÉNDOTE MATRIMONIO!— gritó, pero fue en vano, su portadora seguía dormida— vaya, parece que si lo superó muy bien— murmuró.
La criatura que se hacía llamar "Tikki" fue a la cocina por un vaso de agua, llegó a la habitación y se lo hechó en la cara a su portadora, ella despertó de golpe y así dejando ver sus hermosos ojos azules.
— ¡Tikki! no me despiertes así— miró el reloj— ¡rayos! voy tarde, muy muy tarde— decía una y otra vez mientra se ponía una mini-falda.
-—¿cómo piensas ir vestida en tu primer día de universidad?— preguntó Tikki.
— yo pensaba estilo colegia, pero más sexy— dijo con una risilla.
(Marinette iba vestida de esta manera...)
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— ¡vaya, te vez hermosa Marinette!— halagó Tikki.
— gracias— dijo para después coger su bolso y salir corriendo, pero antes le dijo a Tikki que se escondiera en su bolso.
(...)
La azabache ya se encontraba ante las grandes puertas de la universidad, realmente ya quería llegar a su habitación, estaba muy cansada.
[las sillas del autobús son realmente incómodas]- pensó la chica.
De repente las grandes puertas se abrieron dándole paso a la muchacha, ella ingresó cautelosamente, hasta que se encontró con una señora de unos treinta años.
— buenas tardes, señorita Dupain-Cheng— saludó cordialmente la señora.
— buenas tardes, mucho gusto— saludó de la misma forma.
— acompáñeme, por favor— solicitó.
— claro— respondió.
La joven siguió aquella señora por los grandes pasillos, cuando ya estuvieron en frente de una puerta.
— será su habitación— señaló.
Marinette entró a la habitación, era grande y tenía un litera, un mesita de dormir, un gran sofá y muchas cosas más, el cuarto era bastante detallado.
La chica dió un fuerte suspiro y se dejó caer en la cama que quedaba en la parte de abajo de la litera.
— ahh, estoy tan cansada— expresó la azabache.
— tengo una pregunta, ¿por qué te tienes que quedar a dormir en la universidad?— decía la criatura mientras salía del bolso.
— porque las personas que viven lejos de la universidad les dan el privilegio de obtener un cuarto en ella, siempre y cuando mantengas un buen promedio— respondió.
— y así evitar que lleguen tarde como tú— dijo burlona.
—¡Tikki!— reprochó— pero en realidad sí—dijo con una risilla.
— deberías bañarte para que te relajes— aconsejó— recuerda que todavía falta desempacar— mencionó la criatura roja.
— cierto—
La oji-azul comenzó por quitar su camisa, luego prosiguió a quitarse la falda, así quedando solo en interiores y sus medias veladas.
De repente la puerta se abrió, dejando ver un rubio de ojos verdes, el cual al levantar la mirada sus ojos se abrieron como platos.
— ¡AHH!— gritó la chica.
(...)
— señora directora, exijo saber que hacía este pervertido en mi cuarto— dijo señalando al chico.
—¡yo debería ser el que debería decir eso, ese es mi cuarto!— dijo molesto.
— ¡cálmense!— dijo molesta la señora que estaba sentada en el escritorio— Adrien, Marinette, los dos compartirán cuarto— dijo liberando el humo que salía de su boca debido al cigarrillo.
La chica abrió sus ojos como platos al escuchar "Adrien" y el chico también al escuchar "Marinette".
— ¡¿TÚ?!—
¡Hola! nueva historia espero me apoyen, este libro lo are un poco mas pervertido, regalen me una estrellita que saben que me ayuda mucho, no olviden comentar que les pareció. se despide dilunar. besito (*3*)
