CAPÍTULO NOVENO

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¿Sabes ese algo tan especial que sientes cuando alguien te hace una fiesta sorpresa? Ese sentimiento de asombro, alegría y nerviosismo a la vez, al no saber cómo agradecer a las personas organizadoras todo el trabajo llevado a cabo. Bien. Pues ese es el sentimiento que estaba experimentado Even desde que salió de casa de Isak: estaba asombrado, no se esperaba que todo saliera tan bien; estaba alegre. Joder, estaba más feliz que en toda su vida. Volvía a tener a su Isak. A su lado. Juntos de nuevo; pero sobretodo estaba nervioso. Nervioso porque no sabía cómo hacer ahora las cosas. Cómo hacer que volvieran a ser completamente felices, olvidándose por completo de esos días negros que habían pasado.

Inmerso en sus pensamientos, Even llegó a su casa con una sonrisa, la cual, en estos momentos, era imposible de borrar.

-¡Hola, mamá! -le dijo él acercándose a ella y dándole un beso.

-¡Even!, ¿Qué tal com tus amigos? -le preguntó ella haciéndole un espacio en el sofá, para que se sentara junto a ella.

-La verdad es que no he estado con mis amigos, mamá. -empezó a decirle él sin quitarse la sonrisa de la cara. -Estaba con Isak.

-Oh... pensaba que...

-Y así era, pero ya no. -Even rió, sin poder controlar su felicidad. -Hemos tenido unos días de mierda, pero por fin se ha aclarado todo y estamos juntos otra vez. Siento no habértelo dicho mamá, pero no quería anticiparme a los acontecimientos por si me rechazaba de nuevo y quedaba como un pringado.

   Su madre sonrío ampliamente. Se notaba a leguas que su hijo estaba feliz de nuevo, y no había nada más que elle quisiera.

-¿Quién podría rechazarte a ti? -le dijo acariciando la cara a su hijo. -Eres el chico más guapo del mundo sin ninguna duda ¡Todos te querrían a su lado!

El muchacho rió ante el comentario de su madre. Era la primera vez que le había mentido en algo, y lo cierto es que había sido una mentira piadosa. Como había dicho, no quería decirle que iba con Isak, porque ella pensaría que estaban juntos de nuevo, y lo último que necesitaba Even hacía unas horas, es que alguien pensara que estaban juntos. Le habría dolido demasiado. Así que optó por una mentira pequeña.

Pero por suerte, todo había salido bien. Demasiado bien.

Even subió a su habitación y se puso a estudiar unas horas, maldiciendo a todos los profesores y asignaturas posibles por mandar deberes tan aburridos y temarios tan incomprensibles. Cuando acabó ya era tarde, así que cogió su móvil y se tumbó en la cama, dispuesto a relajarse un rato.

"Creo que se te ha olvidado algo en casa, no? ;)"

Vio el mensaje de Isak, el cual estaba acompañado de una foto de su mechero y su paquete de tabaco. Instantáneamente sonrió y contestó:

"O puede que lo haya hecho aposta para que mañana en el colegio tengas que venir a buscarme :P"

La verdad era que se le había olvidado por completo. Estaba tan nervioso en casa de su novio, que lo último en lo que pensó fue en meterse de nuevo en el abrigo los cigarrillos y el mechero.

"No necesitas ninguna excusa para que te busque."

Boom. Al leer eso, el corazón de Even explotó. Pero no como había explotado los días anteriores. Explotó del modo más bonito que existe. Explotó por ser correspondido por el amor de su vida, y por tener la suerte que tenía al haber encontrado una persona así.

Después de pasarse un rato hablando Isak, su cabeza hizo 'click' y empezó a trabajar en algo que estaba seguro que a su novio le encantaría. Estuvo bastante tiempo haciéndolo hasta que era hora de dormir.

Esa era la primera noche en varios días que se acostaba feliz, con ganas de levantarse al día siguiente e ir a la escuela, de comerse el mundo y decirle a todo el instituto que sí, que Isak y él estaban juntos. Y eran los más felices del mundo.

Al día siguiente Even se preparó para ir al colegio, y cuando llegó allí fue directo a las taquillas; pero no fue a la suya, sino a la de Isak. Sacó de su mochila el proyecto que realizó en su casa por la noche: uno de sus dibujos. En una parte del folio estaba Isak normal, de pie, sin hacer nada en especial, y en la otra parte estaba con una actitud rebelde y a la vez contenta. En la parte superior del folio había escrito "para la persona más bipolar pero mona a la vez del mundo entero".

Que humor más negro tienes, Even. Joder -pensó él riendo al dejarle el dibujo en la taquilla.

Las horas pasaron y por fin llegó el descanso, donde Even esperaba poder ver a su chico de una vez. Salió al recinto abierto y lo vio hablando con sus amigos. Cuando sus miradas se cruzaron, Isak les dijo algo a estos, y en seguida fue a su lado.

-Hey. -le dijo él con una sonrisa.

-Hola. -le respondió Even de la misma forma. -Creo recordar que tienes algo mío.

-Oh... puede. -Isak rió y se metió en el instituto, con Even siguiéndole a su lado. -Lo tengo en clase así que habrá que ir a por él.

Recorrieron los pasillos que separaban el patio con la clase de Isak, y cuando entraron, el chico abrió su mochila y cogió los cigarrillos pertenecientes a Even.

-Toma. -le dijo dándoselos. -Persona más bipolar y mona del mundo.

-Veo que has visto mi regalo. -le dijo Even acercándose más a él mientras reía. -Ya echaba de menos hacerte dibujos de ese estilo.

-Estás loco, ¿lo sabías?

-Por ti, sí.

En vez de contestarle, Isak unió sus bocas. Por fin. Había extrañado tanto sus besos. Sus labios jugaban entre ellos y, en un momento dado, Even introdujo su lengua en la boca de su novio, el cual respondió realizando el mismo gesto.

Se necesitaban. Lo notaba en cómo se besaban, tan necesitados el uno del otro. Tan deseosos de tenerse y de llegar a más. Joder. Estaban en el colegio.

El cerebro de Even reaccionó cuando Isak comenzó a introducir la mano por dentro de su camiseta, acariciándole y queriéndole, como tanto tiempo había anhelado.

-Isak... -dijo él con la voz entrecortada. -Para. Estamos en el colegio.

-Pero están todos en el patio. -sus miradas se cruzaron por un instante, cortando el beso. -No nos pillarán.

Acto seguido se besaron de nuevo, ahora acompañado por caricias por parte de ambos. En un arrebato, Even le quitó la camiseta a su chico, para, en seguida, comenzar a besarle el cuello, el torso, el pecho...

-Joder... Even... -le empezó a decir Isak.

-¿Sí? -le contestó él siguiendo su camino de besos.

-Te...

-¡Ay, por Dios! -dijo una voz que no era de ninguno de los dos jóvenes.

En cuanto la puerta se abrió, Even paró lo que estaba haciendo e Isak se puso su camiseta.

Antes lo dices, y antes nos pillan. -pensó en seguida el chico.

Les habían pillado. Y había sido una pillada demasiado extrema.

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¡Hola!
Ya que ayer salió el trailer de la cuarta temporada, me gustaría saber si os gusta la idea de que sea de Sana y si os esperabais que fuera la última temporada.
Por mi parte he de decir que tenía la esperanza de que fuera de Even, pero entiendo porqué han elegido el personaje de Sana como principal. En fin, ya me diréis que pensáis vosotras.
¡Espero que os guste mucho el capítulo y muchísimas gracias por dedicarme unos minutos de vuestro sábado!💕

STATICDonde viven las historias. Descúbrelo ahora