-¿Isak? -preguntó Even. -¿Qué tiene que ver él en esto?
No sabía qué pensar. Estaba completamente seguro de que su novio no tenía nada que esconder en todo ese asunto; no después de todo lo que habían hablado, aclarando cosas y zanjando otras.
-Prométeme que te creerás lo que te voy a contar. -le dijo Sonja.
-Todo dependerá de lo que me cuentes.
-Entonces no merece la pena que te diga nada. -respondió ella levantándose de la mesa, preparada para irse.
-¡No! -el chico le agarró del brazo, impidiendo que se fuera. -Te lo prometo.
-Vale... -ambos se sentaron de nuevo y, tras un suspiro, ella comenzó a hablar. -Cuando tú y yo lo dejamos definitivamente pensé que ya no querrías saber nada más de mí, por eso, cuando Isak me llamó me sorprendí. Me dijo que te habías ido desnudo de una habitación de hotel y que no sabía qué hacer; entonces fui. -la chica bebió un poco de su café ante la mirada atenta de Even, que le indicaba que siguiera. -Lo cierto es que parecía muy asustado cuando lo vi; pero Even, luego me di cuenta de que no tenía ni idea de qué estaba pasando... ¿Por qué no se lo dijiste?
-Quería que me tratara como una persona normal. -empezó él casi llorando. -Por una vez, Sonja, quería ser como los demás.
-Tú no eres como los demás...
-Joder, lo sé. -dijo frustrado. -Me doy cuenta todos los putos días, cuando tengo que tomarme la medicación.
-Even... -dijo la chica dudosa. -¿Estás seguro de que Isak quiere estar contigo?
Ante esas palabras, el muchacho se paralizó. Era obvio que su novio quería estar con él; llevaban unos días muy buenos, no podía ser todo una farda o cualquier otra cosa que pensara Sonja.
-¡Pues claro que sí!
La chica suspiró de nuevo, por enésima vez aquella tarde, y dijo:
-Él me dijo que no quería estar con nadie enfermo.
-A mí también me lo dijo hace tiempo. -respondió él un poco más aliviado. Todo ese asunto ya estaba hablado. -Pero ya lo solucionamos.
-Creo que no me entiendes. -empezó a decir Sonja. -Cuando le conté lo que te pasaba, dijo que no estabais saliendo en serio, que todo era un rollo, para experimentar. Que nunca saldría con alguien como tú, y que podía volver contigo si quería.
Even procesó sus palabras. No podía ser cierto; a lo mejor fue la furia del momento por sentirse traicionado y mentido. Pero ahora no podía ser cierto.
-Sonja, Isak y yo cortamos, pero ahora estamos juntos otra vez.
-¡Y no lo entiendo! -dijo ella levantándose de nuevo, pero esta vez, saliendo de la cafetería.
-Isak me dijo que le dijiste que me dejaras. -Even salió también, y se paró frente a ella.
-Lo hice. -dijo ella llorando. -No podía soportar lo que estaba diciendo de ti. Yo te quiero, Even. Aunque tú a mí no, yo te sigo queriendo, y que una persona diga todo eso de otra a la que aprecias... duele.
-No entiendo nada, ¡joder!
El chico comenzó a llorar. No sabía a quién creer: por una parte se hallaba Sonja, su ex, que le decía que Isak, su novio actual, había dicho cosas horribles de él; y por otra parte estaba Isak, que le decía que Sonja le había obligado a dejarle.
Estaba mareado, completamente mareado. Pero sobretodo se sentía traicionado por ambas partes.
-Voy a llamar a Isak. -dijo él decidido.
-¿Qué? ¿Por qué?
-Ya está bien de que cada uno me cuente su versión. -estaba nervioso. Temía que le diera un ataque en cualquier momento. -Voy a decirle que venga.
Sonja asintió, y el joven pulsó el botón de llamar sobre el nombre de Isak. Tras tres toques, el chico habló:
-¡Heeey! -saludó como siempre. -¿Cómo ha ido?
-Isak necesito que vengas. Ahora mismo.
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STATIC
FanficLa noche había empezado brillante para Even; estaba en una suite con su Isak, amándose, mostrándose todo el cariño del mundo y pasándoselo como nunca. Pero de pronto todo se volvió negro, y Even salió de la suite, paseando por las calles de Oslo des...