Catch me if you can

Capítulo 10.

Liv despertó muy dolorida y observó a su alrededor algo desorientada hasta que se dio cuenta de que una mujer con bata blanca la estaba acompañando. Cayó en la cuenta de que ella era una doctora y se encontraba en un hospital.

-¿Qué coño ha pasado? -preguntó Liv.

-Alguien te encontró casi muerta en mitad del bosque y te trajo. Estabas muy malherida y recibiste un disparo cerca del corazón.

-¿Se está quedando conmigo?

-No, para nada. Un centímetro más a la izquierda y habrías muerto. Quien te disparó sabía perfectamente lo que hacía. Lo suficientemente cerca cómo para darte un buen susto, pero lo bastante lejos como para mantenerte con vida.

-¿Sabe quién me encontró?

-Sí, era un hombre de unos veintitantos años, rubio, de ojos azules y alto; pero no quiso decir su nombre.

-¿No era un policía o algo por el estilo?

-Que va, era un chico de lo más normal; vestía de manera informal y era bastante guapo.

-Que extraño es todo... -Liv parecía estar confusa. La descripción parecía coincidir con Jared pero, ¿después de dispararle la llevaría al hospital? No, no sería tan tonto cómo para arriesgarse tanto. De todas formas él no era el único chico rubio y alto; podría haberle encontrado cualquiera.

-Liv -comenzó diciendo la doctora-, la policía te busca por haberte escapado de la cárcel.

-¿Cómo sabes eso?

-Porque una amiga tuya me lo ha contado, y además, ahora sales en todos los telediarios. Pero tranquila, prometo no chivarme para que te devuelvan allí.

-Ahora sí que estoy confusa. ¿Quién se supone que te lo ha contado?

-Eso no importa -dijo la doctora saliendo de la habitación, pero justo cuando cerró la puerta tras de sí la volvió a abrir y a entrar en la habitación-. Por cierto, sé de un chico que puede pasarte toda la maría que quieras cuando salgas de aquí -añadió la doctora divertida guiñando un ojo.

-¿Cómo sabe eso de mi? ¿Quién le ha hablado tanto sobre mi?

-A mi también me pasan las White.

-¿Quiénes?

-Emma y Helen. ¿Las conoces verdad? Pues gracias a ellas no tendrás que volver a la cárcel.

-Pero... -Liv no pudo terminar la frase ya que la doctora se marchó.

Oh joder, Helen iba predicando su vida por ahí. Si seguía haciendo eso, mucha gente terminaría sabiendo quien era Liv y acabaría en la cárcel; y por nada del mundo Liv pensaba en volver allí. No, ni muerta. Pero por otro lado agradeció lo que Helen hizo por ella, aquella narco en el fondo era buena persona.

***

Liv pasó varios días en el hospital mientras se recuperaba y por suerte nadie fue a visitarla pudiendo hacer preguntas. Afortunadamente la policía no sabía nada de su paradero y eso ayudaba para cuando saliese del hospital.

-Bueno, ¿cómo te encuentras hoy? -preguntó la doctora.

-Ya me siento mucho mejor.

-Perfecto, porque eso significa que ya puedo darte el alta. Además, no creo que debas pasar aquí más tiempo del necesario; la policía podría venir preguntando por ti.

-Lo sé y eso es un riesgo que no quiero correr. ¿Cuándo podré irme de aquí?

-Necesito hacerte unas últimas pruebas para comprobar que realmente estás bien y podrás irte esta misma tarde.