stay alive, for me; muke

9.

Llevaba el cuaderno a todos lados, había escrito a lo sumo ya como 6 hojas y obviamente tenía más para escribir, pero decidí tomarme un descanso y salir afuera, necesitaba un cigarrillo.

salí afuera en busca de alguno de los chicos, era un lindo día, por lo cual todos estaban sentados en diferentes zonas del patio. Logré visualizar a Michael desde lejos, éste se encontraba solo así que caminé hasta allá.

- Luke. - Dijo cuando me vio. - ¿Dónde estuviste toda la mañana? Te estuve buscando.

- En mi habitación. - Contesté. - Ya sabes, escribiendo.

- ¿El doctor Morgan también te dio esos diarios? - Lo dijo en un tono de burla.

- Am, si. Creo que es bueno, me está ayudando bastante y...-Lo miré y el me miraba como con una expresión de que no tenía sentido lo que decía. - ¿Como sabes de eso?

- Cuando entré aquí me vino con la misma basura, escribí como 3 cuadernos enteros y jamás me ayudó en nada. - Dijo y me dio un cigarrillo, así que lo tomé y lo prendí.

- Yo...creo que es depende de cada uno..- Dije como excusando.

- Luke, todos tenemos problemas aquí, algunos ya son incurables y otros aún tienen oportunidad..u otros que simplemente no aceptan lo mal que están y lo dejan pasar.

- ¿A que te refieres? - Pregunté.

- ¿No supiste lo de Aaron? El desgraciado saldrá. No digo desgraciado porque lo envidie porque va a salir. Sus padres pagaron no sé que mierda y saldrá. Todo un arreglo.

Me entristeció saber eso así que solo suspiré.

- Todo es maravilloso con una familia que le sale dinero hasta del culo. - Dijo Michael. - Si, estoy molesto con Aaron.

- Creo que te escuché discutir con Aaron anoche.

- Si. Es un imbécil.

No respondí a eso, no sabía que decirle.

- ¡Luke! - Un voz llamó por detrás y volteé y era la doctora Davis. - Tienes visitas.

Me levanté, arrojé mi cigarrilo y entré al edificio, salimos hasta la otra parte con la doctora, y pude ver a mis padres sentados en una mesa, rodé los ojos cuando los ví. Pasaron 3 meses y recién se les ocurre aparecer.

- Luke. - Dijo mi madre levántandose de su lugar y se acercó para abrazarme, yo simplemente me alejé un poco mirándola mal, sólo me senté. Ella se volvió a sentar con una expresión triste.

- ¿Que hacen aquí? Esperaba no volverlos a ver nunca más. - Expresé lo más fríamente posible.

- Vinimos a verte obviamente, te extrañamos mucho. - Dijo mi madre.

- Ve a contarle chistes a otras personas, no a mi. ¿Ven como ustedes hacen que mi día se arruine? O mejor dicho, mi vida.

- Luke, ya basta. - Interpuso mi padre. - Queremos estar bien contigo, no entiendo porque eres tan rencoroso.

- ¿Alguna vez te pusiste a pensar en lo mal que siempre la pasé y gracias a que ustedes jamás me tomaron en serio? No está bien que se quieran venir a hacer los buenos padres para quedar bien con los demás, nosotros sabemos que la palabra "buenos padres" jamás existió para ustedes.

- Tal vez si tu no te comportaras como un rebelde estarías bien. - Dijo mi padre . - Quiero que des lo mejor de ti para que puedas mejorarte.

- ¿Lo mejor de mi? Lo siento, no está conmigo eso. - Aclaré.

- Luke...- Dijo mi madre, con lágrimas en los ojos. No la odiaba pero hizo muchas cosas que me ocasionaron malestar. No defenderme para empezar. - Sé que cometimos nuestros errores y te dejamos caer, pero por favor, no me gusta pensar que nos odias por cosas del pasado.

- Si tal vez no tuviera consecuencias las cosas del pasado, no pasaría nada. Pero mírame, mira donde me pusieron ustedes. ¿Realmente piensas que me importa si te sientes mal si los odio? Claro que no.

- Luke, hay algo que debo decirte. - Dijo mi mamá, no la quise escuchar, así que me levanté de ahí y me fui a mi habitación.

Me topé con Michael sentado en mi cama, leyendo uno de mis libros que había traído de casa.

- Tienes muy buen gusto para la lectura. - Dijo el. - He leído la mayoría de estos libros.

Solo le sonreí y me senté a su lado.

- ¿Quien vino a verte?

- Mis padres.

- Fue una visita rápida, solo tardaste 5 minutos.

- No quiero siquiera verlos, no me siento bien cuando los veo, los detesto.

- Te entiendo, aunque de todas formas mis padres jamás vinieron, creo que les quedó muy clara la vez que les dije que esperaba que se pudran en el infierno.

- Michael. - Dije mirándolo.

- ¿Qué?

- Eres increíble. - Le sonreí.

- En enserio, les dije que se pueden ir bien a la mierda, quien mierda necesita a esos seres haciéndose llamar padres, yo siempre fui feliz con mi caja de cigarrillos y mi consola de videouegos.

- ¿Nunca tuviste esa sensación de extrañarlos?

- Creeme que no, no extraño a nadie, difícilmente suelo tener sentimientos hacia alguien.

Cuando dijo eso, sentí una pequeña presión en el pecho, pero no porque me estuviera sintiendo mal o lo que sea, solo que me llegó a doler lo que dijo, pero no entiendo que me pasa, ¿por qué me lo tomo para mal? ¿El no puede amar acaso?

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olaaa *emoji de la ola*

siento que los capitulos son cada vez más pedorros pero es lo mejor que puedo hacer ahre mentira. el colegio me distrae demasiado y no me deja escribir en paz :/ sepan disculpar a lourdes (yo, quien más)

quiero dejar en claro que en cada capítulo que pasa no es que ocurre un día tras otro, tiene un período de tiempo que va pasando solo que yo no lo menciono ;) ahre