17.

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Habían encontrado a Michael unos días después y a los forcejeos lograron traerlo de nuevo al hospital. El día que eso pasó simplemente lo ignoré, hacía mis cosas sin prestarle atención, yo no estaba molesto ni nada con Michael, solo..dolido. Estaba ahí siempre, pero yo no le hacía caso, estaba solo. Más que solo. Chester y Zac a veces venían a hablarme porque todo el tiempo Michael los obligaba a quedarse con el y no venir a hablar conmigo.

Lo entendía, era patético. Un día no lo soporté y opté por encerrarme en mi habitación, solo salía para ir a comer, bañarme o ir a las terapias. Estaba sintiendo la misma sensación que cuando estaba en mi casa, tenía miedo de la realidad, de mi propia realidad. No salía salvo para cosas que eran necesarias..ni siquiera terminé la escuela por culpa de esos pensamientos o de la forma en la que me sentía.

Todo esto a forma de desahogo lo anoté en mi diario, todo lo que tenía que decir lo escribí ahí, especialmente sobre Michael.

-Tengo que ponerte un nombre porque ni siquiera sé como te llamas, amigo. Creo que te llamaré Wilson. -Dije hablándole al pequeño gato, definitivamente se nota que me quedé sin amigos. El felino solo me miró. -Desearía poder tener tu vida, te envidio. -Dije y me levanté de la cama y puse el cuaderno sobre un mueble de ropa que tenía cerca de la cama.

Saqué una cajetilla de cigarros de ahí y tomé uno, necesitaba hacerlo así que aproveché que la situación estaba tranquila y salí afuera a fumar. Me senté en una banca de ahí, el día estaba horrible, supongo yo que está por venir la lluvia, solo habían un par de pacientes y yo afuera, locos tenían que ser.

En un momento me percaté que Michael estaba ahí también, el no notó que yo estaba ahí, por lo que aproveché a observar lo que hacía, suena loco pero lo hacía porque ya empecé a extrañarlo demasiado. Increíblemente Michael Clifford me llegó bastante y demasiado rápido. El se encontraba fumando ahí también mientras realizaba un dibujo creo yo, se veía tan hermoso, su tez pálida y su cabello del casi mismo color de su piel, sus ojos centrados solamente en su dibujo.

Ya basta Luke. Te hizo sentir de lo peor y estás aquí adorándolo y diciendo cosas lindas sobre el. Idiota. En un momento el levantó su vista hacia mi y bajé la mía al instante, que vergueza. Lo miré de reojo y el juntó sus cosas y se fue de ahí, a veces me daban ganas de matarlo porque se hacía la victima pero en estos momentos quiero abrazarlo y decirle lo mucho que significa para mi.

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Daba miles de vueltas en la cama, no podía dormir pero me sorprendió saber que Wilson no estaba a mi lado durmiendo, me senté en la cama y tampoco estaba en la habitación, la puerta se encontraba entreabierta. Por un momento dudé si fijarme si alguien había entrado o qué, pero no van a entrar a robar justamente a mi habitación, así que me animé a revisar, de paso aprovecharía para buscar a Wilson.

Me'levanté de la cama y salí, el pasillo estaba con muy poca iluminación, por lo que fui más o menos adivinando el camino acariciando las paredes, a lo lejos escuché unas risas que provenían de la puerta que se dirigía al túnel, por lo cual caminé hasta allá intentando hacer el menor ruido posible.

Bajé por las escaleras y el olor a cigarrillo era muy fuerte, al igual que las risas. Lo primero que pude escuchar fue la voz de Michael diciendo "entonces Michael me besó y creo que fue lo mejor que me pasó." Me había congelado en mi lugar, Michael robó mi cuaderno y empezó a leerlo, rápidamente corrí hasta de donde provenía la voz, realmente me sentía en una pesadilla.

- Luke. - Dijo Michael sonriendo, estaba sentado sobre un barril vacío ganando más altura que Zac y Chester, que se encontraban escuchando las cosas que leía de mi diario. -Qué bueno que llegaste, justo a tiempo.

stay alive, for me; mukeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora